38 DÍAS: ALTERNANCIA O CONTINUISMO EN VERACRUZ
38 DÍAS: ALTERNANCIA O CONTINUISMO EN VERACRUZ
Uriel
Flores Aguayo
Es
igual decir cambio o estancamiento, alternancia o regresión y esperanza o más
de lo mismo. Prácticamente quedan 34 días de campañas electorales, es decir, lo
que quieran o vayan a hacer tiene que ser ya. Después solo habrá hubieras o
arrepentimientos. Hagan lo que sea, acciones directas o de apoyo, salgan a las
calles, no se conformen con las redes sociales y el WhatsApp; el proselitismo
más efectivo es el que se hace cara a cara, que da razones y motiva.
Este
es el momento de apoyar las alternancias distrital, estatal y federal. Está de
por medio un futuro gris y mediocre u otro que sea colorido y modernizador para
Veracruz. La única manera de conseguirlo es con votos, muchos votos, libres y
comprometidos. Una alta participación hará más difícil que gane el hambre y la
manipulación oficial.
Veracruz
no es una isla, su elección local es parte de la nacional. Importa todo.
Devolver la democracia a nuestro estado puede ser casi estéril si se impone el
proyecto obradorista de concentración de poder y autoritarismo. El curso
nacional nos impacta e interesa sobre manera. Necesitamos ganar la presidencia
de la república y la mayoría en las cámaras de senadores y diputados. Es vital
detener y eliminar el llamado plan C morenista, que significa autocracia y cuasi
dictadura.
Es
tiempo de los ciudadanos. Los partidos en general, siendo un instrumento de
participación electoral, no cuentan con suficiente prestigio
; de
ahí que sea sustancial la participación masiva de la ciudadanía. No es asunto
de partidos esencialmente, no importa, tampoco de Xóchitl u otros candidatos;
ella hace lo suyo y se le reconoce. Esas organizaciones recibirán los votos, es
una cuestión legal; las candidaturas son lo que son, nos gusten o no. Lo
importante es lograr otra alternancia, con sentido plural y de gobierno de
coalición. No hay nada que justifique el regateo de la promoción a las ideas de
la libertad y el voto libre; sin retórica, son tiempos de urgencia democrática;
votamos ahora o no volveremos a tener elecciones libres.
Las
elecciones son percepción y aquí hay una tendencia competitiva cada vez más
inclinada hacia Pepe Yunes. Se respira en el ambiente sus posibilidades reales
de triunfo. Tiene condiciones favorables en varios sentidos: trayectoria,
personalidad, capacidad, el respaldo de una coalición política, simpatía
ciudadana, arraigo, buena imagen y presencia positiva. Su campaña va en
ascenso, este es tal vez el mejor momento de su labor proselitista: se percibe
ganador. Aunque la campaña es acción y sigue una estrategia, no es ocioso una
fugaz reflexión que alerte sobre lo nocivo que pueden ser signos de
triunfalismo. Todavía no se gana. Hay tendencias que deben consolidarse, que
requieren estructura. Siguen siendo tiempos de sumar y apertura. En los hechos
se ha venido conformando una gran coalición política y social, superior a los
partidos que lo respaldan, que debe tener un cause organizativo.
Quienes
estamos en el frente cívico nacional no ponemos condiciones, no buscamos
candidaturas y tampoco andamos peleando espacios. Lo nuestro son las zonas
ciudadanas y sociales, es la promoción del voto y su defensa. El gran contexto
es la lucha por que se mantenga la democracia en México, que se respeten las
libertades y tengamos una ruta de progreso. Somos enlace confiable y comprometido
con los partidos coaligados y sus candidaturas. Llamamos a votar informada
mente y levantamos banderas democráticas. El FCN es pilar de la movilización
ciudadana en México, sin sectarismos ni debates estériles. Con esos partidos y
esas candidaturas hay que enfrentar a la regresión autoritaria.
México
y Veracruz necesitan y merecen mejores gobiernos, que no dividan ni mientan,
que sean serios y se comprometan con el Estado de Derecho y el desarrollo
social. Han sido tiempos aciagos y perdidos. Vale la pena hacer todo para
superarlos. No más ignorancia, ni frivolidad, ni saqueo, ni mentiras. Hay que
sonreír, ya se van.
Recadito:
no a los celulares en las casillas de votación.