A Desaparecidos y Víctimas de delitos, Muerte por Austericidio

HORA LIBRE

Por Álvaro Belin Andrade

Aunque fue la bandera más grande enarbolada por el gobernador Cuitláhuac García Jiménez en su toma de protesta el primero de diciembre, y retomada por el presidente Andrés Manuel López Obrador al día siguiente en la Plaza Lerdo, la llamada Declaratoria de Programa Emergente por Crisis de Violaciones de Derechos Humanos en Materia de Desaparición de Personas en Veracruz prácticamente no ha habido ninguna acción contundente.

En su toma de protesta, en efecto, Cuitláhuac García llamó a las organizaciones internacionales de derechos humanos, incluida la ONU, a participar en un Plan de Emergencia en la entidad y, en el mismo acto, emitió una declaración de emergencia humanitaria por la desaparición de miles de personas a consecuencia de la operación de bandas del crimen organizado, la que fue respaldada por colectivos de familiares de desaparecidos y presentada en el pleno del Congreso local.

Y sabe por qué: en seis meses no había fluido adecuadamente el presupuesto para realizar la búsqueda, localización de fosas clandestinas e identificación de los cuerpos inhumados de manera clandestina.

Para colmo, el 14 de mayo pasado, el comisionado estatal de Búsqueda, Geiser Caso Molinari, le presentó su renuncia al Gobernador por una supuesta situación grave de salud.

La renuncia fue aceptada ese mismo día por el mandatario, quien instruyó al secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, iniciar de inmediato el proceso de selección conforme a lo que establece la ley en materia de desaparición de personas, y se designe a una persona altamente capacitada para encabezar la Comisión Estatal de Búsqueda.

Es la hora en que no hay un sustituto. Este lunes tenía que haber anunciado el gobernador Cuitláhuac García qué pasará con la designación del nuevo titular de la Comisión Estatal de Búsqueda, según lo anticipó la directora general de Cultura de Paz y Derechos Humanos, Mayra Ledesma Arronte, luego de que se declarara desierto el proceso para seleccionarlo. El Órgano Técnico de Consulta del Proceso determinó que los candidatos no acreditaron las capacidades, habilidades y conocimientos idóneos para el cargo. Y sí, de plano ni siquiera se acercaron: de 100 puntos en juego, David Martínez Sánchez obtuvo 18.34 puntos; José Pale García, quien ha sido designado como encargado provisional, 29.41, y Alejandro Ortega Cueto, 33.06 puntos.

Problemas de financiamiento imposibilitan búsqueda de desaparecidos

El problema, sin embargo, no es de personas, de directivos. Hay versiones en el sentido de que el primer comisionado, Geiser Caso Molinari, no renunció por cuestiones de salud personal, sino de salud financiera del organismo recién creado, lo que le impidió realizar sus funciones y obligaciones.

Para su primer año le fue autorizado un presupuesto de 400 millones de pesos, sin embargo, hasta después de su renuncia, la Secretaría de Finanzas y Planeación transfirió los primeros 200 millones de pesos, de manera que –a la luz de los acontecimientos– la preocupación del gobernador García Jiménez por la crisis humanitaria en el estado fue un mero ardid publicitario.

Representantes de varios colectivos señalan que para que dé resultados el próximo Comisionado Estatal de Búsqueda, el gobierno veracruzano deberá de proveerle los recursos económicos, además de que la elección del próximo titular tiene que ser con transparencia, sin influencia política, y sin que sea recomendado de algún funcionario.

Y señalaron que si el gobierno estatal no otorga presupuesto a la Comisión de Búsqueda, el siguiente titular solo “servirá de adorno, porque nada puede hacer sin dinero”.

Las benditas redes sociales

“En un evento en Durango, personas portaban pancartas oponiéndose a la construcción del Metrobús.

-AMLO pregunta: ¿quieren que se construya?

-Respuesta: no

-AMLO: ¡se cancela el proyecto!

Así México. Sin análisis, sin argumentos. Hígado y autoritarismo”. Enrique Álvarez @ealmal

Las renuncias al gobierno de la 4T, a la orden del día

La de Caso Molinari en Veracruz no ha sido la única renuncia que afecta el trabajo humanitario de Morena en el poder. Por las mismas circunstancias, el famoso austericidio,  Jaime Rochín del Rincón presentó su renuncia como titular de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), del gobierno federal, al presidente Andrés Manuel López Obrador.

En su carta de renuncia advirtió que la reducción del presupuesto como parte de la austeridad afecta al trabajo de la Comisión. “Se necesita fortalecer al equipo de personas asesoras jurídicas preparadas y bien pagadas, en lugar de debilitarlo con medidas administrativas que devienen en la reducción de calidad de la atención de los casos y, por ende, en el agravamiento del complicado camino de las víctimas hacia la justicia. Es indispensable, dijo, “un compromiso eficaz, ese que va acompañado de las cifras que revelan, más allá de las palabras, las prioridades de un Estado”.

La renuncia surtió efecto a partir del sábado 15 de junio. En la carta al presidente López Obrador, Rochín dijo: “Considero que es momento de que la política nacional de atención a víctimas sea asumida desde una nueva visión, contundentemente respaldada desde el liderazgo que usted, señor presidente, encabeza en esta etapa de la vida pública en México”.

 “Bajo el impulso del gobierno que usted encabeza, se lograron procesos que antes eran impensables: en los casos de Lydia Cacho, Jorge Antonio Mercado y Javier Francisco Arredondo, así como en el caso Tierra Blanca, se han realizado tanto la reparación integral como la disculpa pública, una medida de satisfacción que establece que hechos como los ocurridos no volverán a tolerarse”.

No obstante, señaló, se requiere de un auténtico compromiso de todas las instituciones del Gobierno de México y de los gobiernos estatales hacia las víctimas; así como de reforzar los mecanismos institucionales que las atienden; no diezmarlos, obligando a racionar el modesto apoyo que hoy reciben.

Una cosa es el discurso, y otro muy distinto es dar el recurso.

Amenaza personal del hospital de Martínez de la Torre con manifestarse

En Martínez de la Torre, el personal del Hospital Civil Manuel Ávila Camacho se encuentra inconforme por los cambios repentinos que ha realizado el director Benjamín Álvarez García, un personaje que siempre se manifestó en contra de Morena, pese a lo cual le embonó bien al Secretario de Salud, Roberto Ramos Alor.

El personal médico y de enfermería señala que las acciones instrumentadas por Álvarez García violentan los derechos laborales del personal de nosocomio, situación que pudiera generar un estallido de protestas en contra del directivo en los próximos días.

Según los trabajadores inconformes, el viernes 14 de junio el directivo giró un oficio al personal de enfermería, sin notificarle 24 horas antes, que habría cambios en el horario de trabajo para el personal vespertino, situación que con anterioridad había hecho con el personal de los horarios nocturno y matutino, generando afectaciones en el servicio.

Comentaron que han tratado de sostener dialogo con el director del Hospital, pero este no ha accedido por su carácter impositivo, arbitrario, déspota e intransigente; y es que, según los trabajadores, lo único que buscan es seguir brindando atención a la población que lo requiere, de manera profesional, lo que no se observa en su director.

Con acciones como modificar los horarios de manera sorpresiva, el director Benjamín Álvarez García ha violentado la ley de Condiciones Generales de Trabajo de la Secretaria de Salud, cuyo artículo 138 establece las condiciones generales que debe de brindar al trabajador.

Hicieron un llamado al titular de la Secretaria de Salud, Roberto Ramos Alor, para que intervenga en este problema antes que crezca y se genere un problema social mayor, pues reconocieron el trabajo que ha efectuado en otros lugares que donde han visto resultados positivos.

No en todas las tiendas escolares hay malos manejos

Luis Manuel González García, profesor y articulista acucioso de la realidad educativa de Veracruz, ha comentado en su perfil de Facebook la situación que guardan las tiendas escolares, hoy señaladas en conjunto de ser un verdadero nido de corrupción, cuando la mayoría de ellas trabaja con base en la normatividad. Su opinión debe ser conocida por el secretario Zenyazén Escobar: 

“Se está haciendo una injusticia fruto de la ignorancia y los deseos de carroñeros de personas cerca de las posiciones de decisión en la SEV (aplaudo lo bueno pero esto es muy malo). Se está asumiendo que en todas las tiendas escolares, cooperativas y cafeterías hay malos manejos y eso es una mentira vergonzosa.

“Como solución para eliminar las cucarachas se propone quemar hasta los cimientos la cocina. Es una idea muy de Morena: para evitar el robo de combustible, cierro la llave en general aunque haya desabasto; para controlar la corrupción en la compra de medicinas, que se mueran los niños enfermos de cáncer esperando sus dosis.

“Yo le diría a quien está tomando estas decisiones: se requiere un análisis cuidadoso de la situación, evaluar escuela por escuela antes de proponer una medida que acabará por paralizar la capacidad maltrecha de las escuelas para resolver los problemas del día a día.

“Secretario, lo están mal informando, le están contando una versión de la situación que va a afectar a las escuelas que funcionan bien, que son las más. 

“Donde exista corrupción o malos manejos, que se atienda, donde no, que se premie. Sobre todo [porque] ese dinero lo produjo la comunidad escolar; la SEV no es el SAT, no tiene por qué andar pidiendo facturas, porque vaya usted a los municipios más lejanos a comprar unas jergas y dos litros de cloro en la tienda, verá que no dan facturas, le dan un pedacito de papel con la firma del tendero, la palabra vale allá. 

“Las escuelas necesitan que les den, no que les fiscalicen lo poco que logran generar, los directores necesitan apoyo no ponerlos debajo de la Espada de Damocles”.

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