Al relevo del “Bola 8” ¡un tabasqueño!
LÍNEA CALIENTE
Al relevo del “Bola 8” ¡un tabasqueño!
Edgar Hernández*
Eric
Cisneros deja la Secretaría de Gobierno poniendo fin a una de las etapas más
oscuras de la política interior de Veracruz, caracterizada por violaciones a la
libertad de expresión, violencia política y sucesivas muertes de los enemigos
del régimen a la par de una escalada de corruptelas sinfín.
La orden vino de Palacio Nacional, el pasado martes 16 del mes en curso
cuando el gobernador Cuitláhuac García, fue recibido por el presidente López
Obrador, quien le enteraría de la determinación a través del jurídico de la
presidencia, Julio Scherer.
Llega en su
lugar, a partir de la segunda semana de abril, Carlos Alberto Juárez Gil,
actual subsecretario de Gobierno, oriundo de Tabasco, tierra de AMLO.
Juárez es
licenciado en Ciencias Políticas, con cero experiencia en la administración
pública ya que su única responsabilidad, digamos de importancia, fue como
asistente de un diputado en la LXIII legislatura.
Su mejor prenda, sin embargo, es ser el mejor amigo del hijo mayor de
López Obrador, José Ramón López Beltrán, que es quien recomienda a Carlos para
tan importante relevo.
José Ramón se
hizo célebre en el marco del primer informe de gobierno de su papá al llegar
acompañado de una reina de belleza, Carolyn Adams luciendo un vestido blanco
con estampado de flores que dejó entrever su embarazo, que conjuntó con unos
zapatos Valentino de 17 mil pesos, y una bolsa Chanel de 100 mil pesos.
Celebre y
también muy criticado este vástago del Peje que nunca ha trabajado, por la
chocolatera multimillonaria y cervecera que apertura en meses pasados con sus
hermanos.
Pero, fuera de lo anecdótico, vale señalar que Juárez Gil, desde la
subsecretaria de Gobierno que ostenta hasta el día de hoy, ha sido el encargado
de llevar los expedientes del exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares y
Clementina “N”, extitular de Sefiplan.
El nuevo titular
es considerado, sin embargo, por su propio partido, Morena, como un hombre de
diálogo que no acostumbra la represión como forma de convencimiento.
Del
otro lado de la moneda, Eric Cisneros tendrá una caída para arriba al ser
nominado por Morena como diputado plurinominal -no hará campaña electoral-, es
decir, será apartado del juego político electoral.
En los hechos, sin embargo, una vez nominado buscará de desbancar a Juan
Javier Gómez Cazarín, como “Presidente de la Junta de Coordinación Política del
Congreso”, con lo que se prevé un choque de trenes entre los morenos dada la
rijosidad tanto del “Bola 8” como de Cazarín, apodado el “Carón”.
Pero será hasta
noviembre.
El punto es que
con la salida de Cisneros se cierra una de las páginas más negras y violentas
de la historia política de Veracruz.
Regresan al imaginario colectivo las páginas negras de este individuo
quien poco antes de iniciar la pandemia –el 14 de febrero, el “Día de la
Amistad”- acusó a los periodistas de estar “reclutados por grupos criminales”.
Y a lo largo de
su infernal camino de amenazas y represión ha sido exhibido por adquirir
propiedades en Baja California con dinero público, según denuncia pública el 16
de octubre del año pasado, de parte del diputado de Morena, José Magdaleno
Rosales.
En su bagaje político negativo también está la inopinada imposición de la
Fiscal General, Verónica Hernández, ligada familiarmente a los Zetas. Verónica
llega a la oficina de Eric como responsable del área jurídica para dar el
brinco a la Fiscalía General de Veracruz donde el cochinero y falta de pericia
son su especialidad.
Al expediente del “Bola 8”, se suma además su incapacidad para sostener
la gobernabilidad en Veracruz tras repetidas embarcadas a su jefe el gobernador
Cuitláhuac García, como sucedió cuando fue secuestrado por los pobladores de
Chinameca, por un tema de relleno sanitario y compra venta de terrenos con
“moche”, aliado con el empresario corrupto, Quintanilla Hayek.
Otro “secuestro”
más de Cuitláhuac se sucedió de parte de la población enardecida principios del
año pasado en Soledad Atzompa “por incumplimiento de compromisos”.
¿Y qué decir de
las repetidas amenazas y los porcentajes exigidos a presidentes municipales?
La dirigencia
nacional del PRD en enero del año pasado llamó al Secretario de Gobierno para
aclarar presunto acto de corrupción en torno a las participaciones federales en
donde se presiona a los presidentes municipales para firmen un documento donde
señalan que recibieron el 100 por ciento de lo adeudado, pero les daban solo la
mitad.
Ha sido asimismo del dominio público su gusto por apoderarse de jugosas
plazas federales y estatales, desparecerlas del organigrama, aunque no de la
nómina, ya que se siguen cobrando.
En otro orden
¿Qué pasó en realidad en la masacre de Coatzacoalcos? Nadie sabe, nadie supo…
¡Eric sí!
¿Y quién gestó
el encarcelamiento de Rogelio Franco en contubernio con Guillermina, ex esposa
de quien fuera el secretario de gobierno de Yunes y actual aspirante a
diputado? ¿Acaso Eric, señor?
Otros santitos que también cuelgan en su capilla son los asesinatos sin
aclarar de dos alcaldesas.
El sibarita
también uso el poder para sus caprichos. El agraciado, desde su llegada de baja
California donde vivió toda su vida, siempre manifestó su gusto por las damas
con representación popular y las periodistas. Ahí están los nombres de sus
recomendadas a posiciones de alto poder con pago de peaje.
Hoy, sin
embargo, tras los idus de marzo, está a punto de cerrarse la página negra del
moreno.
¡Adiós, nunca vuelvas!
PD.- Con motivo de la semana mayor esta columna dejara de
escribirse los siguientes días, no así el programa en redes “Línea Caliente”
que se trasmitirá hasta el miércoles. Nos vemos y leemos el 5 de abril.
Tiempo al
tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo