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AMBULANTE asaltó a Coatepec

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El pasado lunes a las 7:00 de la noche en el parque, el autor intelectual temblaba de nervios al ver 200 sillas vacías y todo dispuesto a iniciar la gira AMBULANTE 2015, gira de documentales que recorre algunas ciudades del país y del extranjero desde hace 10 años, un proyecto que lideran los actores Diego Luna y Gael García.

Los jóvenes cineastas se encuentran atrapados, sin oportunidades para producir y exponer sus propuestas fílmicas. El cine comercial gobernado desde Hollywood y el monopolio de las distribuidoras cierran sus accesos para enlatar un cine alternativo que propone en su mayoría una visión de la realidad de la que todos quieren olvidar, demandas sociales, o historias que no corresponden a los valores comerciales, es decir que no venden e incomodan.

Así conocimos a Arturo González Villaseñor, un joven mexicano de 28, egresado de la UAM Xochimilco en Comunicación Social, se mostraba nervioso, eran las 7:30, poco a poco el público se instalaba, los curiosos preguntaban al ver la pantalla:  ¿Qué habrá? Mientras él pedía que ya no se coloraran más sillas. 7:45 la expectación crecía, al igual  que los nervios del director. En un cerrar de ojos entre fotos, entrevistas y saludos, la sala ambulante de Coatepec se llenó, justo cuando iniciaron los cortos del Festival de Cine Documental Ambulante. El ganador  del premio al mejor documental en el Festival Internacional de Cine de Los Cabos, Baja California Sur 2014, como observador profesional cuidaba todos los detalles,  detuvo al vendedor de plumeros  le tomó un sacudidor que sirvió para subir su jorongo y tapar la luz de los faroles del parque, además de dar indicaciones del audio a los operadores.

Con estos detalles nos mostró como fue hilvanando su opera prima “Llévate mis amores”. Que retrata en cuerpo y alma al grupo de mujeres “Las patronas”, que desde 1995 prepara y lanza comida a los migrantes que van a bordo del tren la bestia. Esto sucede  en la localidad La patrona del municipio Amatlán de los Reyes, Veracruz.

El rodaje duró 3 años en los que convivió con ellas y su labor humanitaria, fueron viajes, idas y venidas, donde surgieron nuevas historias e ideas, al mismo tiempo que el director conoció su propia fortaleza, su empeño y constancia para seguir tocando puertas a pesar de las negativas para filmar. Ese mérito se plasma en la obra, hasta fusionarse con  la misión de las patronas.

Los 90 minutos del filme a pesar de las distracciones propias de estar en la calle, el público no se movió de sus asientos, logra conectar diversas emociones, tensión al pasar el tren el sonido que va de grave a los agudos en un instante, donde las valientes mujeres arriesgan el físico para dar bolsas con arroz, frijoles, y totopos, pan cuando hay, y agua. Recuperando la importancia de las acciones individuales para transformar la realidad desde la cotidiana acción de cocinar.

En esta crónica se engrandece,  cuando regala escenas  de fragmentos de vida de cada una de las mujeres que participan, nos comparten desamor, tal vez un  olvido, un sueño, una esperanza, tristeza,  llanto y sentimientos por el dolor ajeno. Solidaridad presente sin importar su difícil condición socio económica. Gestos de amor y amistad que brindan a manos llenas al paso del tren La Bestia. El titulo quedo perfecto. Llévate mis amores. Amor de madre para consolar, de hermana y amigas cómplices. Asumen diferentes roles: para cuidar, a los heridos víctimas de la bestia, del abuso de autoridades y el crimen organizado.

El cine toma por asalto el parque Hidalgo de Coatepec, un éxito rotundo, informar, sensibilización que se manifestó en donativos en especie. Ambulante tomó el parque por asalto.

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