APODOS COATEPECANOS (II)
APODOS COATEPECANOS (II)
René Sánchez García
A petición
de algunos de mis lectores de esta columna periodística, hoy continuo con la
segunda parte de algunos apodos o sobrenombres que les impusieron a varios
coatepecanos que conocí desde niño y que ahora forman parte de la historia
popular de nuestra localidad cafetalera.
Muégano: Originario
de Toluca, llegó a estas tierras en los cuarenta. Se hizo famoso con sus dulces
que ofrecía junto a la terminal de autobuses Excélsior. Amante de los deportes
toda su vida, así por ser el único en distribuir periódicos y revistas en la
calle de Campillo.
Tío
Cabe: Hombre robusto y canoso, amante de la fotografía. Tuvo
su estudio en la calle de Colón. Pintor y admirador de las féminas. Se sabía
que una fotografía de una primera comunión la entregaba cuando la niña cumplía
sus XV.
Tropaleo: Hombre
chaparro y moreno, de oficio zapatero remendón. Tenía su pequeño taller en el
mercado municipal. Tardaba los años para entregar un cambio de suelas.
Chamaquis: Hombre regordete y de baja estatura. Vecino de la calle de Constitución,
solterón, amante de los toros y de las ferias. Escribía para Diario de Xalapa y
El Regional.
Águila
Negra: Hombre alto y delgado, siempre vestido de negro al
estilo charro cantor. Aficionado a cantar en las cantinuchas de la calle de Lerdo,
por lo que se le veía siempre con copas.
Chiguís: Toda
una leyenda por su actividad a la que se dedicó siempre. Alguien me comentó que
varias veces se la pasó preso y que falleció en uno de los baños de la
fortaleza de Perote.
Manuelón: Hombre
corpulento y alto, manejó un taxi de la calle de 5 de mayo. Chofer preferido
por las señoras ricas de avanzada edad. Falleció en la terminal del ADO en la
avenida Ávila Camacho (Xalapa) al bajar para abrir una puerta trasera de su
auto.
Canillas: Hombre
alto y súper flaco, dedicado a manejar autos y camiones. Vecino de la calle de
Hdez. y Hdez. Falleció al chocar su camión en el arco a Coatepec, cuando se
encontraba frente a la nueva gasolinera de la carretera Coatepec a Xalapa.
Pipias: Buen
Médico, Cirujano y Partero, vecino de la calle de Colón, desde hace como 50 se
fue a radicar con su familia a Estados Unidos. Aún se le recuerda por su don de
gente en su consultorio y en la calle. Cuando partió le obsequió a mi padre una
fina perra dálmata de nombre “Sandy”.
Pepe
o Pepito, el de las Flores: Hombre (¿?) de baja
estatura, bastante risueño con los varones de su tiempo. Trabajó como 50 años
en la casa de Doña Inesita, de la calle de Jiménez del Campillo, donde existió
un estudio fotográfico. Era allí conserje y mandadero. Caminaba con estilo
Cantinflesco.
El
Diablo: Político teocelano del sector campesino que llegó a
ser Presidente Municipal de Coatepec, allá por los años 60 del siglo pasado. Se
le temía por su feo carácter.
Chaguito: Hombre
conocedor de todo lo que sucedía en Coatepec. Vecino del Barrio de la Luz,
donde tenía un taller rústico para elaborar comales, recogedores, escobas para
jardín, todo de lámina. Vendía sus productos los domingos por el Monumento a la
Madre, orgulloso por tener un hijo en la Escuela Naval.
Millo: Abogado,
profesor en la Facultad de Derecho de la UV. Vecino de la calle de Zamora,
aficionado a las ferias y al vino. Durante tres años fue Presidente Municipal
de Coatepec, en los tiempos de Hernández Ochoa como gobernador de Veracruz.
Tolín: Médico
con especialidad en niños. Vecino de la calle de Hidalgo donde consultaba por
las tardes. Uno de los primeros médicos cuando se fundó la clínica 17 del IMSS
en Coatepec.
Cocol: Chofer
por muchos años de Transportes de Carga Coatepec. Hijo del legendario chofer de
apellido Pozos Mora, él de la unidad 23 de Excélsior. Vecino de la calle 16 de
septiembre y de Hdez y Hdez.
Goyo
Estevez: Hombre de baja estatura, risueño, dedicado a la música
de tríos, donde una guitarra era su instrumento de trabajo. Cenó por años en
una fonda llamada “Chispita” de la calle de Constitución. Existe una placa
recordándolo en el Salón Agrícola del centro de esta ciudad.