Campaña de odio contra Pepe Yunes
Campaña de odio contra Pepe Yunes
Por Edgar Hernández*
La consigna es atajarlo
para que no llegue vivo al 2024.
Bajo la consigna de
que hay que pararlo a como dé lugar, chairos, cacalovers y boots han desatado
una campaña de difamación, rumores insanos y ataques de carácter familiar contra
Pepe Yunes, quien actualmente recorre el distrito electoral IX de Coatepec, en
busca de la diputación federal.
La embestida es en
previsión de que se les escape y de el brinco rumbo a la sucesión gubernamental
a disputarse en tres años.
No bien la mañana del
domingo 4 del presente arrancó su periplo electoral en Perote, justo en la
tierra que lo vio nacer, que la horda Morena se le fue a la yugular
descalificando y cuestionando hasta su forma de andar.
Que si no gustan los
zapatos desgastados que porta; que si el sombrero de paisano no le queda porque
“es fifi”; que si hay mas banderolas priistas que panistas o perredistas; que
si es corruptos… y lo último, que en su equipo de campaña hay Covid-19 que andan
diseminando entre los simpatizantes asistentes a sus mítines.
¡Puras pendejadas!
Cuando la cruzada
nacional ¡Va por México! sostiene y argumenta el peligro que representa Andrés
Manuel López Obrador y, en el mismo sentido en Veracruz con Cuitláhuac García, la
chairiza ya no haya como atajar al mejor exponente de la oposición partidaria.
La realidad es el
profundo miedo a la derrota que los hace acometer imbecilidades.
José Francisco Yunes Zorrilla,
oriundo de Perote, es el personaje de la política que más prestigio guarda en
las filas de su partido y amplios sectores de la población.
Es un político de
valía, un caballero con la etiqueta probada de honestidad, prenda que no
distingue prácticamente a ninguno de los aspirantes en turno de Morena,
excepción hecha de Ricardo Ahued.
La desmemoria es
intencionada.
De siempre ley no
escrita era el respeto a la familia en toda contienda electoral. Hoy, sin
embargo, el molde se rompió al emprender la bufalada chaira una ola de groseras
acusaciones y señalamientos que lo único que están logrando es la victimización
de Pepe.
Los ataques son muy
dirigidos al considerar no solo los morenos, sino la misma ciudadanía que el
del mayor capital político de la alianza y de la oposición en campaña es Pepe.
Es un aspirante que
en el registro histórico de la última elección superó los 500 mil votos y que
es aceptado por amplios sectores de la población ya que en su paso por el
Senado de la República trajo a Veracruz más de 4 mil 200 millones de pesos para
80 municipios.
Pepe, es un personaje
que agrada por su bonhomía, pero más allá de eso, por sus conocimientos de
carácter económico financiero, su vocación de servicio y como un político con
alto valor a la palabra… ¡no como otros!
Al de Perote, sin
embargo, lo traen a fuego graneado.
Y para su infortunio
hasta los de casa lo han dejado solo. No se ven por ningún lado sus defensores.
Sus huestes priistas que en el 2018 daban la vida por él están desaparecidos;
sus aliados a quienes en épocas de poder entregó todo el apoyo de pronto se
alejaron o escondieron.
¿Dónde está la
alianza PAN-PRD-PRI presentando un frente común en defensa de sus luchadores
por el voto mayoritario?
Y no solo es el caso
de Pepe, los aspirantes aliancistas andan cada uno por su lado cuando la
violencia, la agresión política, el ajusticiamiento y la represión policíaca se
acrecientan a unas semanas de las elecciones.
A final de cuentas,
la unidad de la alianza pareciera puro cuento.
Tiempo al tiempo.
*Premio
Nacional de Periodismo