CANDIL DE E.U.A Y OBSCURIDAD EN LA CASA
CANDIL DE E.U.A. Y OBSCURIDAD EN LA CASA
· El presidente López
viajará a Washington a ver a Trump
· Pero no pudo viajar
a Oaxaca a apoyar por el Terremoto
· 243 municipios
afectados: 10 mil 200 viviendas dañadas
Por Miguel Angel
Cristiani Gonzalez
Habría que preguntarse ¿a qué va
realmente el presidente López Obrador a Washington?, cuando en reiteradas
ocasiones ha declarado que no le gusta viajar al extranjero -incluso este
martes lo volvió a repetir en la conferencia mañanera- que es tan importante
como para que ahora sí vaya a los Estados Unidos. Si no fue ni cuando se
concretó la firma del Tratado de Libre Comercio o como lo llamen ahora,
entonces porqué ir a Washington.
Aunque nunca lo va a reconocer, todo
parece indicar que es más bien un acto político, para reforzar la campaña
electoral del presidente Donald Trump, quien seguramente -con el enorme
colmillo que tiene- le “sugirió” la conveniencia de que se reunieran, se
tomaran fotos y hasta hicieran declaraciones sobre las maravillas que
representa el tratado.
Hay que preguntarse también porqué el
presidente López va a Washington a un evento con una gran carga política y en
cambio no pudo ir la semana pasada -hace ya ocho días- al estado de Oaxaca en
donde se registró el tercer terremoto más intenso que se ha registrado en
nuestro país, con una magnitud de 7.5 grados en la escala Richter.
Desde la mismísima presidencia de la
república, se minimizó el hecho, no se le prestó la atención que merece la
desgracia que están viviendo miles de oaxaqueños, esos los más pobres de la
sierra, a los que se ignoró olímpicamente.
Acaso en las sesiones del famoso Gabinete de Seguridad que se supone se reúne todos los días antes de la conferencia de prensa mañanera, nadie le informó al presidente de los daños que hubo en Oaxaca y que debieron -cuando menos- obligar a que el mandatario suspendiera sus giras por otros estados y fuera a ver como estaban los oaxaqueños.
Nadie la ha informado al presidente
López que el gobierno de Oaxaca prepara una declaratoria de desastre que
presentará ante la Coordinación Nacional de Protección Civil de la Secretaría
de Gobernación (SEGOB) para 243 municipios afectados por el sismo del martes
pasado, donde ya se ha establecido un censo de 10 mil 200 viviendas afectadas.
El gobernador Alejandro Murat dijo
que este miércoles se realizará la sesión del comité de evaluación para afinar
el documento, una vez que concluya el censo que se realiza en cada municipio,
esperando el apoyo del gobierno federal, para atender la etapa de la
reconstrucción.
Adelantó que a cada uno de los
afectados se les entregaría a través de la Secretaría de Desarrollo Agrario
Territorial y Urbano (Sedatu) una tarjeta con recursos para que pueda reparar
sus daños.
Dejó daños en 51 caminos y tres
puentes vehiculares fracturados, así como 133 instituciones de educación básica
y 86 de educación media con daños menores, 152 monumentos históricos y cinco
zonas arqueológicas con afectaciones.
Pues a ver si el gobernador Murat no
se queda esperando en la loma, porque los famosos apoyos del FONDEN -Fondo
Nacional de Desastres Naturales- ya también lo desaparecieron, pero no porque
lo hayan decretado como tantas otras dependencias del gobierno, sino que
simplemente los miles de millones de pesos que había en ese fondo, ya lo
desaparecieron, es decir, lo “invirtieron” en los tan cacareados programas de
Bienestar y ahora que se presentó una emergencia natural, pues como diría
Héctor Suárez “no hay, no hay”.
Así que ahí puede estar la respuesta
del porqué el presidente López decidió no viajar a Oaxaca, en donde
lógicamente, lo primero que iban a hacer era pedirle los apoyos de recursos del
FONDEN, que también primero, tendrían que aparecerlos.
Por eso, aunque dice que no le gusta
viajar -y mucho menos en el avión presidencial- ahora si viajará a Washington
en una línea comercial, para ir a tomarse la foto con Donald Trump y anunciar
con sus otros datos, las maravillas que nos van a traer con la puesta en vigor
del tratado comercial.
Porque con ese viajecito a los
Estados Unidos, lo que está haciendo es ser como diría Pancho López el filósofo
de mi pueblo, “candil de la calle y obscuridad de su casa”.