COMPRA SAMUEL GARCÍA 18 HECTÁREAS EN SAN PEDRO, NL
COMPRA SAMUEL GARCÍA 18 HECTÁREAS EN SAN PEDRO, NL
Manuel
Alejandro Álvarez Torres
Agencia
Reforma
Monterrey,
NL 22 mayo 2024.- Dieciocho meses después de haber asumido el cargo, el
Gobernador de Nuevo León, Samuel García, adquirió un predio de 17.6 hectáreas
en una de las zonas más exclusivas en San Pedro denominada Mesa de la Corona,
cuyo valor comercial estimado es de más de 700 millones de pesos.
El
terreno, donde el Gobernador pretende construir una residencia de casi 2 mil
800 metros cuadrados, está a nombre de SAGA Tierras y Bienes Inmuebles, empresa
encabezada por el Mandatario emecista y su padre, Samuel García Mascorro.
Documentación
en poder de Grupo REFORMA muestra que el 18 de abril del 2023 la empresa del
Gobernador pagó el Impuesto Sobre Adquisición de Inmuebles (ISAI) ante el
Municipio de San Pedro por 9 millones de pesos.
De
acuerdo con la ley, este impuesto se paga al realizar la compra de una
propiedad y equivale al 3 por ciento del valor catastral del inmueble adquirido,
por lo que el terreno de García de 176 mil metros cuadrados tiene un valor
catastral de al menos 300 millones de pesos.
Sin
embargo, especialistas en bienes raíces consultados señalaron que un inmueble
de esa dimensión en esa zona élite de San Pedro tendría un costo comercial
superior a los 700 millones de pesos.
Apenas
el pasado 4 de marzo, García Mascorro, padre del Mandatario, como representante
legal de SAGA Tierras y Bienes Inmuebles, presentó ante la Secretaría del Medio
Ambiente del Estado una solicitud en materia de impacto ambiental para poder
iniciar con la construcción de la mansión.
«Se
autoriza de manera condicionada en materia de impacto ambiental el proyecto…
que consiste en la preparación del sitio, construcción de una casa habitación y
una vialidad de acceso», se detalla en la autorización dada por Eduardo
Villanueva Garza, director de Impacto y Riesgo Ambiental de la Subsecretaría de
Gestión Integral del Aire, Agua y Biodiversidad de la Secretaría, que forma
parte del Gobierno emecista.
En la
solicitud avalada, de la que Grupo REFORMA tiene copia, se detalla el proyecto
que García pretende realizar, que abarca una megacasa de 2 mil 775 metros
cuadros y la construcción de una vialidad de 10 mil 317 metros cuadrados.
La
superficie total a impactar asciende a 13 mil 091.78 metros cuadrados, según el
documento oficial.
La
autorización para el impacto ambiental en el inmueble le fue dada por el Estado
al Gobernador en «fasttrack», en un plazo de 15 días naturales,
cuando este trámite puede tardar hasta 90 días naturales, de acuerdo con la
ley.
La
vigencia del permiso ambiental estatal es de 20 meses, se precisa en el
documento de autorización, y puede ser prorrogado por otros 20 meses más.
Incluso,
se advierte que el proyecto habitacional está ubicado en zonas con presencia de
riesgo geológico medioalto, donde predomina vegetación de matorral submontano y
el Gobernador deberá pagar una compensación por el impacto ambiental, monto que
viene tachado en el permiso.
Fuentes
enteradas del proceso confirmaron que la empresa de García y su padre ya
presentó la solicitud ante el Municipio de San Pedro para el permiso de
construcción de la residencia en el terreno adquirido, pero -hasta donde se
sabe- no se le ha otorgado.
En la
declaración patrimonial del año pasado, la más reciente publicada, el
Gobernador no reportó esta propiedad.
Ésta
no es la primera transacción cuestionada de empresas del Gobernador y su padre
en la Administración emecista, que inició en octubre del 2021.
El 13
de marzo, Grupo REFORMA reveló que uno de los proveedores más beneficiados con
contratos por parte del Gobierno emecista ha triangulado, por medio de una
compañía «hermana», al menos 202.9 millones de pesos a un despacho
jurídico del Mandatario estatal y su padre.
Incluso,
este 14 de mayo, representantes del PRI, PAN y PRD denunciaron que las empresas
de García y su familia han crecido un 800 por ciento en sus dos años y medio de
Gobierno y que el 60 por ciento de estos recursos es de proveedores
relacionados con el Gobierno del Estado, por lo que advirtieron que la bonanza
financiera se debe a tráfico de influencias, enriquecimiento ilícito y
peculado.