OpiniónPedro Peñaloza

Crisis, guiños y hegemonía

Comparte

Crisis, guiños y hegemonía

Pedro Peñaloza

“Entre el gobierno que hace el mal

y el pueblo que lo consiente,

hay cierta solidaridad vergonzosa”.

Víctor Hugo

 

El ambiente político mexicano ha ratificado sus prioridades y hoy tenemos una radiografía que lo exhibe. Los tres elementos a destacar son: los nuevos ciclos de la pandemia, la violencia expansiva y el escuálido comportamiento económico y, ahora, hay que agregar algunos otros elementos de corto y mediano plazo que dibujan los circuitos en que se desenvuelven las clases dominantes. Veamos:

Está claro que el gobierno federal ha ratificado su incapacidad para encarar, de manera integral, el Covid-19 y sus distintas mutaciones. México es el país que realiza menos pruebas médicas para detectar la dimensión del contagio nacional, según la OCDE; por otro lado, en materia de la llamada “seguridad pública”, el baño de sangre que puebla gran parte del país es visto con irresponsabilidad y superficialidad por López Obrador. Los grupos de la delincuencia organizada y molecular dominan a sus anchas amplias franjas de los estados de la república. La suicida o cómplice política de “abrazos y no balazos” únicamente profundiza el deterioro de la gobernabilidad democrática; en materia económica, el panorama es engañoso y propagandístico, centrado en caprichos y motivos electorales. La repartición masiva de aspirinas sociales son simples cortinas de humo frente al crecimiento de la riqueza de las minorías opulentas. Es decir, sustancialmente, el modelo neoliberal sigue intacto y los dueños del dinero incrementando sus ganancias.

A las anteriores asignaturas se han sumado nuevos elementos de coyuntura que vale la pena comentar ya que tendrán impacto en los próximos procesos electorales y en los realineamientos políticos. Demos un vistazo:

Los guiños entre el PAN y el gobierno, a propuesta del partido blanquiazul, para entablar diálogos en torno a temas que están en la agenda legislativa son un pequeño cambio en el comportamiento cerrado de AMLO, quien durante tres años ni vio ni oyó a la oposición. El resultado no parece promisorio. Simplemente, arena en los ojos.

Otro punto, que está en las coordenadas actuales, es la pública y evidente confrontación entre Ricardo Monreal y el inquilino de Palacio Nacional en torno al prematuro debate acerca del método para definir la candidatura presidencial de Morena. No se requiere mucha imaginación de lo que pasará. Dos opciones: Monreal se pliega a los dictados del tabasqueño o se va de Morena.

Epílogo. A AMLO le importa un comino la inseguridad y las violencias. Su único objetivo es garantizar que Morena gane la presidencia en 2024 y que él siga manejando los hilos del poder desde su “retiro” campirano. Sin duda.

pedropenaloza@yahoo.com/Twitter:@pedro_penaloz