¿Cuántas muertes más?
¿Cuántas muertes más?
Por Pedro Peñaloza
“El coraje es la resistencia al miedo,
el dominio del miedo, no la ausencia del miedo”.
Mark Twain
1. Noche de lunes. Pasajeros
cansados, hartos, ilusionados, expectantes, todos rumbo a casa. A ese
espacio lleno de interrogantes. No sabemos si son espacios de diálogo o de
violencias. Ahí van. De todo. Clases y estamentos. Mayoría
de pobres y quizás, algunos pequeños burgueses proletarizados.
2. La tragedia. El vagón se estremece,
estallan los ruidos, se expanden los gritos, se agolpan los cuerpos. La
sangre puebla el espacio. La oscuridad alumbra la muerte. Se quedaron
las sombras como mudos testigos. Los quejidos languidecen. El horror
es espectáculo para los heridos y vivientes.
3. La torpeza. Se presenta Claudia Sheinbaum. Habla
con monosílabos. No sabe si hay menores en la tragedia. Observa el
pecado ver. La funcionaria no articula ideas. La nube de guaruras y
burócratas insulta la escena de dolor. Finalmente, después de la intensa
búsqueda de su madre y familiares, se sabe que sólo uno, Brandon Giovanni
Hernández Tapia, de 12 años, quien fue localizado horas más tarde
muerto; su padre sigue grave en el hospital.
4. El cinismo. En la mañana siguiente,
López Obrador habla del accidente unos cuantos minutos y pone a Marcelo Ebrard
y a Sheinbaum a dar explicaciones. Todo puesto en la Mañanera para que se
vea que el Tlatoani los respalda. Claudia hace un discurso, como sabe,
monocorde y grisáceo, sin expresión ante la desgracia. Marcelo se
envalentonó y dijo, “el que nada debe nada teme”, pero no renuncia. ¿Quién
lo investigará a él?, ¿la Fiscalía de la República ?, ¿las autoridades de la
ciudad? Sabe que es intocable para la 4T, de ahí su actitud prepotente.
5. La farsa. Como es común, se anuncian peritajes para “ir
al fondo de la investigación”. Lo hará la Fiscalía de la CDMX, que la
encabeza una empleada de la Jefa de Gobierno. ¿Alguien, en su sano juicio,
cree que la Fiscalía podrá responsabilizar al actual gobierno
capitalino? Y para barnizar la susodicha investigación, se contratará una
empresa extranjera. Arena en los ojos. Seguro se castigará a
funcionarios menores. No importa, el poder sirve para eso.
6. El juego de espejos. AMLO
tiene en Ebrard y Sheibaum dos piezas claves para promover el
tapadismo. No aceptará que le muevan su tablero, a sus favoritos. Él
decide los tiempos. Nadie más. Le importan poco los muertos y
heridos.
Epílogo. ¿Cuántas muertes se requieren para
desmantelar al gigantesco aparato de corrupción, impunidad y complicidad que
domina a la CDMX y al país entero? La posible respuesta la tienen las
masas oprimidas, generalmente sin memoria.