Cuitláhuac, a cuatro días de su informe, sigue en la cola
Cuitláhuac, a cuatro días de su informe, sigue en la cola
Por Edgar
Hernández*
Que
ya le pare Massive Caller, ¡algo bueno ha de tener este pobre!
Estar en el lugar 30 o 32 en baja popularidad, mal
gobierno y repudio ciudadano a nivel república, no ha de ser tan malo cuando
durante 24 meses las encuestadoras nos han dicho lo mismo de nuestro gobernante.
Cada mes nos receta la misma cantaleta.
Creo, por tanto, que debemos de acostumbrarnos a ver
las cosas al revés, tal como nos insiste todos los días el Peje en sus
mañaneras.
Consideremos además que tal vez tengan razón los dos
columnistas que de unos meses para acá se desbordan en elogios al gobernador y
su segundo Eric Cisneros que hasta “delgado y guapo” lo ven.
Acaso les asiste la razón a estos congruentes
moderadores de opinión cuando aseguran que ha bajado de manera sensible la
inseguridad, aunque el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad
Pública arroje cifras de que seguimos en segunda posición en feminicidios y
entre los cinco con más violencia y criminalidad.
Razones de pesos, perdón de peso, tendrán los
atrevidos comunicadores para defender a quien la empresa demoscópica Massive
Caller, después de consultar a la ciudadanía, coloca a los gobernadores morenos,
Cuauhtémoc Blanco, al de Puebla, Miguel Barbosa y al de Veracruz, Cuitláhuac
García, como los de mayor desaprobación ciudadana.
No entiendo.
Eso de que “a dos años de gobierno, los veracruzanos
se sienten inseguros”, según las encuestadoras, ha de ser bien falso.
Es por lo menos contrario al informe de resultados
de la 4T en Veracruz, que presentó ayer el gobernador, en donde sostiene que se
está combatiendo con efectividad la inseguridad y que si bien ya se tiene
registro de la aparición de un séptimo Cártel delincuencial, es de baja monta
“es más, los carteles ya ni siquiera los vamos a llamar Cárteles, ya que están
muy disminuidos”, dice don Cuitláhuac.
Obligado darle la razón a nuestro gobernador y sus
congruentes columnistas -solo son dos, pero cuentan como 200- ante la necia
realidad que nos restriega la cara todos los días con infaustas noticias como
la que ayer nos da a conocer el gobierno del “honesto” Cuitláhuac de que se va
a volver a endeudar este fin de año con dos mil millones de pesos.
Ha de ser falso eso de las nuevas deudas ya que la
tendencia arroja que en enero próximo seguro tendremos que devolver otros
cuatro mil millones por subejercicio.
Pero además, más como acto humanitario que ilegal,
es deber del gobierno seguir manteniendo a los mil 40 aviadores de la
Secretaría de Salud y los parientes de Ramos Alor, que por años no tuvieron
empleo y ya se lo merecían.
No hagamos mucho caso a eso del saqueo en el Poder Judicial
y por un momento olvidemos, apelando al espíritu navideño, eso de los
subejercicios, moches y transas y permitamos que el DIF siga con su noble tarea
de dar despensas al infelizaje si vota por Morena.
No permitamos que a la parentela de Cuitláhuac la
toquen con el pétalo de una nómina rasurada y mejor salgamos este domingo a
aplaudir a nuestro gobernador porque, como bien dice el Peje, está “bendito” y
es la mar de honestidad.
De hecho, sin mediar encuestas, es 99 por ciento
honesto y uno por ciento capaz o uno por ciento incapaz y lo demás es culpa de
su abuela Manuela.
¡Me confundí!
Tiempo al tiempo.
*Premio
Nacional de Periodismo