CUMPLEAÑOS DEL PERIÓDICO LA JORNADA

Fue fundado en una las épocas políticas más difíciles del país, precisamente cuando la labor de hacer y presentar noticias se encontraba controlado severamente por el partido en el poder, y cuando éste se tambaleaba en el momento del esfume de la supuesta riqueza petrolera. Por ello Carlos Payán (primer director) siempre ha mencionado que se trató de una verdadera aventura.

Desde el primer número publicado, el periódico La Jornada no agradó a los representantes de las cúpulas del poder político, empresarial y religioso de nuestro país. Y es que fue fundado con una nueva o no conocida audacia, creatividad y frescura de periodismo crítico, escrita por un grupo de escritores con “espíritus libres, tercos, patriotas, audaces”, tal y como lo define José Agustín Ortiz Pinchetti, fundador, abogado de dicho periódico y columnista desde el primer día. A lo largo de todos estos años, La Jornada ha hecho realidad el objetivo de su creación dictada por Payán: “Y daremos voz a aquellos que no la tienen”.

En muchas ocasiones la maquinaria del Estado ha tratado de callar dichas voces independientes, tal y como lo hizo Luis Echeverría Álvarez con el diario informativo Excélsior, en los tiempos de Julio Scherer García, allá por los años primeros de los setentas. Pero La Jornada ha ejercido siempre con demasiada valentía la libertad de expresión. Nunca ha sido un diario informativo de izquierda, más bien, ha transitado a lado de la verdad en los temas de la política, la economía, la cultura, la opinión, el mundo y lo que sucede en todos y cada uno de los Estados de nuestro país.

Dice nuevamente Ortiz Pinchetti: “En las páginas de La Jornada se refleja la vida, contradicciones, esperanzas fallidas y expectativas de siete sexenios; el trastorno, el cambio y la promesa de 40 años de transición política. Su originalidad la convierte en un espacio permanente para el ejercicio periodístico y el testimonio histórico”. Los mismos pasos del buen periodismo comprometido, verás, oportuno, pero sobretodo, del lado de los que menos tienen, lo sigue al pie de la letra, la actual directora Carmen Lira.

Por último, unas palabras del escritor mexicano Carlos Monsiváis, sobre el periodismo mexicano actual: “La prensa mexicana ha sido con frecuencia el espejo complaciente de los poderes, y en contados casos su pesadilla recurrente. Los hombres del poder requieren de quien entierre escándalos, convierta apariencias en verdades y mantenga la ilusión de que se vive en una sociedad limpia, y hay cantidad de periodistas que no durarían en vender sus almas para servirles de recaderos. No puede ser de otro modo en un país donde los gobiernos son la principal fuente de ingreso de la prensa”.

Me sumo a las felicitaciones de éste maravilloso medio informativo nacional, quien nos ha permitido entender por medio de su lectura, que existen otras nuevas visiones de la realidad nacional, así como gente luchadora que es difícil engañar.

Sagare32@outlook.com