De la memoria a la Imaginación
Por René Sánchez García.
Hace unos días terminé de leer un interesante libro. Se trata de una compilación de cuentos de la autoría de Andrea Mejía (Bogotá, Colombia). En tan sólo diez narraciones bien logradas, uno como lector se queda no sólo admirado, sino también atrapado por esas historias misteriosas. Se trata de La naturaleza seguía propagándose en la oscuridad (México, 2019, ed. Planeta, 99 p.), que resulta ser el resultado no sólo de la imaginación y la creatividad de quien escribe, sino el reflejo fiel de un sin número de experiencias vividas a lo largo de su vida.
La autora, según los datos que vienen en el interior, estudió Literatura en la Universidad de los Andes y se doctoró en Filosofía en la Universidad Nacional de Colombia. Ha sido profesora en su Alma Mater, así como profesora invitada en la Universidad Nacional Autónoma de México. Igual es columnista de la revista Arcadia y es una de las escritoras colombianas más destacadas del panorama literario contemporáneo.
Utilizando un lenguaje sencillo pero muy bien cuidado, Andrea Mejía en éstos diez cuentos, su personaje femenino que construye, parece ser la misma mujer, sólo que desdoblada a fin de protagonizar bien su papel dentro del cuento. Aparece como niña, hija adolescente, esposa fiel, o simplemente mujer. Tal y como la crítica lo manifiesta: “Mujeres que parecen ser una misma mujer, sólo que desdoblada en varios tiempos. En estos relatos la vida queda suspendida, sin necesidad de conclusiones apremiantes”.
La temática es interesante y a la vez emocionante en su lectura: “Una niña aprieta un pez con fuerza en una de sus manos. Una mujer adulta se lamenta de haber leído la página del diario de su hija adolescente. Otra se despide ebria de su exmarido, reptando sobre la leche derramada en la cocina. Una más viaja con su pareja al corazón de la selva, mientras ve cómo el clima corroe su ánimo y sus ganas de querer a alguien”, entre otras más historias de vida que cualquier mujer en el mundo le puede suceder.
La verdad es que La naturaleza seguía propagándose en la oscuridad, es un libro de relatos que estimula no sólo la aventura de la leer, sino primordialmente ayuda conocer la complejidad de los seres humanos en nuestra sociedad; y en particular para conocer un poco más de lo que sienten, saben, necesitan, añoran y sueñan las mujeres.
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