DERECHO DE RÉPLICA
DERECHO DE RÉPLICA
La noche del viernes 30
de agosto, los hermanos Gisela y Calixto Hernández Espíndola, se
presentaron en la oficina de esta casa editorial para exigir la aclaración que
vertí en mi columna Contenido denominada: Genealogía del salón social de la Cruz Roja Coatepec. Argumentando que son mentiras.
A continuación, publicamos íntegra su derecho de réplica:
Su derecho se cumple al pie de la letra.
Al respecto, me permito hacer las siguientes anotaciones.
El Regional, se ha distinguido por su pluralidad y ser un espacio de expresión de los y para los coatepecan@s.
En este caso, en particular no sólo fui testigo, fui protagonista de las gestiones de cómo se donó el predio a la Delegación de la Cruz Roja.
Respeto la versión de la familia Hernández Espíndola, pero los
hechos que narré así fueron. Las situaciones o negociaciones privadas no son del conocimiento ni de nuestra incumbencia. Sí el predio
era de fulano, zutano, o mengano, sí el supuesto dueño tenía una relación
personal con una señora, sí está robó documentación, son una serie de supuestos
indemostrables a medio siglo de distancia.
No tenemos interés alguno en ocultar nada. Simplemente narramos lo
sucedido. Cumplimos con dar a conocer su versión.
La gestión realizada en aquel tiempo, no fue una ocurrencia juvenil. Quienes gestionaron fueron Fabián Pérez, en calidad de Presidente del
Patronato; Emilio Polanco Servín, en calidad de abogado y
presidente municipal; Juan Cuevas Alba, como testigo y su servidor como
periodista.
Mi comentario, es una descripción del hecho, fue con fin de mostrar
la labor de aquel patronato que se ocupaba de generar ingresos para su causa.
Una crítica a las actuales autoridades de la institución tras su apatía y
desinterés. Y no a la vida personal de los ciudadanos.
La Delegación de la Cruz Roja ha sido administrado por patronatos
coatepecanos a lo largo de su historia y en esta ocasión son fuereños, tal
vez eso explique el desinterés por mejorar, sus servicios e
instalaciones.
Para finalizar este comentario, la señora Gisela Hernández Espíndola, nos reclamó de forma imprudente y altanera que se aclarara, para poner a
su abuelo Ignacio Hernández Domínguez, como dueño del predio. También que
no le gusta Coatepec, que regresó a vivir aquí por otras razones. Muy
bien sus razones son válidas.
Lo remarco, porque es la falta de amor por nuestra tierra uno de los
factores del desinterés en Coatepec, la falta de identidad y sentido
de pertenencia.
Usted, amable lector no está para saberlo, pero le cuento. La señora en
mención me señaló de haber utilizado el salón social en mi beneficio.
En efecto, organizar bailes fue una de mis actividades. Siempre
respeté los lineamientos requeridos. Es más, años después, me ofrecieron ser el
presidente del patronado, invitación la cual rechacé porque no podía ser juez y
parte. Cada baile que organicé pagué una renta por el alquiler, llegué a
pagar hasta 25 mil pesos. Así como yo en ese local otros empresarios efectuaban
sus bailes como Avan Radio, administraciones municipales, Arturo Rebolledo,
DJ’s, entre otros.
LLEGÓ PARA
QUEDARSE
No es
un slogan de radio. No. Es la imagen del presidente que se gestó desde hace
varias décadas en busca de la grande. El pasado domingo, López Obrador, habló
cómo lo hizo en campaña en tantas plazas de pueblos, agitando, señalando,
acusando, azuzando a la gente cansada de los abusos del poder.
Sus
palabras en un zócalo repleto no fueron informativas, propias de un Informe de
Gobierno, fue un mitin aderezado de esbozos históricos a modo, presumiendo su
imagen de historiador frustrado.
El
informe se evalúa por lo que dice, lo que no dijo y lo que inventa. Frases
envalentonadas para los vecinos del norte, para que vean que si las puede. Deja una lista de pendientes y a sus pupilos
para que los cumplan, impuso más de la mitad del gabinete a Sheinbaum,
en un contexto de correlación de fuerzas con Washington, que mira sus
movimientos y nuevos acuerdos con los malosos. Herencia maldita al próximo
gobierno.
Hay en
su gobierno aciertos y deja muchos pendientes, además de preocupaciones a
propios y extraños. Su mitin capitalino, fue mirarse en el espejo del poder
envuelto en la bandera de sus más de treinta millones de votos, se legitima. Su
mensaje de poder no fue la gira del adiós, fue el de un personaje que llegó
para quedarse. Y todavía falta el 15 y 16 de septiembre. Madre Mía.
LA REFORMA JUDICIAL VA
Los diputados aprobaron en lo general, el senado dice que cuenta con los votos para
aprobar como mayoría calificada, la oposición hace lo propio, presume con 43
votos que frenarían la reforma judicial. ¿Podremos creerles a los senadores?
Las
movilizaciones de los trabajadores del poder judicial en el país solo han
encontrado eco en estudiantes de Derecho de algunas ciudades. Le falta
organicidad para vincularse con trabajadores de otros órganos autónomos
amenazados. Además de ciudadanos descontentos que avizoran el peligro de las
instituciones democráticas.
La
anhelada concentración del poder, del presidente de los pobres que vive en
Palacio, sueña irse para seguir presente con la desaparición de los órganos
autónomos que han frenado sus intenciones en el sexenio. El Legislativo se rindió a sus pies, el Judicial resiste.
Por
hoy hasta aquí.