DESAMPARO LABORAL
Pedro Peñaloza
“Quien lucha puede perder, quien no lucha ya perdió”.
Anónimo.
Los problemas económicos que viven algunos equipos profesionales, tanto de primera división como del ascenso, ha puesto de manifiesto que los jugadores, sin ningún tipo de organización laboral, se encuentran en una situación de incertidumbre y desigualdad en el momento de exigir el cumplimiento de sus contratos.
Ya se ha discutido muchas veces la necesidad de un organismo sindical, en el cual se pueden respetar y defender los derechos de los futbolistas. Sin embargo, los directivos de la Liga MX y empresarios dueños de los equipos se oponen rotundamente, ya que, la idea de tener una institución autónoma que regule los contratos, pagos y prestaciones, se contrapone con los intereses económicos.
La Federación Mexicana de Futbol (FMF), ha amedrentado cualquier intento para formar un sindicato y lo único que ha hecho para tranquilizar a la opinión pública y a los futbolistas es inventar una Comisión del Jugador. Pero esta es parte de la FMF, sin ningún poder de decisión y controlada por los directivos. Simples empleados de los dueños del balón.
Por lo tanto, en el futbol mexicano el jugador profesional no es reconocido como un trabajador, el cual debe estar protegido por la Ley. Sino que es visto como una simple mercancía más, un objeto al cual se le debe explotar sin medida y, una vez que ya se le exprimió toda su energía y ya no se le necesite, desecharlo. Ese es el pensamiento de los directivos.
La idea de que existe una organización de jugadores, que proteste ante irregularidades ante irregularidades de pago es impensable para los empresarios. La semana pasada en la división de ascenso MX, el equipo Toros de Celaya, se colocaron bolsas de papel en las cabezas con la leyenda “ya págame”, previo partido que jugaron contra Mérida. A esa medida tuvieron que recurrir los jugadores debido a que se les adeuda dos meses de salarios.
Como un gesto elemental de compañerismo, el entrenador de los cajeteros, Marco Antonio de Almeida, mostró el apoyo a sus jugadores en su protesta por los adeudos salariales, sin saber que la directiva lo despediría por ese hecho tan “terrible” y “deleznable” de respaldar a sus jugadores.
Los casos de impunidad en contra de los jugadores y entrenadores son comunes en nuestro balompié. Los despidos injustificados, retrasos en el pago de salarios, contratos temporales, falta de seguridad social, son un conjunto de acciones que pasan desapercibidas. No puede dejarse al olvido un organismo gremial, que prohíba el famoso draft, el cual denigra a los futbolistas y orilla a la precarización laboral, o el “pacto de caballeros”, que es contrario a las leyes laborales de nuestro país.
No estamos pelando aquí ideas revolucionarios ni contrarias a lo que ya se ha hecho en diferentes partes del mundo. La formación del Sindicato de Futbolistas Argentinos (FAA) tiene 70 años; el Sindicato de Futbolistas Uruguayos (MFUP) tiene 68, el Sindicato Chileno (SIFUP) tiene 54 años; y hasta la joven liga de Estados Unidos, MLS, tiene su sindicato de jugadores (MLSPU) desde el 2003.
Es cierto que las particularidades del futbol mexicano que lo distinguen de las demás ligas son muchas. Por ejemplo: La multipropiedad, la dominación de Televisa y TV Azteca en las decisiones de la FMF, impunidad total de los directivos para actuar fuera de las leyes laborales, amenazas de desafiliación a jugadores por protestas a la Liga ante instancias judiciales y miedo a perder sus grandes salarios por parte de los futbolistas profesionales, tanto extranjeros como nacionales.
La antiquísima demanda de que los jugadores de futbol profesional sean tratados simplemente como trabajadores no embona en la mentalidad de quienes solamente ven ganancias y privilegios. Insistimos, en realidad los señores de pantalón largo no tienen la culpa, actúan con esa prepotencia, ya que la masa de jugadores es inconsciente, ignorante e incapaz de ver más allá de sus narices. No hay como ayudar a estos asalariados privilegiados, enajenados por el glamur de lo inmediato. Pero seguiremos golpeando su conciencia. Algún día habrá sensatez e inteligencia.
Algo Más. Pese a la escasa promoción y la falta de una liga profesional tenemos que destacar la gran participación de la Selección femenil Sub 17 en el mundial de la especialidad. Ya quisieran varios equipos profesionales tener la entrega y las ganas de sobresalir que muestran las chavas en cada partido.
pedropenaloza@yahoo.com