DESARROLLO SANO DE LA AUTOESTIMA
DESARROLLO SANO DE LA AUTOESTIMA
Salvador
Farfán Infante
Ciertos rasgos de
personalidad intervienen también en la modulación y el desarrollo sano de la
autoestima. Los niños extremadamente sensibles a los deseos y las expectativas de
sus padres, en ocasiones sienten que los decepcionan. Estos niños pueden ser
también muy dependientes, aun cuando
ni siquiera lleguen a
experimentar situaciones de éxito o a aprender de sus errores.
Algunos niños
critican severamente las condiciones de su entorno social y por ende, a ellos
mismos. Esta actitud siempre va acompañada de la necesidad que tienen de verse
y sentirse perfectos. Este tipo de sentimientos termina siempre en una especie
de acusación personal cuando las cosas no suceden como lo habían esperado. En
estos casos se evidencia también un nivel importante de reproche personal y
escasa o nula tolerancia a la frustración que se acompaña de sentimientos de culpa
y enojo reprimido, hasta llegar a trastornos del estado de ánimo como la
depresión.
Comportamiento | Ejemplos |
Estado de ánimo | Tristeza. Irritabilidad. Depresión. |
Energía | Disminuida. Funcionamiento por
debajo de lo normal. |
Interés | Poco interés y placer
en las actividades y la convivencia con otros. |
Conciencia del valor propio | Sentimientos de
devaluación, culpa y desesperanza. |
Sueño | Problemas de
insomnio o hipersomnia. |
Alimentación | Sobrealimentación. Alimentación escasa
que se puede acompañar de una incapacidad de
ganar peso. |
Traducido de: Intervention Enfance
Famille.
Estrategias y actividades
En este apartado se
incluyen diferentes estrategias y actividades para promover la adquisición de
una buena autoestima en la infancia. Algunas de ellas son apropiadas para todos
los niños, desde la cuna hasta los seis años; también se escriben recomendaciones
específicas para bebés, infantes y niños en edad preescolar. Todas estas alternativas
pueden ser adaptadas a las necesidades particulares de un niño o de un
establecimiento educativo.
Es importante
orientar a los padres o tutores cuando tengan dudas sobre el comportamiento de
su hijo.
a) Informarles acerca
de las diferencias de temperamento que tiene su hijo.
b) Plantear preguntas
relativas a la personalidad del niño y no olvidar temas como: hábitos, niveles
de llanto, estados de ánimo, niveles de actividad, reacción a los cambios,
niveles de frustración, etcétera.
c) Participar con los
padres en la creación de hábitos en la casa y en otros lugares en los que el
niño se desarrolle, de manera tal que respondan a sus necesidades.
Estrategias y actividades para bebés, infantes y niños en edad
preescolar:
1. Llevar al niño al médico para que se le
practiquen exámenes periódicos:
a) Un niño puede
tener un problema de salud que interfiera con su estado de ánimo habitual.
2. Darles amor
incondicional.
a) Expresar el
afecto físicamente: pasar la mano por los hombros y abrazarlos con afecto.
b) Manifestarles
su afecto de manera verbal. Felicitar al niño por su forma de ser.
c) La autoestima
de un niño se refuerza cuando se siente amado y aceptado sin condicionamientos.
Estas situaciones le permiten crear un vínculo especial y cálido con las demás
personas.
3. Favorecer que el
lugar donde vive sea seguro y reconfortante.
a) Ofrecer al pequeño
un ambiente físico seguro en donde pueda llevar a cabo sus actividades de
exploración y satisfacción de su curiosidad.
b) Establecer reglas
de conducta claras y realistas de modo que el infante sienta que su ambiente es
estable y que puede tener absoluta confianza en sus padres o tutores.
4. Pasar el mayor
tiempo posible con el niño.
a) Disponer de amplia
variedad de actividades con el niño.
b) Participar de sus
actividades y mostrar interés en ellas.
c) Dejar que sea el
niño quien dirija las actividades.
e) El niño
experimentará un sentimiento de éxito, que hizo bien las cosas y que las pudo
controlar. Seguramente mostrará una actitud de orgullo y alegría.