DIOS HA MUERTO

Friedrich Nietzsche, filósofo alemán del siglo XIX, alarmó a la humanidad cuando expresó que Dios estaba muerto. Fueron muchas las protestas respecto a esa supuesta afirmación, pero él se refería a que el hombre lo había matado practicando nefastas conductas en el diario vivir, olvidándose de los frutos del evangelio, para saciarse en lo prohibido, en todo aquello que condena la sociedad. Tal vez una coincidencia, en el estado de Oaxaca, nació ese hermoso vals bien adaptado entre música y letra, “Dios nunca muere”, del compositor y poeta, Macedonio Alcalá, parece contradecir la aserción del pensador alemán. Sin embargo, la creación artística es muy distinta y no fue inspirada con el fin de debatir las palabras del intelectual prusiano, aunque muchos así lo creen, pero su origen es otra historia.

            El filósofo no se refería a que verdaderamente “Dios ha muerto”; pues el creador es una sustancia eterna, sin principio ni fin y está por encima de todo cuanto existe en el universo. No nació y tampoco puede morir. Nietzsche observaba que la moral, y la esencia del ser humano caminaba a oscuras contaminando a la sociedad, es decir, perdió el camino del bien dejando fugar sus valores, virtudes y dignidad en un mundo totalmente equivocado. Un camino en el que el hombre se despoja del bien para desahogar sus bajas pasiones por libre albedrío, carente de la luz espiritual, del amor y la esperanza, de la fe y los buenos proyectos. El orden teológico y moral fue apartado para actuar sin el mandamiento divino transformándose en un ser pecaminoso que afecta a una sociedad que persigue el bien común.

            En la actualidad, en el que el mundo, pero, sobre todo, en el que nuestro país está en llamas, recordamos las palabras del filósofo alemán, lo comprendemos y se está de acuerdo con lo que en su tiempo trató de decir. Hoy, la inseguridad y el mal, florecen en tierra fértil. La maldad se practica en todos sus matices y la gente tiene temor de vivir bajo estas oscuras amenazas, la paz y la felicidad se esfumaron hace tiempo; el mundo cambio su cielo; también nos hacemos la misma pregunta ¿en dónde está Dios? El legendario ex Beatle, John Lennon, solía decir, “El amor lo hacemos a escondidas, mientras el mal y los asaltos a mano armada, se practican a la luz del día. ¿será que Dios nos ha olvidado? ¿quizás es el hombre él que se ha olvidado de Dios? ¿Usted que opina amable lector?

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