Duarte sigue, sigue y sigue
- Más de 61 mil millones desaparecidos durante su sexenio
- Auditorias de la ASF detectaron más de 1,700 anomalías
- Eso nada más en recursos federales ¿y en los estatales?
Por Miguel Ángel Cristiani G.
Ahora se sabe, gracias a un informe especial de la Auditoría Superior de la Federación, que el desfalco -nada más de los recursos federales- durante la administración de Javier Duarte de Ochoa alcanzó ya los más de 61 mil millones de pesos, que fueron detectadas más de 1,700 anomalías en el manejo de los dineros, en el período 2011 a 2016.
En la nota principal del portal Animal Político, se dan a conocer este viernes interesantes datos comparativos para dimensionar el tamaño del desfalco registrado en la pasada administración:
Es un monto de malos manejos atribuible a un gobierno local del que no hay precedente en México.
O sea que ocupamos un primerísimo lugar en corrupción a nivel nacional, lo cual ya es mucho decir.
“Para ponerlo en proporción, para que el exgobernador de Veracruz hubiera podido ganar esa cantidad con su sueldo de gobernador tendría que haber trabajado… 26 mil años por lo menos.
Con el monto de recursos desviados en Veracruz se hubiera podido pagar el sueldo completo de todo el Ejército Mexicano durante los próximos 47 años. Los 61 mil millones representan, al menos, tres años y medio del presupuesto completo de la Procuraduría General de la República (PGR).
Dicho gobierno incurrió en todo tipo de prácticas para desviar recursos, desde la retención de subsidios que debían ser transferidos a municipios, hasta el traslado de partidas completas a cuentas desconocidas, subejercicios, falta de comprobación del supuesto gasto que sí se hizo, simulación de devoluciones de dinero faltante, entre otros.
El desglose del desfalco es el siguiente: en números redondos hay 21 millones de pesos que, en definitiva, desaparecieron sin haber sido devueltos, y por los cuales la ASF ya presentó decenas de denuncias penales ante la PGR, en contra de los funcionarios del gobierno de Duarte que resulten responsables.
Además, hay 36 mil millones de pesos observados por la ASF a lo largo del sexenio de Duarte que tampoco aparecen o han sido aclarados, pero donde se está a la espera de que haya una explicación de parte de las dependencias involucradas. Funcionarios de la ASF indicaron que existe la certeza de que ese dinero no aparecerá, pero hay que esperar los plazos correspondientes para presentar las denuncias.
Y además hay otros 4 mil 770 millones de pesos que el gobierno estatal de Duarte simuló que devolvía, pero que luego retiró – otra vez – de las cuentas bancarias autorizadas, hechos por los cuales la ASF ya presentó también las denuncias correspondientes.
El daño a las finanzas públicas del país ocasionadas por la administración de Javier Duarte podría ser peor. Gracias a intervenciones oportunas de los auditores se pudieron recuperar aproximadamente 14 millones 755 mil pesos que ya habían sido transferidos a otras cuentas, o no habían sido devueltos por el gobierno. De no ser por eso el dinero desaparecido hoy estaría sobre los 75 mil millones de pesos.
En las auditorías practicadas durante seis años al gobierno de Veracruz los auditores encontraron irregularidades que se repitieron de forma sistemática. Por ejemplo, hubo 15 mil 600 millones de pesos que la administración de Duarte dice haber invertido en varios rubros pero de lo cual no otorgó pruebas que hagan creíble que esto fue cierto. Los auditores pidieron que se dieran documentos serios o se devolviera el dinero, y no ocurrió ninguna de las dos cosas.
La ASF también detectó que la Secretaría de Finanzas del estado sacó más de 13 mil 600 millones de pesos de recursos federales de las cuentas autorizadas para transferirlo a otras cuentas distintas, sin que dicho dinero fuera devuelto.
No es todo. Hubo cerca de 9 mil 600 millones de pesos de recursos federales que se entregaron al gobierno estatal, para que fuera transferido a municipios y otros entes institucionales por concepto de subsidios, sin embargo, la Secretaría de Finanzas retuvo dicho dinero, lo que también fue completamente ilegal.
Un ejemplo más. La Auditoría también detectó que el gobierno de Javier Duarte no gastó –por lo menos no legalmente – más de 8 mil 200 millones de pesos de partidas federales. Por ende, dichos recursos tendrían que haber sido devueltos a la Secretaría de Hacienda federal, sin embargo, esto tampoco pasó.
El informe especial de la ASF señala que producto de las 224 auditorías realizadas al uso de recursos públicos federales en Veracruz entre 2011 y 2016 se detectaron, en total, mil 741 irregularidades de distinto tipo, que involucran malos manejos superiores a los 70 mil millones de pesos.
El 2015, penúltimo año de la administración de Javier Duarte, es el que concentra mayores irregularidades descubiertas, con 571 en total, seguido de 2014 donde la ASF reportó 503 observaciones por presuntos malos manejos.
La Auditoría Superior de la Federación ha presentado hasta ahora 65 denuncias penales ante la Procuraduría General de la República (PGR) por un posible desvío de recursos que supera los 21 mil millones de pesos. Dichas denuncias y monto continuarán incrementándose en los próximos meses conforme se agoten los tiempos de justificación de todo el dinero que falta.
Pero hasta ahora ni una sola de las averiguaciones y carpetas de investigación que se han iniciado han sido consignadas ante un juez, y mucho menos hay exfuncionarios castigados por ello. Toda la desaparición de recursos federales en la administración de Javier Duarte permanece impune hasta la fecha.
Pancho López, el filósofo de mi pueblo se pregunta quien está deteniendo todas esas denuncias, que están atoradas en un manto de impunidad y corrupción, pero no poquita, sino a gran escala.