EL 43% DE LA POBLACIÓN MEXICANA PADECE DESNUTRICIÓN HOSPITALARIA: PiSA FARMACÉUTICA
EL 43% DE LA POBLACIÓN MEXICANA PADECE DESNUTRICIÓN HOSPITALARIA: PiSA FARMACÉUTICA
· En los pacientes con diagnóstico de
desnutrición incrementa un 25% los días de estancia hospitalaria y los costos
de atención médica.
· La detección temprana y la intervención
nutricional adecuada son esenciales para mejorar los resultados clínicos y
reducir complicaciones.
· La educación en nutrición clínica para los
médicos es esencial para tratar la desnutrición de manera adecuada.
Guadalajara, Jalisco; 19 de
septiembre de 2024.- La desnutrición es un estado agudo, subagudo o crónico
caracterizado por la insuficiencia de nutrientes necesarios para satisfacer al
organismo, lo que conlleva cambios en la composición corporal, como la
disminución del compartimento graso y/o muscular, afectando la capacidad del
cuerpo para responder ante una enfermedad, así como en su tratamiento.
Si bien la desnutrición en
términos generales trae consigo graves consecuencias para la salud, de acuerdo
con la Dra. Cynthia Vega Director de Relaciones Medicas de PiSA Farmacéutica,
es en los pacientes hospitalizados donde el padecimiento puede complicarse
debido a factores como la baja ingesta de alimento, la inadecuación nutricia y
la presencia de múltiples comorbilidades, incluso el estrés de estar en un
ambiente hospitalario.
La desnutrición hospitalaria
se refiere a la condición en la que los pacientes ingresan o desarrollan un
estado de desnutrición durante su estancia en un hospital. Este problema es
crítico porque se ha asociado con una amplia gama de consecuencias negativas,
incluyendo resultados clínicos desfavorables, estancias hospitalarias más
prolongadas, mayores costos de atención y un aumento en la mortalidad.
En México, donde la
prevalencia de riesgo de desnutrición hospitalaria se estima en un 43% de
acuerdo con la Revista de Nutrición Clínica y Metabolismo, la detección
temprana a través de métodos de tamizaje es fundamental para prevenir sus
consecuencias.
Los métodos de tamizaje
nutricional se deben realizar las primeras 24 a 48 horas ya que permiten
identificar rápidamente a los pacientes en riesgo y justificar una evaluación
más detallada. Estos se basan en la evaluación de la condición actual del
paciente, la estabilidad de su salud, la posibilidad de empeoramiento y el
riesgo de aceleración del deterioro nutricional. Al identificar a los
consultantes en riesgo, es posible implementar una intervención nutricional
adecuada que pueda mejorar significativamente los resultados clínicos.
La desnutrición hospitalaria
es un problema multifactorial influenciado por factores biológicos,
socioeconómicos, psicológicos y clínicos. Por ejemplo, la edad avanzada es un
factor de riesgo significativo, ya que los pacientes mayores tienen un mayor
riesgo de desnutrición, lo que incrementa la probabilidad de complicaciones
durante su estancia hospitalaria. Además, un bajo nivel socioeconómico puede
limitar el acceso a alimentos adecuados antes de la hospitalización, lo que
incrementa el riesgo de que un paciente ingrese ya desnutrido o desarrolle
desnutrición durante su internamiento.
“La detección temprana, la
evaluación continua y la intervención nutricional adecuada son cruciales para
optimizar los resultados clínicos y minimizar las complicaciones y costos
asociados” declaró la Dra. Cynthia Vega Director de Relaciones Medicas de PiSA
Farmacéutica.
La desnutrición en el contexto
hospitalario también aumenta el riesgo de infecciones, deteriora la
cicatrización de heridas y puede llevar a la caquexia (síndrome de deterioro
progresivo), sarcopenia (pérdida de masa muscular, fuerza y funcionamiento de
los músculos en adultos mayores) y fragilidad. Estos problemas afectan la
calidad de vida del paciente, e incrementan los costos asociados a su atención,
que pueden ser hasta un 25% mayores que en pacientes nutridos.
Para prevenir y manejar la
desnutrición hospitalaria, es esencial implementar una evaluación nutricional
integral y definir un plan de nutrición clínica dependiendo del estado del
paciente. Esta evaluación debe considerar antecedentes relevantes y patologías
actuales para calcular adecuadamente los requerimientos nutricionales.
“Es fundamental detectar a
tiempo a un paciente con o en riesgo de desnutrición e implementar
oportunamente un plan incluyendo intervenciones dietéticas y apoyos
nutricionales que ayuden a alcanzar los requerimientos del paciente cuando la
ingesta no está siendo suficiente o no es posible.” afirmó la Dra. Cynthia Vega
Director de Relaciones Medicas de PiSA Farmacéutica
La intervención nutricional
oportuna puede reducir significativamente las complicaciones relacionadas con
la desnutrición. Así mismo, la mejora de las características sensoriales de los
alimentos y la variedad en el menú ayuda a aumentar la ingesta en pacientes
hospitalizados, evitando la desnutrición.
Los sistemas de salud deben
priorizar la atención nutricional como un elemento esencial del cuidado
hospitalario. Es importante ver a la nutrición clínica como una inversión en la
salud integral del paciente que nos permitirá reducir riesgos, complicaciones,
reingresos y acortar la estancia hospitalaria.
El asegurar que todos aquellos
que están en riesgo reciban el apoyo necesario para su recuperación y bienestar
dentro y fuera de los hospitales y lograr una atención integral del paciente,
reduciendo la desnutrición hospitalaria.