EL CENTAURO DEL NORTE
En la proclamación del Plan de Agua Prieta, o “La Huelga de los Generales” se desconoció a Carranza y éste cuando trasladaba los poderes al Puerto de Veracruz, fue perseguido, traicionado y asesinado en la Sierra de Puebla. Hubo que nombrar un presidente provisional, cargo que recayó en la investidura del contador, maestro, político y cantante de ópera, Adolfo de la Huerta, dando inicio a la supremacía del triángulo sonorense.
Durante los seis meses que duró este interinato, lo más relevante de Don Adolfo, fue unificar las distintas facciones revolucionarias, imponer los principios sociales de la Revolución Mexicana y convocar a la paz y a elecciones.
EL CENTAURO DEL NORTE, Don Francisco Villa, invitado también al pastel de Agua Prieta, decidió no asistir, cansado por tantos años de guerra. Resolvió esperar mejores condiciones y oportunidades. Acantonado con sus tropas en Sabinas Coahuila, telegráficamente se comunicó con el compadre Adolfo, para convenir con él y rendirle su incondicional apoyo. El “generoso” De la Huerta, aprovechando la coyuntura y el buen humor de Villita, lo exhortó a que depusiera las armas, y lo premió regalándole la Hacienda de Canutillo para que se fuera a ordeñar vacas, oficio que conocía muy bien desde joven.
A pesar de que Don Pancho, siempre estuvo al acecho de sus enemigos, todo parecía felicidad en Canutillo; contaba con el dinero y el tiempo suficiente para atender y cumplir con sus veinte señoras. Un buen día, mordió el anzuelo en su propia casa. Un periodista lo interrogó sobre el sucesor del presidente Obregón, y Villa, sin percatarse de una imprudencia, dijo que le gustaría que el que mandara, ahora sí, por cuatro años, fuera su compadrito Adolfo de la Huerta.
El 20 de julio, pero del año de 1923, Villa fue convertido en cadáver. Esa declaración no le gustó “nadita” al Manco; atusándose el bigote con la zurda, pensaba que era mejor prevenir que lamentar.
Amigos, lo dice el refrán, “A la muerte, ni temerla ni buscarla, hay que esperarla”. Tengan buen inicio de semana y ojalá que produzcan mucho.
¡Ánimo ingao…!
Con el respeto de siempre, Julio Contreras Díaz
El DJ les manda la tumba abandonada, por favor póngale atención.
