El día que cambió la historia del mundo
11 de septiembre del 2001
El día que cambió la historia del mundo
Por
Ángel Rafael Martínez Alarcón
Para un servidor el 11 de septiembre,
este marcado en mi historia infantil, en 1973 ingresó a la escuela primaria, en
una primera etapa la cursé en la Escuela Carlos A Carrillo, fundada
en 1956. Eran mis años infantiles y recuerdo con mucha claridad los
acontecimientos que narró la televisión privada de nuestro país, sobre el golpe
de estado contra el Presidente de la República de Chile, Salvador
Allende (1908-1973). En el ambiente familiar estuvieron muy pendientes de
dicho acontecimiento, ya fuera por la prensa que llegaba al hogar: El tema
de Hoy, Diario de Xalapa, Novedades: el mejor diario de México. Más los
noticieros de la radio y la televisión, en particular de televisa. Seguramente
a mi corta edad ni siguiera se ubicaba donde está la República de Chile; pero
el ambiente de vivir con adultos mayores hizo que absorbiera dicha información.
El
otro 11 de septiembre que cambió la historia del mundo en el siglo XXI,
fueron los ataques de las Torres Gemelas en la ciudad de Nueva York. Ese marte
por la mañana el mundo nos despertábamos con esa noticia, nunca imaginada. Uno
de los símbolos del capitalismo Norteamérica fuera atacado, junto con las
oficinas del Pentágono. Recuerdo esa mañana al encender la televisión y
ver las primeras imágenes del ataque aérea; y al mismo tiempo la radio daba la
noticia. El segundo ataque sufrían los Estados Unidos en su territorio. El
primero lo encabezó Francisco Villa (1878-1923). Uno de los líderes de
la Revolución Mexicana; quien el 9 de marzo de 1916, invade a la población de
Columbus, Nuevo México.
Era
el segundo año del gobierno del presidente Vicente Fox Quezada, un
servidor era oficial de servicios migratorios del Instituto Nacional de
Migración, en la delegación Veracruz, encabezada por Alejandro Cossío
Hernández. Yo estaba adscrito a la subdelegación de mi ciudad natal,
Xalapa.
Al
medio día llego una circular de las oficinas centrales de la ciudad de México,
indicando entre otras cosas estar muy atentos con las nacionalidades del mundo
musulmán, y así como las nacionalidades: rusa, cubana, norcoreanos. Por las
tardes nos fuimos a alertar a los hoteles y moteles y centrales camioneras de
la ciudad capital del Estado de Veracruz.
Esa
misma tarde del 11 de septiembre del 2001, el presidente de los Estados Unidos
de Norteamérica, George W Bush, en su discurso del 20 de
septiembre de ese mismo año afirmaba: El once de septiembre, los enemigos de
la libertad cometieron un acto de guerra contra nuestro país. Los
estadounidenses han visto guerras, pero durante los pasados 136 años, esas
guerras han sido en territorio extranjero, con la excepción de un domingo en
1941. Los estadounidenses han visto las bajas de guerra, pero no en medio de
una gran ciudad durante una mañana pacífica. Los estadounidenses han visto los
ataques sorpresa, pero nunca antes contra miles de civiles. Todo esto se nos
impuso en un solo día, y la noche cayó sobre un mundo distinto, un mundo en el
que la propia libertad está bajo ataque.
Los
Estados Unidos de Norteamérica, horas máas tarde identificaron a un ex aliado,
en la guerra para expulsar a los soviéticos del territorio afgano invadido en
diciembre de 1979, Osaman Lin Laden (1957-2011), como el
responsable directo de los ataques. Iniciando los Estados Unidos una nueva
guerra contra el terrorismo en Afganistan y Irak. Estos últimos 20 años dichas
naciones sufrieron en sus territorios la invasión militar de los Estados Unidos
y sus aliados de la Otan.
20
años después el ejército de los Estados Unidos sale derrotado de Afganistán, el
pasado 15 de agosto del presente año, los Talibanes recuperan su nación.
Regresando
a Xalapa, al otro dia de los ataques, nos comunican de un hotel cercano a la
Central Camionera de Xalapa, sobre un ciudadano ruso, muy sospecho, que
entra y sale del hotel con bolsa. Rapìdamente
fuimos a supervisar el asunto. Yo lo abordé preguntándoles quien era y
que hacía, con mis cinco oraciones que aprendí de mi curso del idioma ruso. El
sujeto se queda pasmado. Impactado que un oficial de servicios migratorio le
haya hablado en su lengua, y me contesta dándome sus generales, y explicando
que salió sin documentación de la ciudad de México, que es profesor de
historia, doctorado en las relaciones México- URSS, bajo la dirección del
Dr. Alexandr Sizonenko del Instituto de América Latina de la Academia de
Ciencia de la URSS; grata coincidencia, también había sido mi profesor en la
Facultad de Historia de la Universidad Veracruzana, en un curso sobre la
historia de la URSS, organizado por el Instituto de Intercambio Cultural
México-URSS “José Mancisidor” Me explicó que un alumno le informó
que en la central camionera de Xalapa, en una librería de libros viejos, había
un gran dote de publicaciones de la Agencia de Prensa Novosti, Boletín de
información de la embajada de la URSS en México, vino a comprarlos.
El
Dr. Evgueni Dik Dovgiall (1968-2002). Vino un par de veces a Xalapa, nos
sentamos a diseñar un protocolo para estudiar las relaciones culturales de URSS
en mi ciudad, por la importancia que tuvo el Estado de Veracruz con la ex URSS,
en 1982, se instaló un consulado concurrente al sureste de México y
Centroamérica. El Dr. Evgueni Dik Dovgiall, apareció muerto en la ciudad
de México.