EL MENSAJE
EL MENSAJE
“Ojo
por ojo, la esencia de todas las venganzas”.
John
Katzenbach
Como
si algo faltara en un contexto de violencia expansiva en el país, con cerca de
200 mil homicidios dolosos, alrededor de 50 mil desaparecidos y 10 feminicidios
diarios, es asesinado el Coordinador General de la Unidad de Estrategia,
Táctica y Operaciones Especiales de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la
CDMX, Milton Morales Figueroa.
La
víctima era un personaje central en el equipo de inteligencia de la policía
capitalina, ya que había participado en investigaciones sensibles, tal es el
caso del atentado contra Ciro Gómez Leyva, el ataque del Cártel Jalisco a Omar
García Harfuch y la lucha contra la Unión Tepito, entre otros de amplia difusión.
Según
información de la organización Causa Común, han sido ultimados en el país 2381
policías, de diciembre de 2018 al 28 de abril de 2024, un promedio de 1.2
diariamente. Los atentados fueron en distintas circunstancias, incluidas
confrontaciones directas o en días de descanso. Gran parte de ellos quedaron en
la impunidad.
El
atentado a Morales Figueroa es un doble golpe, por un lado, a la policía
capitalina y al próximo Secretario de Seguridad de Claudia Sheinbaum. Es
evidente que el ataque fue una acción perfectamente concertada y vengativa por
el papel que jugó en alguno de los casos que llevó. Pero, también puede ser un
mensaje para el gobierno y el inicio de un nuevo pacto con diferentes grupos de
la delincuencia organizada que ven amenazado su negocio con la posible entrada
de otros actores a partir de octubre.
Lo
extraño fue la ausencia de protección personal a un policía de este perfil,
quien había tocado tantos intereses de la delincuencia. ¿Lo podrá explicar
Pablo Vázquez, responsable de la Secretaría de Seguridad en la ciudad? ¿Un
descuido? Asimismo, la falta de información e inteligencia por parte de las
autoridades al saberse que los sicarios conocían el entorno y los movimientos
de Milton Morales. ¿Ignoraban el seguimiento a un funcionario de ese nivel en
la corporación?
Estamos
en presencia de un crimen que busca tener diversos efectos en los circuitos de
poder: el principal es la dedicatoria para Brugada y el nuevo gabinete de
seguridad federal para empezar a negociar; la segunda, la capacidad de la
delincuencia organizada para atacar a miembros clave del gobierno.
Este
homicidio es una señal inequívoca de que los grupos de la criminalidad siguen
activos, fuertes y saben mucho de sus persecutores. El promovido éxito en
campaña de la seguridad en la CDMX fue un espejismo. Los vigilados son
vigilantes, como siempre ha sido. El mensaje es claro.
@pedro_penaloz