Especial

El pueblo pide, cárcel a Yunes

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APUNTES

Manuel Rosete Chávez

“Yo como AMLO, me debo a la opinión pública, ya no me pertenezco”

Poniéndonos a tono

 

 

 

Documentar la corrupción que se vivió en el minigobierno de Miguel Ángel Yunes Linares no es nada del otro mundo. Todos sabemos por ejemplo que desde el gobierno de Javier Duarte de Ochoa, se tejieron infinidad de redes de corrupción en toda la administración pública, entre ellas la de la Secretaría de Salud.

Y Yunes, que prometió combatir la corrupción decidió, desde el primero día de su minigobierno dar continuidad a las prácticas de saqueo fundadas por el duartismo, pero ahora incluyendo a familiares cercanos  los que aprovecharon la cercanía con el titular del ejecutivo para encargarse, entre otras cosas, de la supuesta remodelación y equipamiento de diversos hospitales en la entidad, lo que les sirvió para dar de baja cientos de equipos médicos, los cuales revendieron, y los que adquirieron nuevos, en cientos de millones de pesos, se los quedaron para revenderlos al gobierno mediante empresas fachada.

En un documento que nos hicieron llegar, nos informan que de este jugoso negocio presuntamente se encargaron Félix Malpica Jiménez y su esposa Karen Collado Yunes, sobrinos de Miguel Ángel Yunes Linares, quienes a través de las empresas fantasma que crearon consumaron el desfalco a la Secretaría de Salud y Asistencia de Veracruz.

Muchos de estos equipos, los más costosos ni se estrenaron, fueron adquiridos en el mes de abril y mayo del 2018, pero al perder la elección “Miguelito” el primero de julio, los equipos se quedaron embodegados para tratar de revenderlos hasta los dos últimos días del gobierno yunista.

Durante un recorrido realizado por las bodegas que se encuentran en la colonia Constituyentes de la ciudad de Xalapa, se pudo constatar la información antes mencionada. En dicho lugar se encuentran los aparatos que deberían estar instalados y funcionando en los distintos hospitales para los que fueron adquiridos con dinero público, del estado.

Los equipos contaban con el registro del hospital al que debieron canalizarse, pero nunca llegaron, por ejemplo al de Cardel, al general de Coatzacoalcos, al Luis F. Nachón y al Regional de Veracruz.

Los trabajadores del sector salud que han sido testigos de estos actos de rapiña y corrupción oficial, así como todos los veracruzanos, esperan que el nuevo gobierno realice las investigaciones necesarias y castigue a los responsables. Es tan grave este asunto como el de las quimioterapias con agua que según aplicaron a menores con cáncer que tantas veces mencionó el ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares.

Cabe hacer notar que todos los medicamentos que adquirió el sector Salud en el trágico gobierno de Yunes, los compró en un laboratorio ubicado en el vecino estado de Puebla y además crearon una empresa para prestar los servicios de diálisis y hemodiálisis.

Entre los aparatos que remataron estos ratas los últimos días del anterior gobierno había máquinas de Rayos X, incubadoras, respiradores, ventiladores volumétricos, camillas y todo lo necesario para equipar un quirófano, por ejemplo.

No se trata de tomar venganza de nadie, pero si de hacer justicia.

 

No es posible perdonar

 

En su discurso de toma de posesión en el Congreso, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador, le dijo al ex Enrique Peña en su cara, que dejaba un país con una deuda que él había generado de “cinco mil billones de pesos” más a la que ya existía heredada por las administraciones de Vicente Fox y Felipe Calderón, o sea Peña solito la incrementó en “cinco mil billones”. Sin embargo “para no hacer circo” y porque no se trata de venganzas ni de perder el tiempo en estas cosas porque además no alcanzarían las cárceles de México para meter a los corruptos, él los perdonaba.

La reacción a esta inexplicable actitud del nuevo presidente generó protestas en los medios de comunicación, expertos en el tema de las finanzas, la aplicación de la justicia y en nuestras leyes opinaron:

“En derecho, sobre todo en materia penal, cuando se trata de la dispensa de una pena, lo técnicamente apropiado es hablar de indulto. En el derecho constitucional mexicano hacerlo es una facultad que se ha confiado al presidente de la República y a los gobernadores de los estados. Hay dos clases de indulto: el necesario y el gracioso.

Ambos proceden cuando el condenado por sentencia firme se halla a disposición de la autoridad ejecutiva para compurgar la pena impuesta. No procede concederlo durante la secuela del procedimiento; hacerlo implicaría interferir en la función jurisdiccional. Existen otras vías para no continuar un proceso penal. En estos casos la ley confiere la responsabilidad de operarlas al Ministerio Público”.

“Que con anticipación se ofrezca “perdonar” actos de corrupción denota exceso, ignorancia o soberbia. Las tres son criticables y más en un gobernante”.

“Cuando se ofrece perdón en las circunstancias en que se ha hecho, implica:

–Que el fiscal general de la nación o el fiscal anticorrupción no serán autónomos y que en el ejercicio de sus funciones estarán sujetos a la voluntad del presidente de la República. Esto es peligroso; lo es por cualquier lado que se le vea. No es una buena señal.

–Que alguien que no tiene derecho a hacerlo impida al Ministerio Público el ejercicio de su obligación de defender el patrimonio de la nación y lo prive de la posibilidad de investigar y perseguir a quienes han dispuesto indebidamente de los bienes públicos es un atentado contra la justicia; mucho más grave lo es si se toma en cuenta que por virtud del supuesto “perdón” se priva a la nación y a los mexicanos de la posibilidad de recuperar bienes que les pertenecen”.

 

Jorge Ramos, una lección de periodismo

 

En el portal noticioso de Carmen Aristegui publicaron ayer una entrevista con el influyente periodista Jorge Ramos. Le piden sus puntos de vista sobre el cambio de gobierno en México. El experimentado comunicador vaticina una luna de mil corta de los mexicanos con AMLO por los problemas de inseguridad y la solución de meter nuevamente al ejército en este asunto, y entre las preguntas que le hacen vemos una que tiene que ver con el oficio periodístico por lo que quisimos compartirla con ustedes. Ojo: no lleva destinatario es una lección de periodismo, porque luego hay quienes se ponen sacos que no son para ellos.

Pregunta: “¿Qué expectativas tienes acerca de la relación entre López Obrador y la prensa?”

Respuesta: “No podemos ser amigos López Obrador y los periodistas. El único periodismo que funciona es el que es contrapoder. Así como fuimos muy críticos de Calderón y Peña Nieto, tenemos que serlo de él. No podemos ir a las bodas, bautizos y fiestas de los políticos. Lo único que nos mantiene vivos y con credibilidad es mantener la distancia con el poder.”

 

De las promesas a los resultados

 

En su siempre interesante mensaje dominical, el Arzobispado de Xalapa se refiere al cambio de gobierno en los siguientes términos:

“La esperanza de que las cosas mejoren llegan con el arribo de nuevos servidores públicos que se espera trabajen por el bien común de los ciudadanos. Nos auguramos que los discursos inaugurales se verifiquen en la realidad para que México y Veracruz se conviertan en una tierra de oportunidades para todos. Es alentador que el gobierno de Veracruz dé muestras de austeridad, de cercanía con los gobernados y sensibilidad con los familiares de los desaparecidos. Será importante mantener la separación y autonomía de los tres poderes en el gobierno. En el Estado sigue habiendo una gran deuda social que el gobernante en turno debe atender con prontitud. Sería loable saber en qué condiciones se encuentra el Estado y qué estrategias se implementarán para dar respuesta a los graves problemas (inseguridad, violencia, pobreza, educación, salud) que aquejan a los veracruzanos. Ya pasó el tiempo de las promesas, ahora se deben empezar a cristalizar los resultados. Será fundamental que se promueva el respeto por los derechos humanos, el cuidado de la familia y que las libertades fundamentales sean garantizadas. Oramos por quienes ahora tienen la gran responsabilidad de llevar a buen puerto a nuestra nación y a nuestro estado”.

 

Reflexión

 

Una buena noticia para la burocracia estatal es la que dio el gobernador Cuitláhuac García, quien aseguró que no habrá despidos masivos de nadie en ninguna de dependencia. Que diferencia, hace dos años miles de veracruzanos fueron despojados de su fuente de empleo y puestos de patitas en la calle para en su lugar poner a los recomendados del Chiquiyunes.

Escríbanos a mrossete@yahoo.com.mx

 

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