El Retorno de Quetzalcóatl: La Travesía de Hernán Cortés
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Por Olivia Cadillo
Coatepec, Ver. 27 de agosto de 2019.- El Ayuntamiento de Coatepec, a través de la dirección de Educación, Deporte y Cultura, llevaron a cabo la conferencia magistral “El Retorno de Quetzalcóatl: La Travesía de Hernán Cortés”, impartida por el Dr. Jesús Javier Bonilla Palmeros, coatepecano y docente e investigador de la Facultad de Antropología e Instituto de Antropología de la Universidad Veracruzana (UV) y columnista de El Regional con su Crónica Coatepecana.
El Dr. Bonilla, hizo un recorrido virtual con material arqueológico para comprobar si existía un sustento ideológico en torno al culto de Quetzalcóatl y su transformación en el Dios Tlahuizcalpantecuhtli (la estrella de la mañana o planeta Venus).
Para ello, mostró unas piezas arqueológicas, las cuales fueron encontradas en la región coatepecana, sin embargo, algunas fueron llevadas al museo de Berlín, Alemania.
En una pieza se observó el juego de pelota del periodo clásico tardío, representa el sacrificio de un jugador ejecutado por dos sacerdotes que con un cuchillo extraen su corazón, ofreciéndolo a su deidad con cuerpo humano y con cabeza de serpiente.
Otra representación más, es un basamento donde dos serpientes se enlazan para remitir al movimiento, tienen una máscara del Dios del viento y una cabeza de serpiente emplumada. Entre otros relieves, se percató que a la serpiente se le guardaba culto, es decir, Quetzalcóatl siempre estuvo presente como deidad, era una entidad asociada con señorío y con el más alto rango a nivel político religioso.
Más adelante, el Dr. Bonilla comentó un mito sobre los dioses convocados por Tezcatlipoca, quienes realizaron diversos prodigios para engañar a Quetzalcóatl, uno de éstos fue la transformación de Tezcatlipoca en un anciano que le dio a beber pulque y se embriagó, así perdió la conciencia y la voluntad, olvidando la vida de penitencia y abstinencia del sacerdote, gravísima transgresión que afectó a la sociedad tolteca, Quetzalcóatl durmió embriagado y se olvidó de sus rituales, no acudió a bañarse de noche en la acequia ni se auto sacrificó con espinas de maguey, rompiendo así la comunicación con los dioses.
A esto, se le conoció como el primer colapso de índole religiosa en Tula, Quetzalcóatl se movilizó a Coatzacoalcos (escondite de la serpiente), se despidió de sus seguidores y prometió cobrar venganza por todos aquellos que le ofendieron. Se colocó su máscara preciosa y se subió a su barca de serpientes, posteriormente se prendió fuego, cuatro días estuvo en el inframundo, cuatro días se abasteció de flechas y al noveno sucumbo su corazón en el cielo y emergió como estrella de la mañana o el planeta Venus.
Asimismo, el Dr. Bonilla, glosó los tres códices procedentes del centro de Veracruz, mediante un análisis minucioso de los glifos, se identificó la llegada de Hernán Cortés y su paso por tierras que pertenecían a las comunidades totonacas: el Códice Tonayán – Misantla, Códice de San Antonio Tepetlán y el Códice de San Juan Chapultepec, todos ellos manufacturados en la segunda mitad del siglo XVI y utilizados en los largos procesos de litigios por tierras durante el periodo colonial.
“Espero que este material les permita dimensionar la relevancia de la primera etapa del proceso de conquista y es buen momento para dignificar a nuestros pueblos originarios, los que se enfrentaron ante una situación difícil, aliarse con el recién llegado o enfrentarse bajo el yugo de los aztecas”, así concluyó el Dr. Jesús Bonilla.
