EL TROVADOR SOLITARIO
Por un repentino y fuerte mareo, fue internado en un hospital; apenas treinta días antes había sufrido un derrame cerebral, que aunado a la diabetes que padecía, el paciente nuevamente se encontraba en estado grave; los médicos y enfermeras, luchaban para salvarle la vida. El sábado 30 de julio, pero del año de 2005, el tamaulipeco Pepe Jara, “EL TROVADOR SOLITARIO”, acudió a la cita con la muerte.
Esa tarde, los amigos que acudieron a acompañar a los familiares del “trovador”, comentaban que éste había nacido en Ciudad Madero, Tamaulipas, y desde muy niño su madre lo trasladó a la Ciudad de Chihuahua. También comentaban que su padre había sido un famoso “nómada revolucionario”, sin dar más detalles.
Alguien departió, que Pepe llegó al Distrito Federal en el año de 1947, cuando el bolero romántico estaba en su apogeo, e inmediatamente pasó a formar parte del trío Culiacán, que más tarde se convirtió en el trío Los Duendes, integrado por Gilberto Saucillo y el sinaloense Antonio Pérez Meza, el hermano menor de Luis, aquel que se hizo famoso cuando cantaba que se le había reventado el Barzón y que la yunta seguía andando.
Enrique Quezada, el primera voz del trío Los Diamantes, Enrique Cáceres, primera voz de los Tecolines, Panchos y Sombras, Pepe Olarte, de Los Delfines, Gilberto Peinado, de los Jaibos, Lalo Ayala y Rolando Morlet, de los Santos y muchos otros bardos, con aplausos, requintos y voces, despidieron al compañero, al fraterno, al amigo, al Trovador Solitario, PEPE JARA.
Amigos, lo decían las abuelas: «Vivimos entre dos nadas… nada al nacer, nada al morir”. Saludo a mi amigo Magno Manuel Montes, trovador por excelencia e intérprete de los buenos boleros.
¡Ánimo ingao…!
Con el respeto de siempre Julio Contreras Díaz
El DJ les envía esto de los Duendes de Pepe Jara…