Electos, a la escuelita
Electos, a la escuelita
Por Salvador Muñoz
Hace poco, diputados y alcaldes
electos de Movimiento Ciudadano estuvieron en Jalisco recibiendo capacitación
en aras de entender el cargo que van a ostentar, es decir, los preparan para
tal.
El hecho de que tal “curso intensivo”
haya sido realizado en Jalisco, no es de a grapas… no sólo porque en ese estado
gobierne Movimiento Ciudadano con Enrique Alfaro, sino por el hecho de lo que
hoy en día significa Jalisco en cuestión de desarrollo social con un personaje
como es el mandatario estatal que ha sido diputado local y alcalde en dos
ocasiones.
Los puntos a tratar fueron servicios
municipales, transparencia, presupuesto, participación ciudadana, buenas
prácticas municipales, medio ambiente, relaciones municipio-estado-federación y
comunicación política.
Quizás para muchos lectores esto no
diga mucho pero les recuerdo que los cargos siguen siendo por representación
popular y el voto ciudadano pudo haber hecho ganar a cualquier hijo de vecino
que no tenga idea y sólo buenas intenciones en lo que será su gobierno. Por
eso, la misma Paquita la del Barrio decía que a ella le iban a orientar qué
hacer por ser su primera incursión en la “polaca”…
Caso contrario ocurre al menos con dos
figuras del PAN, con ya un trecho recorrido en estos avatares. Citar a estos
dos personajes obedece a que mediáticamente son los más visibles del Acción
Nacional previo a su arribo al poder: Patricia Lobeira y Juan Manuel de Unanue.
Dijeran: no se duermen en sus laureles.
Es seguro que la capacitación es (debe
y debiera ser) una constante en su partido (o en cualquiera) y por ello, ya
llevan sus intenciones a otros menesteres como reuniones con poderes fácticos
que son determinantes en la vida y desarrollo de la zona conurbada
Veracruz-Boca del Río.
En el caso de Morena se sabe que ya
hubo cursos para sus diputados locales electos y se espera que haya más y a la
vez, igual haya más concurrencia.
Baste recordar que antes de conformarse
la LXV legislatura, Morena tuvo dos cursos pero que no tuvieron éxito porque
los electos no prestaron mucho interés en su capacitación lo que dio lugar a
que, una vez que entraron en activo, los yerros fueron increíbles que hicieron
de la bancada de Morena, una simple Mayoría Levantadedos.
Por cierto, sólo para dejar constancia,
muchas ocasiones nuestros Congresos (local y federal) han sido lugar para que
se ejerza este ejercicio que concede ser primera fuerza: se da paso al poder
del dedo aun cuando la oposición se desgarre vestiduras y gargantas en Tribuna
esgrimiendo los mejores argumentos.
Esto es en lo que respecta a diputados
con Morena, pero ojalá los cursos se extiendan para capacitar a los alcaldes
electos para evitar “Hipolitazos”. Si bien, Morena debe estar sumamente
agradecida con Ricardo Ahued, porque el trabajo de Rodríguez Herrero lo coloca
como la peor administración que se recuerde en la capital veracruzana, que ha
perdido su encanto siendo rebasada por otras ciudades como Boca del Río y
Orizaba, en cuestión de desarrollo.
En el caso de la futura bancada del
PRI, es seguro que a estas alturas, el otrora partidazo ya esté poniendo al
corriente a Marlon Ramírez, Anilú Ingram y Arianna, vía la Fundación
Colosio con Leticia Perlasca, secretaria académica, y sin duda, han de llegar
con agenda bajo el brazo para levantar la bancada, porque a veces, la actual
parece estar lejos del partido y cerca de Morena.
En el mismo tenor, de cursos intensivos
vía Fundación Colosio, han de estar los alcaldes y regidores electos.
Tanto el PAN, PRI y ahora Morena, nos
han demostrado que no basta ganar en las urnas, sino también prepararse en aras
de brindar al ciudadano que votó por ellos, un mejor gobierno; y al que no
cruzó la boleta por ellos, demostrarle que para éstos pueden convertirse
también en su voz, sea desde el Palacio Municipal o en el Congreso.
Al menos, lo que más quiere el
ciudadano, es que las buenas intenciones de los candidatos, se conviertan en un
buen ejercicio del Gobierno… ya no son tiempos para perder un año en curvas de
aprendizaje porque hay unos que están cerrando su ciclo y nomás no aprendieron.
De castre
¿Y si le decimos al presidente que
los niños enfermos de cáncer son cubanitos? ¡Quién quite y lleguen más pronto
los medicamentos!