ESTAMOS ANTE UN POSIBLE CAMBIO DE PARADIGMA EN LA COSMOLOGÍA
ESTAMOS ANTE UN POSIBLE CAMBIO DE PARADIGMA EN LA COSMOLOGÍA
Carlos Ochoa Aranda
Ciudad Universitaria, CDMX, 28 marzo 2025.- Lo más importante del informe de resultados de estos tres años del análisis del Instrumento Espectroscópico de la Energía Oscura (DESI, por sus siglas en inglés) es que estamos ante la presencia de un posible cambio de paradigma en la cosmología, es decir, el conjunto de conceptos de cómo se entiende el origen, evolución y estructura del Universo.
DESI se encuentra instalado en el telescopio Nicholas U. Mayall en el Observatorio Nacional de Kitt Peak, Arizona, Estados Unidos, y está en su cuarto año de observación de un total de cinco.
Lo anterior lo expresó Mariana Vargas Magaña, investigadora del Instituto de Física de la UNAM y una de las colaboradoras en México del proyecto DESI, que consiste en un sondeo espectroscópico donde se registraron diferentes objetos astrofísicos destacándose más de 15 millones de galaxias y cuásares (núcleos galácticos activos muy brillantes) para hacer un mapa 3D de la estructura a gran escala del Universo.
“Gracias a este mapa se puede observar la influencia de la energía oscura en la expansión del Universo durante los últimos 11 mil millones de años”.
Estableció que se utiliza su espectro porque eso permite observar qué tan lejos está por medio de una cantidad que se llama “corrimiento al rojo”, lo que da la coordenada radial. “Nosotros ya conocemos la coordenada angular, lo cual nos da una posición tridimensional de cada galaxia, y al mapear millones hacemos un mapa de la estructura a gran escala del Universo”.
En entrevista, la doctora en física con especialización en cosmología indicó que, para comprender este anuncio, que se emite en coordinación internacional, es preciso remontarse a cómo se ha entendido el Universo en las últimas décadas.
“Desde los años 20 sabemos que el Universo se expande, y a finales de los 90 descubrimos que la expansión se acelera. Aún no conocemos exactamente por qué, pero la mejor explicación es la energía oscura, una energía misteriosa que actúa empujando al Universo a expandirse cada vez más rápido”, aseveró.
Mariana Vargas mencionó que, aunque la naturaleza de esta energía oscura continúa siendo desconocida, podemos describir matemáticamente su comportamiento mediante ecuaciones que nos permiten generar un modelo que explique esta expansión acelerada.
“Se trata de un tipo de energía que no está descrita por el modelo de partículas que conocemos. Es nuestra manera de describir una nueva forma de energía aún desconocida, cuya principal evidencia es precisamente la aceleración de la expansión del Universo”, sostuvo.
La investigadora recordó que durante décadas los experimentos y mediciones en el ámbito de la cosmología sugirieron que el modelo que mejor describe las observaciones era uno que implicaba una densidad de energía oscura constante en el tiempo, conocido como modelo Λ-CDM, que ha sido, durante mucho tiempo, el más sencillo y exitoso para describir el Universo.
No obstante, subrayó que ahora la mejor explicación es una ecuación del estado de la energía oscura que varía en el tiempo. “Cuando se dice que la energía oscura se debilita, significa que su comportamiento ya no sigue la aceleración predicha por la constante cosmológica. En otras palabras, la expansión del Universo sigue acelerándose, pero a un ritmo menor”.
Durante años, afirmó, Λ-CDM fue el estándar en cosmología. Sin embargo, los datos de DESI combinados con otras observables, tanto del primer año como de los tres años combinados, indican que este modelo ya no describe con precisión las observaciones.
La universitaria enfatizó que lo anterior tiene implicaciones importantes de cómo entender el Universo: “En el paradigma anterior, la expansión continuaba acelerándose de manera constante. Ahora, con una ecuación de estado dinámica, el futuro del Universo podría ser diferente y depende de cómo evolucione la energía oscura con el tiempo”.
Relató que según los primeros análisis de los datos de DESI, las mediciones más recientes combinadas con otras observaciones parecen sugerir que “la densidad de energía oscura no es constante en el tiempo”, es decir, los resultados actuales indican que la densidad de energía oscura está evolucionando.
FUENTE: UNAM