FALLAN REFINERÍAS EN RETENER AZUFRE
FALLAN REFINERÍAS EN RETENER AZUFRE
Alfredo
González
Agencia
Reforma
Monterrey,
NL 20 marzo 2024.- Las refinerías de Pemex no cumplen las normas oficiales del
Gobierno federal para capturar el dióxido de azufre (SO2) que producen, revela
un estudio de Francisco Barnés de Castro y Alejandro Villalobos Hiriart.
El
análisis que realizaron los especialistas sobre los informes mensuales de Pemex
y la Sener de la producción de azufre de sus seis refinerías no deja dudas: las
plantas envenenan el ambiente.
En 2006,
la Semarnat emitió una norma oficial respecto a la recuperación de azufre en
las refinerías, que debe de ser igual o mayor al 90 por ciento de sus
emisiones, lo que no se cumple, como revelan datos de 2023:
*Cadereyta
recuperó 26 por ciento del dióxido de azufre que produjo, emitiendo 282
toneladas por día de este gas dañino a la atmósfera.
*Ciudad
Madero recuperó 13 por ciento, emitiendo 192 toneladas por día.
*Salamanca
recuperó 6 por ciento, emitiendo 98 toneladas por día.
*Minatitlán
recuperó 4 por ciento, emitiendo 775 toneladas por día.
*Salina
Cruz recuperó 2 por ciento, emitiendo 278 toneladas por día.
*Tula
recuperó un ínfimo 1 por ciento del dióxido de azufre que produjo, contaminado
la atmósfera con 409 toneladas por cada 24 horas.
El
dióxido de azufre es un gas incoloro, irritante y con un olor penetrante.
La
exposición directa al SO2 representa graves riesgos para la salud, ya que pasa
directamente al sistema circulatorio a través de las vías respiratorias.
«En
las nuevas refinerías, como el proyecto Dos Bocas, la obligación es de un 95
por ciento», aclaró en entrevista Barnés, quien fue subsecretario de
Energía en la Administración del priista Ernesto Zedillo.
La
evidencia de los datos es incontrovertible: las seis refinerías apenas capturan
entre el 1 y el 26 por ciento del SO2 que producen y en total envenenan al
ambiente con ¡2 mil 033 toneladas todos los días, incluyendo fines de semana y
días festivos!
Y el
envenenamiento de las refinerías podría ser mucho peor.
El
también ex Rector de la UNAM y ex comisionado de la Comisión Reguladora de
Energía (CRE) advirtió junto con Villalobos que su estimación no incluye las
emisiones de SO2 generadas por el empleo de combustóleo en las propias
refinerías.
«Todas,
no nada más la de Cadereyta, todas están emitiendo cantidades inauditas de
dióxido de azufre a la atmósfera, altamente tóxico, porque genera partículas
finas que van directo a los pulmones, lluvia ácida que corroe el medio ambiente
de la zona y que es visible en superficies metálicas», añadió Barnés.
Son
dos factores a los que atribuye el problema.
Uno es
la inoperancia de las plantas de captura de azufre.
El
otro es el uso de combustibles pesados, cuando las refinerías mexicanas fueron
diseñadas para procesar crudos ligeros, con menor contenido de azufre, pero que
Pemex tendría que importar, algo que la actual Administración rechaza por un
criterio ideológico relacionado con la «soberanía» nacional.