FIFA: EL VIRUS DE LA CORRUPCIÓN

Pedro Peñaloza

 
“El castigo del embustero es no ser creído, aun cuando diga la verdad”.
Aristóteles.

ERA cuestión de tiempo para que el castillo de mentiras que había venido construyendo la FIFA cayera en mil pedazos. La fiscal general Loretta Lynch, encargada de las investigaciones contra el máximo organismo, fue clara al mencionar que las tramas de sobornos, comisiones, compra de votos, evasión fiscal y lavado de dinero, han operado durante 24 años. Estas acusaciones hechas por el FBI en contra de altos funcionarios de FIFA (entre los que se encuentra el presidente de CONCACAF), indican que la corrupción era ya parte natural del organismo y que la mayoría de asignaciones de torneos y copas se decidían, no por la mejor propuesta, sino por quién ponía más dinero sobre la mesa.
La detención de los altos ejecutivos de FIFA se da en el momento de la inminente reelección de Joseph Blatter, cuyos mandatos han tenido varios escándalos de corrupción y recientemente por la polémica designación de Rusia y Qatar como sedes mundialistas, mediante la compra de votos. Hasta el momento Blatter no figura entre los detenidos y próximos a ser extraditados a EU, pero siendo la cabeza del organismo, además de que varios de los acusados de corrupción sean parte de su círculo cercano de colaboradores, es casi imposible que no supiera o fuera parte de toda esta red, máxime que el suizo es uno de los directivos que más han defendido las sedes mundialistas, tan es así, que la FIFA en contra de todo, planea pasar para invierno el torneo que se realizará en suelo qatarí.
Sin embargo, Blatter ha tomado estas detenciones actuando como víctima: “Seguiremos trabajando con las autoridades y dentro de la FIFA para desenraizar cualquier mala conducta y recuperar la confianza y garantizar que el futbol en todo el mundo está libre de fechorías” (sic). Pareciera como si todos los detenidos hubieran actuado a su espalda, y él, ignorante de toda esta corrupción, se enterara por la investigación del FBI de lo que estaba pasando con sus colaboradores. ¡Pamplinas! El suizo con 17 años en el poder (el presidente anterior Havelange, estuvo 24), negociando constantemente los derechos de transmisión de TV, sedes mundialistas, patrocinadores, venta de boletos, copas y torneos, etc. parece imposible que no estuviera al tanto de lo que pasaba en sus oficinas de Zúrich.

Por tal motivo, la renuncia de Blatter debería ser la principal acción que FIFA tendría que hacer para no entorpecer las investigaciones, hasta que se esclarezcan todas las imputaciones que pesan en contra de los directivos de la organización. Seguramente, la Fiscal Lynch tiene en la mira a Blatter, pero sabe que primero debe formar un expediente fuerte, con muchas pruebas contra el presidente de FIFA, para que su investigación limpie de corrupción al organismo.
De esta manera, la FIFA necesita una refundación si quiere volver a tener autoridad dentro del medio futbolístico. Asimismo, esta alcantarilla de corrupción ha puesto en el ojo del huracán a las confederaciones del continente americano, tanto CONCACAF como CONMEBOL han perdido a sus máximos dirigentes y la próxima Copa América del centenario, que se realizará en Estados Unidos, donde participarán selecciones de ambas regiones, se ha puesto en duda hasta que terminen las investigaciones. Por otro lado, llama la atención la postura ascética e híbrida de la FMF, al señalar “que no emitirá ningún comentario a los hechos acontecidos”. ¡Caramba! El temor de algún involucramiento se pasea como fantasma en las oficinas de los directivos mexicanos.
Algo Más. Por el diseño del sistema de competición, ahora tenemos como posible campeón al sexto u octavo lugar de la liga. De su mediocridad en el torneo, ascendieron a un magnífico nivel. La pregunta permanente es: ¿Por qué no juegan siempre a ese nivel? La respuesta, quizá sea de filosofía profunda… El equipo de Tigres está ya en semifinales de la Libertadores, ahora el torneo se verá cortado por la Copa América, perdiéndose el ritmo de juego de los finalistas. La falta de planeación es clara en CONMEBOL, es como si en Europa cortaran las finales de Champions por la Eurocopa y las reiniciaran meses después. Ver para creer.
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