Gabinetitis: Nada de que este Ros ya se coció
HORA LIBRE
Álvaro Belin Andrade
Dos promotores culturales se han lanzado a buscar respaldos (uno con firmas directas, la otra mediante la red Change.org), con miras a convencer al gobernador electo para ocupar la Secretaría de Cultura, en que se convertirá el IVEC; otro personaje, con un dudoso rendimiento en el ayuntamiento, ha involucrado a prestadores de servicios para convencer de que es la mejor opción para la Secretaría de Turismo (desprendida del ingrediente cultural). Más allá, un personaje más atrevido ha colocado anuncios espectaculares para apoyar su campaña rumbo a la dirección de Tránsito; alguien más perdió la oportunidad por salir del closet a decir que estaba enfocado en una de las secretarías.
Una de dos: o se respira un ambiente tan democrático que cualquiera considera la posibilidad de aventarse al ruedo para competir en abierto por algún cargo en la próxima administración, o de plano consideran que Cuitláhuac García Jiménez necesita ayuda para conformar su gabinete. Lo primero podría ser interesante si el propio gobernador electo lanzara una convocatoria para tales fines; lo segundo significaría más bien una afrenta para quien ha logrado la mayor votación histórica en Veracruz, dejando el mal sabor de boca de que solo ganó por el tsunami lópezobradorista.
Ni una cosa ni la otra. En todo caso, lo que podría quedar bien es que el ganador, en el enorme periodo que se abre entre que es declarado electo y toma posesión, decide convocar varios concursos por oposición para ocupar cada una de las secretarías, y entonces sí cada uno de los postulantes presentaría sus currícula, proyectos y visiones de futuro, para ser evaluados.
Pero Cuitláhuac García no está en una posición de “Juanito”. Es un profesional preparado y quiere ser él, acaso con el apoyo y la asesoría del futuro presidente de México y su círculo más cercano, quien decida quién es el más indicado o la más indicada para cada una de las posiciones que quedarán vacantes a partir del 1 de diciembre.
Ya lo ha dicho con todas sus letras que los actores políticos que se promocionan para formar parte del nuevo Gobierno no serán tomados en cuenta, porque los funcionarios que lo acompañarán se elegirán luego de realizar algunas consultas ciudadanas para determinar al mejor perfil. “Será por consultas, estamos consultando a la gente en general, esos que andan con espectaculares están descartados”. En efecto, no es quien más se promociones sino quien cuente con el mejor perfil.
Y lo explicó en una improvisada rueda de prensa en el marco de su reunión con la dirigencia del sindicato de telefonistas: “Es que no puede ser ése el mecanismo, imagínate, alguien se promociona en un espectacular y ya quiere ser. No, vamos a analizar a la gente, vamos a analizar los perfiles, pero ése no va a ser el mecanismo”. Y fue más claro: ninguno de los nombres que se han señalado para ser secretario de Turismo, entre ellos el director del área en el Ayuntamiento de Xalapa, serán tomados en cuenta.
Apenas el lunes, prestadores de servicios turísticos de las 7 regiones del estado anunciaron que el mejor perfil para Secretario de Turismo es Luis Eduardo Ros, quien actualmente es Director de Turismo del Ayuntamiento de Xalapa. Pero no parece que la iniciativa pueda tener futuro, a la luz de las aclaraciones hechas por el gobernador electo.
Por tanto, aunque a algunos nos pique la curiosidad, a otros les deslumbre su bola de cristal y a los menos les palpite el curriculum, lo cierto es que tendremos que esperar a noviembre para que se dé a conocer el gabinete completo.
Las benditas redes sociales
“Qué mundo tan agresivo el de #Twitter. Por eso no escribo por aquí tan a menudo como yo querría. El lenguaje cargado de ira y la agresividad no me gustan. De todas formas #FelizLunes a los que no don #bots y saben conducirse con respeto. #seanfelices”. Beatriz Gutiérrez Müller @BeatrizGMuller
Los zopilotes sobrevuelan Morena
En Morena, muchos de los gestores del triunfo, los de base, e incluso aquellos que tuvieron un liderazgo destacado, corren el riesgo de ser desplazados por personajes provenientes del PRI, el PAN y el PRD que ya instauran organizaciones, establecen comités de base, se promueven para próximas candidaturas o presionan para mostrarle al gobernador electo que ellos son los buenos para ser secretarios de despacho, directores generales, hasta jefes de departamento, en un bochornoso cambio de piel y un vergonzoso oportunismo político.
En todos los rumbos de Veracruz (y del país), muchos vivales están abriendo incluso oficinas de Morena, aun sin estar afiliados al hoy partido aplanadora, y están convenciendo a sus antiguos correligionarios de que fortalezcan esos comités, con miras a la próxima elección.
No solo eso. Muchos están levantando firmas, recogiendo credenciales, entusiasmando a la gente con aquello de que serán beneficiarios de los programas sociales “de Morena”, embarcando al partido y colocándose sobre los comités reales que han estado bregando a favor de quien hoy es presidente electo. Hasta ha debido salir a aclarar las cosas el propio partido en un comunicado en que pide a la gente que no se deje engañar.
“Los programas sociales que serán aplicados durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y Cuitláhuac García J., serán universales y no están condicionados a la afiliación a Morena o a la participación en asambleas de Morena. Al día de hoy no se están realizando censos o actividad alguna, relacionada con la operación de dichos programas”.
Y alerta: “No entregues documentos tales como credencial de elector o comprobante de domicilio, a quien te llegue a decir que viene de parte de Morena o AMLO para integrar programas”.
Todo parece indicar que, ante la catarata de oportunistas que se están acercando para ser cobijados electoralmente, Morena ha programado su congreso nacional extraordinario para este domingo 19 de agosto, donde es posible que acuerden mantener cerrado su padrón nacional, no abonar en asuntos electorales salvo en aquellos estados que en 2019 tendrán elecciones locales, y evitar que las candidaturas sean ocupadas por personas que se hayan afiliado luego de los comicios del 1 de julio.
En Veracruz, donde la grilla es permanente, se sabe que personajes como el próximo diputado federal Héctor Yunes Landa andan cortejando al gobernador electo, ofreciéndole su organización Alianza Generacional y los oficios políticos para que su gobierno sea exitoso. Y ya sabemos cómo se las gasta el choleño, quien pese a la derrota estruendosa del PRI hace poco más de un mes logró al menos tres posiciones, sin mayor mérito que haberse mantenido montado en el caballo de que sería nuevamente candidato a Gobernador.
Otro personaje siniestro que merodea a Morena es el exalcalde de San Rafael, Héctor Lagunes Reyes, electo para cuatro años gracias al PRD, quien impuso a su hijo Héctor Daniel como candidato de la alianza PAN-PRD y como ganador de la contienda el año pasado, y ahora busca repetir en las glorias de un municipio que solo gana para enriquecer a sus funcionarios municipales. A través de su gente busca endulzarle el oído a cuanto morenista se le ponga enfrente, a nivel estatal y nacional, para venderle caro su historial de corrupción, represión y mal gobierno. Quiere lograr lo que Miguel Ángel Yunes Linares no pudo: conservar en los miembros de la familia el poder municipal.
Comentarios: belin.alvaro@gmail.com