Gladys Hernández y el fuego olímpico
Por Mary Paz Monzón & Help´
Con motivo del 50 Aniversario de los Juegos Olímpicos México 68 El Regional buscó en la memoria y en el corazón de una mujer coatepecana, Guadalupe Gladys Hernández Silva, quien fue parte de la escolta de atletas veracruzanas que trasladaron el fuego olímpico a su llegada a tierras mexicanas.
La Maestra Gladys Hernández fue campeona de velocidad en relevos de 4×100 imponiendo record nacional 48´01´´, record que duró dos décadas, cuando la ola verde veracruzana era considerada una potencia en las pruebas de pistas y campo.
Gladys Hernández, fue llamada a la Pre selección nacional con miras a la Olimpiada del 68, desgraciadamente no obtuvo el permiso de su padre para continuar los entrenamientos en el CDOM en la ciudad de México. En aquel tiempo, nuestras marcas estaban muy cerca de las alemanas, pero tuve que elegir entre la obediencia o continuar mis sueños deportivos. Dice 50 años después la reconocida Maestra.
La querida maestra Gladys, abre el baúl de los recuerdos para platicarnos de aquella mañana del 6 de octubre a la llegada de la llama Olímpica que desde Grecia viajó por alta mar hasta el puerto veracruzano, ahí fueron seleccionados los mejores deportistas Veracruzanos para escoltar el espíritu olímpico.
Para portar la antorcha se necesitaba fuerza y resistencia, se requería extender la mano al frente y sostener un peso de 2.5 k durante 1 kilómetro, la antorcha quemaba ya que usaban una bengala, de los ferrocarrileros, había que tener cuidado porque quemaba.
Entre las anécdotas destacó que hubo quienes se desmayaron porque no aguantaron el trayecto entre el peso y la emoción. En nuestro turno del recorrido escoltamos a un atleta que conforme avanzáramos la gente iba cerrando el paso haciendo más angosto el camino, era tal la euforia del pueblo que hicieron trayectos muy complicados. Además, se apagó el fuego en uno de los relevos, alguien de inmediato quiso encender la antorcha nuevamente. Los organizadores lo impidieron al instante, llevaban en una caja especial el fuego olímpico como un resguardo para asegurar que el espíritu del antigua Grecia iluminara al deporte moderno y continuara el símbolo de los valores olímpicos, como la solidaridad, excelencia, respeto, justicia entre otros.
Como parte de la conmemoración de este medio siglo del evento ese mismo día 6 de octubre de este año habrá un recorrido en el puerto y el día 7, en Xalapa se hará lo propio por las calles hasta llegar al estadio Xalapeño donde 4 deportistas, y aquellos que hicieron historia participarán nuevamente, entre ellas la Mtra. Gladys Hernández.
A su memoria llegaron nombres de entrenadores, compañeros, competencias y las grandes pistas que pisaron por aquellos años, escenarios testigos de la famosa ola verde que hizo historia.
El deporte ha cambiado al igual que el mundo su esencia sigue viva a pesar de estos cambios, está presente siempre para un triunfo es necesario la disciplina, tener muy claras nuestras metas, priorizar nuestra actividades enfocadas al objetivo así se trazan estrategias para alcanzar nuestros sueños que a la larga se transforman en estrategias para la vida. En este andar, pasan muchas cosas no todas buenas hay quien nos frena o nos impide seguir, también hay caídas, derrotas y de ellas aprendemos a levantarnos. Ser campeón de la vida y de las pistas se requiere una fortaleza física y mental, subraya la educadora física Gladys Hernández.
Muchas historias, lecciones del deporte, la educación y la vida que a lo largo de su carrera ha dejado en las pistas y en las aulas su legado a las nuevas generaciones, formando deportistas y entrenadores. Gracias Maestra.
Gladys Hernández Silva, orgullo de Coatepec.
