Gómez Cazarín ¿gobernador?, el otro “Juanito”
Gómez Cazarín ¿gobernador?, el otro “Juanito”
Línea Caliente
Por
Edgar Hernández*
Sin medir tiempos ni
circunstancias políticas, solo imitando a López Obrador, el destapa corcholatas,
el diputado Juan Javier Gómez Cazarín, levanta el dedo y adelanta la carrera
por la gubernatura del 2024.
Abre frentes al declarar la
guerra contra Zenyazen Escobar en complicidad con el Secretario de Gobierno,
Eric Cisneros, quien también trae su juego y simula disciplina con su jefe Cuitláhuac
para cubrir las formas.
Gómez Cazarín convencido de
que no habrá dedazo local pretende jugar a las grandes ligas partiendo de que
así como se sacó la lotería un payaso animador de mítines como Cuitláhuac
García, él en su calidad de analfabeto funcional y artífice del trabajo
político sucio, también podría ser el nuevo “Juanito de Hueyapan” que gobierne
Veracruz.
¿Y Nahle, Manuel Huerta y
Ahued?
En los círculos de este
tramposo en sus jugadas políticas, quien a conveniencia de manera por demás
sospechosa se enferma de Covid-19 cuando el Congreso está en crisis, está
cierto que Nahle ya salió del afecto del gran elector y que nunca pasará por el
Congreso local que encabeza, la modificación constitucional que le permita a no
nacidos en Veracruz aspirar al máximo cargo de elección popular en el estado.
En paralelo a Sergio
Gutiérrez Luna lo ve como un advenedizo oportunista que funge tan solo como
distractor y que él es el verdadero dueño del padrón electoral, que en el 2018
alcanzó los dos millones de votos para López Obrador y más de 1.5 millones para
Cuitláhuac.
Nada que Ahued o Manuel
Huerta se cuelen. Ahued está controlado y a Huerta Ladrón de Guevara,
Cuitláhuac lo va a mandar al Senado.
Y es que el control, según
él, lo tiene desde el Congreso. Es desde ahí donde se gesta toda la tenebra
como ese tosco armado y producción de “Anonymous” en complicidad con el Bola #8
para mantener a raya a Yunes Linares y de paso amenazar de muerte a periodistas
críticos.
Trae un mundo de
perversiones en mente y tiene claro que no le es suficiente un escaño en el
Senado de la República como le ha propuesto el gobernador en pago a su trabajo
en las cloacas políticas.
90% leal a Morena con ominosos méritos por ser
el operador político que tumbó a Jorge Winkcler, que manipuló el nombramiento
de la Fiscal General, que a la mala expulsó a la titular del Sofía Martínez
Huerta para poner a una autista y operar la elección del 6 de junio en la
compra del voto, se cree merecedor a la silla de Palacio.
Para el olvidó, según él, queda
que tras la detención de Fabian «N», alcalde electo en Lerdo de
Tejada, el pasado 2 de diciembre, dejó al descubierto el entramado delincuencial
encabezado por el propio Gómez Cazarín.
Tampoco cuenta que
en la operación financiera y gestión de compra-venta del ingenio “El Naranjal”
en mil millones de pesos, intervino su compadre Juan Javier Gómez Cazarín quien
también operó la compra de “Coyame, a través de uno de sus prestanombres, Rubén
Darío Carrasco, operador de negocios turbios como constructoras, inversiones en
maquinaria.
Más lodo.
Evidencias muestran
que Gómez Cazarín tiene vínculos empresariales con el propietario del Club de
Futbol Sosca F.C cuyo dueño ¿adivine usted quién es? pues ni mas ni menos que
el hoy indiciado “Fabian N”, ligado al Cartel de la Zona Cañera de Lerdo.
“Sosca F.C.”
participa en la tercera división profesional con una inversión de cercana a los
100 millones de pesos.
Ha sido asimismo relacionado con temas
de secuestro y delincuencia organizada y de imponer a su padre como alcalde de
Hueyapan de Ocampo por sus huevos.
Igualmente está ligado con otra
alcaldesa.
Se trata de Lizzete
Álvarez, alcaldesa de Alvarado citada por el propio Cuitláhuac García por sus
vínculos delincuenciales, cabeza del grupo de secuestros exprés.
Ese es pues, el nuevo “Juanito” que busca
gobernarnos a partir del 2024.
Tiempo al tiempo
*Premio Nacional de Periodismo