LA BATALLA DE CERRO GORDO

Por Jorge Vela

La Batalla de Cerro Gordo es un episodio de la intervención estadounidense en México, cuya confrontación se realizó el 17 y 18 de abril de 1847. El ejército mexicano, numéricamente superior, no pudo vencer a las fuerzas extranjeras, sin embargo, las acciones de la Guardia Nacional de Coatepec fueron loables. Los coatepecanos destacaron, tanto por su participación valerosa en el campo de batalla, así como por socorrer heridos y dispersos tras el enfrentamiento. Dicho gesto, símbolo inequívoco del alto civismo de los compatriotas, debe renovar en nosotros el amor por la patria y por nuestros conciudadanos.

Durante el siglo XVIII, los Estados Unidos ejecutaron una política expansionista que aumentó su territorio con la anexión de Florida y Luisiana. Posteriormente, la Unión intentó comprar Texas, recibiendo una rotunda negativa del gobierno mexicano. No obstante, los estadounidenses motivaron la independencia de la provincia, declarada en 1836, y en 1845, la anexaron como estado. Este último suceso marcaría el inicio de la Guerra México-Estadounidense, toda vez que la Unión Americana dirigió sus esfuerzos para obtener California y Nuevo México.

Las tropas norteamericanas cruzaron la frontera y, el 13 de marzo de 1846, el congreso de dicho país declaró la guerra. Los invasores ocuparon California, Nuevo León, Tamaulipas y Coahuila y bloquearon varios puertos, entre ellos Tampico, Guaymas, Mazatlán y San Blás. Al año siguiente, las fuerzas navales al mando de Winfield Scott, sitiaron el puerto de Veracruz, el cual se rindió el 27 de marzo (Ortíz Escamilla, 2011). El objetivo de esta acción era consolidar una posición para emprender camino a Ciudad de México. Ante las intenciones, el General Santa Anna emitió la orden de fortificar Cerro Gordo para hacer frente a la amenaza. El ejército de Oriente junto con diversas brigadas, divisiones especiales y guardias nacionales, estableció su campamento en el sitio (Alcaráz, Ramón; et al, 1970).

El gobierno federal determinó convocar a una forma de milicia para ampliar las acciones contra las hostilidades estadounidenses. Las -guardias- eran cuerpos no profesionales conformados por ciudadanos armados provenientes de las clases medias y bajas. Pertenecer a ellas daba cierta representación ante las autoridades y prestigio social (García Suárez, 2018). Estos factores, sumados al patriotismo, fueron los motivantes para que muchos coatepecanos, así como civiles de otras localidades, asistieron al llamado para defender a la nación.

Las fuerzas correspondientes a Jalapa y Coatepec, que estaban dirigidas en conjunto por el capitán Mata, arribaron a Cerro Gordo en una fecha anterior al día 12 de abril. La Guardia Nacional correspondiente a Coatepec era comandada por Juan Clímaco Rebolledo, miembro de una de las familias más prominentes de la localidad. Sus labores militares eran auxiliadas por J. M. Barriento, por el teniente Manuel Lara, por el subteniente Prisciliano Rebolledo y por el subteniente Francisco Contreras. La tropa estaba conformada por 250 infantes y 60 lanceros coatepecanos. (García Morales & Blásquez Ojeda, 2013)

Las hostilidades comenzaron el día 17 de abril cuando la avanzadilla estadounidense tomó la delantera, pero sería el 18 de mismo mes cuando se ejecutaron las acciones más determinantes. Los activos norteamericanos lograron cercar a las fuerzas mexicanas que, al percatarse del hecho, se retiraron en un gran desorden, implicando con ello la derrota. El general Santa Anna se replegó con rumbo a El Lencero y posteriormente a Tuzamapan. (Alcaráz, Ramón; et al, 1970) El ejército extranjero avanzó hacia la ciudad de Xalapa y la tomó de manera pacífica, instaurando un gobierno militar durante meses.

Ante la derrota, Juan Clímaco Rebolledo permaneció en el sitio 3 días más, auxiliando a heridos y dispersos, a quienes trasladó a Coatepec utilizando el capital de sus soldados y el propio. Una vez en el pueblo, los vecinos facilitaron servicios médicos a por lo menos 174 individuos. Debido al alto civismo que demostraron, la legislatura elevó a Coatepec a la categoría de villa al año siguiente haciendo patente la gratitud por los servicios a la patria. (García Morales & Blásquez Ojeda, 2013)

Por su parte, las tropas de Scott, llegaron al altiplano: al tomar la Ciudad de México, la rendición fue inevitable. El 2 de febrero de 1848 se firmó el Tratado de Guadalupe Hidalgo que fijó los limites territoriales entre ambos países. México cedería más de la mitad de su territorio a cambio de la obtención de la paz. Con tristeza, nuestros ancestros fueron testigos de tal despojo, sin embargo, su espíritu nada quedó a deber a la patria, pues se entregaron a la causa nacional. Debemos emprender acciones que imiten su entrega, que revaloren su loable proceder y que den rostro a cada uno de los defensores de la patria.

¡Viva México! ¡Viva Coatepec!

Referencias

Alcaráz, Ramón; et al. (1970). Apuntes para la historia de la guerra entre México y los Estados Unidos. México: Siglo XXI.

García Morales, S., & Blásquez Ojeda, M. (2013). Estudio preliminar y facsímil de los «Apuntes históricos y geográficos de la villa de Coatepec-1864» de Antonio Mateo Rebolledo.Estudio preliminar y facsímil de los «Apuntes históricos y geográficos de la villa de Coatepec-1864» de Antonio Mateo Rebolledo. Coatepec: Imprenta Toscana.

García Suárez, M. A. (2018). La Batalla de Cerro Gordo: experiencia militar mexicana durante la intervención estadounidense, 1847. Xalapa: UV.

Ortíz Escamilla, J. (2011). Veracruz ante las guerras internacionales. . En M. Aguilar Sánchez, & J. Ortíz Escamilla, Historia General de Veracruz (págs. 245-250). Xalapa: Editora del Gobierno del Estado de Veracruz.