LA DEFENSA DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES Y LA DIVISIÓN DE PODERES SON IMPERATIVOS EN UN PROCESO DE PAZ: LOMELÍ
LA DEFENSA DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES Y LA DIVISIÓN DE PODERES SON IMPERATIVOS EN UN PROCESO DE PAZ: LOMELÍ
· El rector de la
UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, inauguró el XVI Congreso Iberoamericano de
Derecho Constitucional “El Constitucionalismo para la democracia del siglo XXI.
Homenaje a la Constitución Federal de 1824”
·
Participaron Norma Piña Hernández, Ana Lilia Rivera Rivera, Mónica González
Contró y Diego Valadés Ríos, entre otros
El rector de la UNAM,
Leonardo Lomelí Vanegas, afirmó que la defensa de los derechos fundamentales,
el respeto a la división de poderes y el robustecimiento de marcos
constitucionales son imperativos para respaldar los procesos de paz y
desarrollo.
Al inaugurar el XVI
Congreso Iberoamericano de Derecho Constitucional “El Constitucionalismo para
la democracia del siglo XXI. Homenaje a la Constitución Federal de 1824”,
acompañado por la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación (SCJN), Norma Piña Hernández, el rector señaló que una de las barreras
más grandes que enfrentamos en muchas regiones del mundo es dar continuidad a
democracias inclusivas y resilientes, además de fenómenos políticos que
debilitan las instituciones democráticas.
Ante este panorama, las universidades y los centros de investigación jurídica
son determinantes, pues allí convergen las ideas y el pensamiento crítico para
construir soluciones a los problemas más complejos de nuestra era, recalcó en
presencia de la directora del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de
la Universidad Nacional, Mónica González Contró.
“Hoy más que nunca, el Derecho Constitucional enfrenta el reto de
adaptarse a nuevas realidades sociales, políticas y culturales, ya que la
globalización, las crisis económicas recurrentes, la emergencia climática, la
brecha de género y el vertiginoso avance tecnológico han puesto a prueba
prácticamente todos nuestros preceptos. En este contexto, nuestras
normatividades deben modernizarse, sin renunciar a los principios centrales del
Estado de derecho”, aseveró en el acto organizado por IIJ y el Instituto
Iberoamericano de Derecho Constitucional.
En el auditorio “Héctor Fix Zamudio”, del IIJ, Norma Piña aseguró: no por tener
una Constitución, un Estado es Constitucional. Los elementos básicos de éste
son: la conservación y el respeto a la democracia, al Estado de derecho, a la
división de poderes, a la colaboración entre ellos, a la independencia judicial
y a los derechos fundamentales.
Celebró la realización del Congreso que reúne a académicos y
especialistas, pues consideró que efectuarán un análisis objetivo y propositivo
de temas fundamentales para la democracia del siglo XXI, como los derechos
humanos, la justicia constitucional, el federalismo y la descentralización, los
regímenes de gobierno y la gobernabilidad democrática, entre otros.
Piña Hernández sostuvo que el constitucionalismo está sujeto a fuertes
golpes de timón, y la democracia constitucional atraviesa momentos delicados en
el mundo y, en especial, en nuestro país. Por ello, en las últimas semanas han
habido diversos pronunciamientos en torno a las implicaciones de la reforma
judicial en México, los cuales subrayan la necesidad de un análisis profundo
sobre sus impactos.
En su oportunidad, la presidenta de la Comisión de Defensa Nacional en el
Senado de la República, Ana Lilia Rivera Rivera, también celebró la realización
del Congreso efectuado de manera híbrida -que reunirá a más de 300
especialistas- pues coincide con una etapa crucial para la democracia y el
Estado de derecho en la nación, en la que se han realizado reformas
constitucionales trascendentes y que han generado un intenso debate y múltiples
posturas.
El Senado de la República, añadió, ha sido partícipe de este proceso,
pero los juristas y académicos tienen la responsabilidad de analizar el derecho
positivo de manera constructiva, identificar áreas de mejora y proponer
soluciones que permitan que leyes e instituciones evolucionen. La reflexión
seria y objetiva es fundamental.
Previamente, Mónica González Contró dio la bienvenida al encuentro y precisó la
importancia de reflexionar sobre la democracia en la región que, dijo, es
imperfecta, pues no ha logrado incorporar como ciudadanos a todas las personas
que son parte del pueblo.
Lamentó que diversas encuestas reflejen un desapego de las personas a la
democracia y cada vez más un respaldo a medidas autoritarias, derivado de que
no se ha podido garantizar la seguridad a todos, no se han reducido
significativamente las brechas de desigualdad ni se ha generado un Estado de
bienestar.
Es indispensable seguir pensando en la necesidad de reformar nuestro sistema
para lograr una ciudadanía incluyente, que entienda los derechos políticos más
allá de las elecciones, apuntó.
Asimismo, el presidente del Instituto Iberoamericano de Derecho
Constitucional e investigador emérito de la UNAM, Diego Valadés Ríos, explicó
que, en muchas naciones las instituciones muestran señales de estrés ante el
acoso al que son sometidas, en un contexto de posverdad, posdemocracia, y
posconstitucionalismo.
La posdemocracia, detalló, es el uso de instituciones democráticas para
concentrar el poder y no para servir a la libertad, promover la igualdad ni
garantizar el pluralismo; mientras que el posconstitucionalismo es un sistema
de apariencias formales que enmascara realidades opuestas al Estado
constitucional.
“Sigue la ruta trazada por la posdemocracia y la posverdad, acude a
instrumentos democráticos para legitimar un poder concentrado y discrecional, y
los órganos del poder simulan estar separados, pero se subsumen a una voluntad
personal, elegida como voz de la voluntad colectiva”, dijo.
Por ello, remarcó
que el Estado constitucional es un sistema de equilibrios, que supone reglas
para compensar y armonizar fuerzas, y la pérdida de estas puede generar tensión
que lleve a la ingobernabilidad. Con esta preocupación se construyó la agenda
del Congreso.
En la inauguración participaron también: el coordinador de Humanidades, Miguel
Armando López Leyva; la directora de la Facultad de Derecho, Sonia Venegas
Álvarez; la directora del Centro de Estudios Políticos y Constitucionales,
Rosario García Mahamut; el integrante del Comité Directivo del Instituto
Iberoamericano de Derecho Constitucional, Domingo García Belaunde; así como el
vicepresidente del mismo Instituto, José María Serna de la Garza.
FUENTE: UNAM