Las ambiciones de Palacio
Las ambiciones de Palacio
Por Pedro Peñaloza
“El poder no corrompe; el poder desenmascara”.
Rubén Blades
La propuesta del Presupuesto de
Egresos del gobierno lopezobradorista prioriza sus proyectos para garantizar la
continuidad de este grupo hegemónico. No oculta sus afanes abusivos con esa
mayoría legislativa. Los recursos públicos que se habrán de ejercer para el
2021 profundizan sus rasgos neoliberales-asistencialistas, priorizando el
trinomio, a saber, seguridad pública, proyectos insignias y clientelares.
Veamos: esta es la distribución
autoritaria de acuerdo al dictamen de la Comisión de Presupuesto de la Cámara
de Diputados: en el primer rubro, la todologa Secretaría de la Defensa Nacional
contará con 112 mil millones, un incremento de 19%; asimismo, Marina 35 mil
millones; la Secretaría de Protección Ciudadana y Seguridad Pública, 63 mil
millones; la Guardia Nacional recibirá 35 mil millones, un incremento de 21.8%;
adicionalmente, los militares recibirán 500 millones de pesos más para
construir 76 cuarteles. Así, el paradigma punitivo se mantiene, reproduce y
amplía por esta llamada “izquierda” verde olivo.
En los proyectos estrellas
destaca el crecimiento de 1300% del Tren maya, en la misma tendencia está la
construcción del aeropuerto de Santa Lucía, el cual aumenta 283%. En el rubro
llamado de Bienestar, la bolsa será de 436 mil 811 millones de pesos, donde 313
mil millones están etiquetados a 14 programas de carácter electoral. Por si
algo faltara, AMLO contará con tres programas sin reglas de operación (su “caja
chica”) para transferencias directas por 14 mil 867 millones.
En contraste, en año electoral y
con consulta, al INE se le recortaron 870 millones de pesos; el presupuesto
para la búsqueda de personas desaparecidas y no localizadas tendrá la pírrica
cantidad de ¡700 millones!; a Cultura se le asignó apenas el 10% de lo asignado
al Ejército, 13 mil millones; en plena crisis ecológica, Medio Ambiente recibe
31 mil millones de pesos; en un gobierno que supuestamente apoya la ciencia y
tecnología, se le darán a Conacyt 26 mil millones; como no les gusta la
transparencia, se reducen 13 millones al INAI; y dado que la educación crítica
les molesta, a la UNAM le asignaron 42 mil millones; al Politécnico, 18 mil
millones; a la UAM, 7 mil millones, el incremento a estas instituciones fue
sólo para cubrir la inflación.
En síntesis, el esquema es tan
simple como obvio: AMLO hizo un
presupuesto para fortalecer sus proyectos antiecológicos, garantizar sus pactos
con las fuerzas castrenses y tener una gran bolsa de recursos económicos para
su política clientelar del año electoral próximo. Hoy las ambiciones del
inquilino de Palacio están a la vista. Ya veremos el comportamiento de las
urnas.