Las campañas electorales
BITÁCORA POLÍTICA
Las campañas electorales
Vemos lo de
siempre: acarreos, compra del voto, mítines y despensas
· En Tuxpan promete poner orden y que vuelva la
felicidad
· La Cuatro T no busca culpables sino a quien
encarcelar
Por Miguel Angel Cristiani Gonzalez
A estas alturas de las campañas
electorales para elegir a los 212 presidentes municipales y sus respectivas
comunas, cuando ya casi se encuentran en la mitad del mes, que tienen para
convencer a los votantes de que sufraguen a su favor el próximo domingo 6 de
junio, cada quien está haciendo sus tareas políticas, como dios les dio a
entender y de acuerdo con los recursos de que disponen.
Los hay que ya tienen experiencia en
el tema de las campañas electorales y por eso siguen aplicando las formas y
acciones que en el pasado les dieron resultados.
Aunque también es cierto, que luego
del sunami político que resultaron las pasadas elecciones presidenciales, en
donde MORENA y Amlo arrasaron con las votaciones, no tanto por las campañas que
hicieron, sino por el descontento de la gente hacia los otros partidos
tradicionales.
Para algunos observadores del proceso
electoral de este año, el fenómeno puede repetirse en buena parte, no tanto por
el descontento o desacuerdo con la política actual del gobierno en el poder,
sino por los beneficios repartidos ahora en los mal llamados programas sociales
de bienestar, que entregan dinerito constante y sonante a todos los sectores de
la población, desde los adultos mayores hasta los jóvenes que ni estudian ni
trabajan, pero que reciben sus becas.
Tenemos el caso del municipio de
Tuxpan, en donde Alberto Silva El Cisne, ya fue presidente municipal con el PRI
del 2011 al 2013 y ahora pretende volver a ocupar la silla palaciega bajo las
banderas del Verde Ecologista, haciendo campaña en base a videos y reuniones
masivas como en el pasado, cuando no estábamos viviendo en la pandemia de Covid
19 y se podían hacer reuniones de grupos.
Ahora su slogan de campaña es ¡Que
vuelva la felicidad a Tuxpan! ¡Y el otro lema es “Vamos a poner Orden en
Tuxpan”!
Solamente que se refiera a la
tristeza que dejó en sus paisanos, en la anterior ocasión que gobernó el
municipio, al que dejó con una deuda multimillonaria que todavía no se termina
de pagar.
¿Vamos a poner orden? A menos que
pretenda volver a poner orden con otro crédito millonario para cubrir el
desorden que dejó.
Y es que ese slogan de ¡Que Vuelva la
Felicidad! Nos recuerda aquel librito de “Merezco Abundancia” a cuya autora
están a punto de regresar de Londres, para que enfrente los cargos por el
desvío del presupuesto del DIF hacia empresas fantasmas y si empiezan a jalar
hilitos, van a encontrar que uno de los operadores, favoritos de Javidu, que
recibían esos dineros era quien ahora quiere ir a poner orden en su terruño.
Y ahora que en la Cuatro T no están
buscando culpables, sino quien puede ser acusado, no sería raro que apuntaran
hacia el norte del estado, nuevamente.
Pero volviendo al tema de las
estrategias electorales, hay que recordar que desde hace tiempo, la propaganda,
el proselitismo y la comunicación política se han vuelto predominantemente
digitales.
Las redes sociales, los medios, los
canales y las diversas plataformas son los escenarios más relevantes de
contienda, debate, control, persuasión y manipulación de las voluntades
electorales.
Por un lado, el imparable
desplazamiento de los medios tradicionales y por el otro las secuelas y efectos
de la pandemia de Covid-19, obligan al replanteamiento de las tácticas de
proselitismo.
Aunque en estas elecciones estamos
viendo lo de siempre: acarreos, compra del voto, mítines, despensas, recorridos
y discursos; será imprescindible que los candidatos recurran a las herramientas
tecnológicas de punta en materia electoral.
El enorme flujo de datos que se
pueden obtener de los medios digitales nos permite construir una estrategia muy
directa y simplificada. Hoy podemos detonar, orientar, estimular e influir
sobre las emociones, intereses y demandas sociales, económicas y políticas.
Hasta ahora, uno de los mayores
temores a los que se exponen los candidatos son las revelaciones, crisis y
escándalos en Internet. Te puede llevar años y mucho esfuerzo construir una
percepción positiva entre los electores, sin embargo, las redes sociales, los
Influencers, un video, una foto o un post pueden hacerla pedazos en tan solo
unos segundos.
Los aspirantes a puestos de elección,
hacen de todo para construir una imagen valiosa y positiva, editan sus
historias, resaltan sus cualidades y virtudes; pero tanto tus rivales como las
audiencias digitales prefieren indagar, fiscalizar, encontrar y exponer las
debilidades, vicios, defectos, mentiras y exageraciones en las que incurras.
Tenemos una vida real pero también
otra digital y -para tus audiencias clave- la segunda suele prevalecer sobre la
primera.
En nuestros días, cualquier ciudadano
armado con un celular se vuelve potencialmente un riesgo. Saber cuidar las
palabras, los movimientos, las actitudes, los gestos y cada una de las señales
que emitas es fundamental, no todos soportan la presión, no todos saben y se
exponen de manera irresponsable e impreparada a estas arenas.
Todo -absolutamente todo- lo que
hagas en campaña es susceptible de sátira, parodia, meme, ocurrencias o
deformaciones, las audiencias consideran que todo es auditable y criticable.
Salir a hacer campaña te expone a que
salgan a la luz pública las anécdotas, propiedades, excesos, chismes,
conflictos, fiestecitas, rumores, relaciones y negocios vergonzosos,
censurados, privados o de dudosa procedencia en los que podrías estar
involucrado. Si son ciertos o no -eso no importa- la cuestión es que puedan ser
usados en tu contra, capitalizados en las urnas y que, sobre todo, se hagan
virales.
Para reclutar, convencer y difundir
tus propuestas, no hay nada mejor que ir conforme a lo que es tendencia, las
redes sociales te permiten acceder a públicos enormes de manera fácil, simple y
económica, saber usar estas plataformas te da una ventaja comparativa contra
otros candidatos.
Hacer campaña hoy requiere de contar
con un manejo excelso de todas las plataformas, no caigas en el ridículo, si no
sabes cantar, bailar o no eres simpático, busca los elementos de tu
personalidad que puedan servir a una estrategia electoral, en los medios
digitales si existe la publicidad negativa, mala, mordaz y alterada.
Los periodistas auténticos
Influencers, dictan tendencia, marcan, alinean y despliegan su peso entre sus
seguidores, a ningún aspirante le conviene pelearse o quedar mal ante ellos, no
quieres acarrear a comunidades enteras en tu contra, acuerda, concilia,
demuestra, ponte en orden si no quieres arrastrar el peso de detractores y
críticos altamente tecnologizados.