LAS CORCHOLATAS Y LA RECONCILIACIÓN
LAS CORCHOLATAS Y LA RECONCILIACIÓN
Uriel Flores Aguayo
El Presidente AMLO decidió
tener tres precandidaturas para sucederlo en el cargo. Las denominó corcholatas.
Desde hace más de un año están en abierta y adelantada precampaña para darse a
conocer y armar sus estructuras de apoyo. Hay una corcholata oficial y
preferida en la persona de la jefa de gobierno de la CDMX, quien recorre
nuestro país los fines de semana con el respaldo de gobernadores. Salir de la
ciudad para aumentar sus niveles de conocimiento le va a costar simpatías y
apoyo de los chilangos.
Pagará un alto costo electoral
en el riesgo de perder para el partido oficial el gobierno de la Ciudad de
México. No tiene de otra ante el poco entusiasmo que despierta en donde se
pare. No tiene segura la candidatura y puede quedarse fuera si las
circunstancias se complican para el proyecto transexenal. Sin fuerza propia,
dependiente en lo absoluto de AMLO es fácilmente sacrificable (desechable). Si
se apaga el plan A, resurgirá la opción B hasta ahora del Secretario de
Gobernación, quien ha venido ascendiendo en niveles de aceptación y
conocimiento desde el rudo activismo que le extrae a su cargo. Además de que
cuenta con la absoluta confianza del Presidente. Es notable el oficio político
de Adán Augusto, que se refleja en la integración de sus estructuras. La
tercera corcholata es Marcelo Ebrard, el más preparado y capaz de los tres.
Tiene en contra que no es de la plena simpatía de AMLO por su carácter
independiente. Su nombre pesa y aparece bien colocado en las encuestas; si no
le hacen trampa, puede ganar la encuesta a condición de que sea real. Es de
alta incertidumbre lo que hará un día después de la publicación de las
encuestas. Es de pronóstico reservado conocer la decisión que tomará en el
sentido de disciplinarse o romper con Morena. Evidentemente Marcelo es un
candidato fuerte y con posibilidades de ampliar el apoyo electoral hacia el
bloque gobernante. Su problema tiene que ver con las actividades elitistas a
que es afecto y su alejamiento de la ciudadanía. No será fácil para AMLO
convencerlo y retenerlo en caso de que el dedazo sea descarado.
Hay un cuarto candidato en
Morena, este no cuenta con la bendición presidencial; se trata del Senador
Monreal, de carrera propia y sólida biografía pública. Es el rebelde, el
olvidado del Presidente y atacado con la tontería y ocurrencia. La tesis
principal del Senador es la reconciliación, una palabra y concepción muy
fuerte. Es clave plantearlo así si observamos el tono rijoso, excluyente y
faccioso del poder. México no aguanta otro sexenio de división, de polarización
y monólogos. Es una visión estratégica justa y realista la desplegada por el
Senador Monreal. El tono empleado por él es seguramente su convicción, pero
también tiene que ver con su grosera exclusión del círculo oficial. Es probable
que, de contar con la bendición presidencial, su proyecto fuera más contenido y
moderado. Los demás aspirantes hacen todo tipo de desfiguro y seguidismo a
niveles de frívola monetización en aras de ganar la voluntad presidencial. Es
lógico. A excepción de Monreal, los demás no hablan de reconciliación,
continúan con el discurso fácil, donde prefieren una réplica hueca del discurso
presidencial.
Monreal adelanta, lo puede
hacer y lo hace, la oferta fundamental que van a ofrecer todos los aspirantes
desde el oficialismo: reconciliación. Lo tienen que hacer si quieren ganar la
presidencia, pero será así hasta que obtengan la candidatura; así ha sido
siempre. Ahorita se cuidan de endulzar el oído a AMLO, a tener toda la
paciencia para no contradecirlo y esperar con la vela prendida la decisión del
gran elector mediante la dedo- encuesta. En fin, todas las campañas serán de
reconciliación; unos más, otros menos, pero todos lanzarán propuestas de
apertura y diálogo. El liderazgo, su personalidad y circunstancia no se
transfieren; como tampoco es replicable el contexto del 2018. Cada elección
tiene sus propias características.
Recadito: luz eterna y viaje
amoroso para el gran Pablo Milanés 🙏🌹…