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Las instituciones, como patrimonio familiar

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Las instituciones, como patrimonio familiar

Por Aurelio Contreras Moreno

Entre las muchas taras que han caracterizado el ejercicio del poder de la “4t” en el estado de Veracruz, destaca con fuerza su tendencia recurrente al nepotismo con absoluta desvergüenza.

Multidocumentado fue el caso del subsecretario de Finanzas y Administración de la Secretaría de Finanzas y Planeación, Eleazar Guerrero, de quien se probó su parentesco en primer grado ni más ni menos que con el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, de quien es medio hermano, como el propio mandatario terminó admitiendo tácitamente al “echarle la culpa” a la abuela.

A pesar de ello, García Jiménez lo mantiene hasta la fecha en un cargo estratégico, pues Eleazar Guerrero es quien maneja y dispone el destino de los recursos presupuestales de la entidad y coloca a los operadores de la Secretaría de Finanzas en todo el organigrama gubernamental.

Pero no es el único familiar directo del gobernador de Veracruz sobre el que existen historias de tráfico de influencias y hasta de abusos. Hacia el principio de la actual administración estatal, circuló una denuncia en contra de uno de sus hermanos, Tonatiuh García Jiménez, violista de la Orquesta Sinfónica de Xalapa y a quien empleados señalaron de manejar a su antojo –y sin atribución legal alguna- al Instituto Superior de Música de la Secretaría de Educación de Veracruz (ISMEV) a donde, de acuerdo con lo que se hizo público en los medios en ese momento, llegó a imponer a todos los directivos -incluido al director de su orquesta- además de colocar a recomendados para sustituir a los trabajadores que ahí laboraban.

Y no terminan ahí las historias de nepotismo de Cuitláhuac García Jiménez. También a la par del inicio de su administración, su padre Atanasio García Durán fue apuntalado para impartir conferencias en instituciones públicas de educación sobre una corriente pedagógica denominada “Nueva Escuela Mexicana”. Obvio, con cargo al erario y disponiendo de las plataformas gubernamentales para la promoción personal del progenitor del mandatario, quien fuera presidente de la mesa directiva del Congreso del Estado en el primer tramo del sexenio de Fidel Herrera Beltrán, con quien entabló una gran y pública cercanía con todo y que en ese entonces era diputado del Partido de la Revolución Democrática. O sea, de “oposición”.

Dicha promoción con recursos del gobierno continúa. Este viernes 19 de febrero la emisora estatal Radiotelevisión de Veracruz transmitirá a las 11 de la mañana la conferencia “TEBA: riqueza y embrión para la Nueva Escuela Mexicana. AUTOPOIESIS”, impartida por Atanasio García Durán. Pero con una “pequeñísima” salvedad.

Este mismo jueves 18 de febrero, fue enviada una circular en la que se “convoca” a todo el personal de Telebachillerato del estado a sintonizar la citada conferencia del padre del gobernador. Pero con algunas acciones precisas a realizar. Por ejemplo: “todo el personal del centro deberá tener y enviar a coordinadores evidencia fotográfica de encontrarse tomando dicha conferencia (evidencia 1)”, se lee en la insólita instrucción.

También se establece que “se enviará a coordinadores el enlace donde el personal docente, administrativo y de intendencia podrán contestar los cuestionamientos referentes a dicha conferencia ingresando con la matrícula y contraseña utilizadas en el curso anterior de google (evidencia 2)”.

“Los docentes deberán solicitar a los estudiantes la evidencia académica que consideren adecuada (resumen, mapa conceptual, mental, etc.) y enviarlas, junto con el listado de alumnos que cumplieron con la misma, a los coordinadores (evidencia 3). Los estudiantes que entreguen dicha evidencia académica obtendrán en el mes de marzo constancia de participación, que será descargada y enviada por los coordinadores a cada uno de ellos”, concluye la comunicación.

Ya no solo hablamos pues del evidente nepotismo. También de un claro abuso, manipulando a las instituciones estatales, a sus empleados, docentes y hasta a los alumnos como si fueran parte del patrimonio de la familia García Jiménez. Nuestras “bendiciones”.