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Los médicos ya estamos cansados

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Los médicos ya estamos cansados

Por Héctor Larios Proa

La pandemia no da tregua, los contagios continúan y la labor de médicos y personal de los hospitales se agrava día a día. La polarización llegó también a los medios de comunicación, unos publican notas enfocadas a la falta de atención en los hospitales, el viacrucis de los enfermos, la falta de insumos en centros de salud. Mientras otros publican la versión oficial: “todo está bien”.

El Regional ha estado hablando con los verdaderos protagonistas, aquellos que sufren o han sufrido de los contagios, hoy toca el turno al doctor Adrián Oscar Nájera Ortega, cirujano ortopedista del Hospital General Regional 1, Dr. Carlos Mac Gregor Sánchez Navarro, quien ha estado laborando en esta pandemia desde marzo.

Platicamos con él para conocer cómo es un día de trabajo.  Su día comienza a las 4 de la mañana sale de casa a las 5:15 para ir al hospital, checa tarjeta y se reporta al servicio de medicina interna. Ahí recibe el enlace de la guardia y se dispone a entrar al área Covid. Con vestimenta adecuada y se les designan a los pacientes hospitalizados.

“Mi equipo Covid está formado por un líder que generalmente es de medicina interna y 4 médicos de apoyo, somos de diferentes especialidades hay de neurología, reumatología, ortopedia, cirugía general, urología, hematología, otorrinolaringología, de todos los servicios, se nos asigna número de pacientes de acuerdo al número de integrantes”. Dice el doctor.

Inicia el recorrido de visita y revisión a pacientes, checan signos vitales, oximetría, auscultan en qué condiciones se encuentran, si tiene mascarilla con reservorio, si tiene mascarilla simple, si tiene puntas nasales, cuántos litros requiere por minuto esa oxigenación, etc. con estos datos se ajusta el manejo establecido en las indicaciones médicas. 

¿Cuantos pacientes atiendes?

“En general vemos en un promedio de entre 6 y 8 pacientes dependiendo el número de integrantes de un equipo”. Continua la charla, “posteriormente hay reunión con el médico líder y entregamos la guardia, quien se encarga de hacer los ajustes necesarios”.

Salimos del área Covid, mediante un protocolo bien establecido, nos desinfectamos las manos cada vez que hacemos un cambio, pasamos al retiro de la vestimenta que utilizamos para entrar y 

nos bañamos inmediatamente y cambio de uniforme quirúrgico. Nos dirigimos a dar el reporte de estado de salud a los familiares,
la entrega de la guardia al personal que se queda en el turno vespertino que son los médicos residentes”.

¿Cuál es la situación en un hospital de Covid-19?

El hospital cuenta con 3 pisos de hospitalización, con dos áreas cada uno de 26 pacientes, en estos momentos estamos prácticamente al 100%, las camas que se desocupan son inmediatamente ocupadas por pacientes que se encuentran en el servicio de urgencia y están esperando cama disponible.

La situación es grave, cada día tenemos más pacientes y menos insumos para mantenerlos estables, nos faltan medicamentos, nos falta material, nos falta personal. Porque los médicos ya estamos cansados, los médicos ya estamos saturados. El 60% la planilla de médicos del hospital, por lo menos, tienen incapacidad por permisos Covid, por situaciones legales como amparos, porque no quieren entrar y ponen cualquier pretexto. Comenta con preocupación.

¿Cuál ha sido la situación de mayor riesgo que te has enfrentado? La posibilidad de infectarme, porque cada vez que entras al área Covid tienes un alto porcentaje de contraer el virus, si te contagias y tu organismo no tiene la suficiente capacidad de respuesta, nos podemos morir, infectar o contagiar a nuestros familiares.

¿No te has contagiado? Sí, de hecho, yo también salí positivo, pero fui un paciente asintomático, bueno, tuve pérdida del gusto y del olfato. Mi esposa e hijo ya sufrieron de coronavirus, esto fue más o menos en junio del 2020. Gracias a Dios y a los cuidados que tuvimos en familia salimos adelante.

¿Al respecto qué dijeron las autoridades? Se negaron hacerme pruebas de diagnóstico, negaron un permiso para estar con mi familia, tuve que seguir trabajando y enfrentar esta situación.

¿En qué piensas en esta pandemia?  Pienso en mi familia, me angustio cuando pienso que tú puedes ser portador del coronavirus y puedes llevar esa enfermedad a tu casa, pensar que puede ser tú el culpable de que alguno de tus familiares directos fallezca por esta situación, es una sensación de impotencia y miedo por la familia, hijos, esposa, madre y hermanos.

¿Consideras que la estrategia del gobierno es la que se requiere? “No”, responde tajante. Argumenta, “estuvo mal manejada desde un principio, el gobierno federal y sus autoridades no tomaron las medidas precautorias para que esto no se desbordara, lo único que les interesa es tener camas disponibles y por lo mismo no se han hecho las pruebas necesarias para detectar la infección, hay muchos pacientes asintomáticos que andan en la calle infectando a otros más y esto es consecuencia de la negligencia tanto del presidente como del señor López-Gatell, los cuales siguen manifestando que el uso de cubrebocas no es necesario”.

¿Qué debemos hacer? La principal estrategia es usar el cubrebocas, establecer sana distancia, evitar las aglomeraciones, no acudir a fiestas, prescindir de salir si no tenemos cosas que hacer en la calle.

Doctor Adrián, en tus palabras hay molestia, enojo.  Sí, porque nosotros estamos cansados, ya no podemos más, nuestra situación laboral ya es muy cansada. Somos los mismos médicos desde que se inició la emergencia, los demás se encuentran en sus casas tranquilos reciben el bono Covid, y su salario íntegro, mientras los que estamos trabajando tenemos menos consideración por parte de las autoridades. Responde claramente sin esconder su disgusto.

¿En qué condiciones llegan los pacientes? Llegan bastante graves porque algunos no quieren entrar a los centros hospitalarios, están mal informados, creen que nosotros los médicos los estamos matando, creen que cometemos negligencias. El problema es que estamos saturados, estamos llenos y a veces no hay espacio para poderlos recibir. El principal problema es que los pacientes tienen miedo, llegan graves, saturados al 50 ó 60% porque se mantuvieron en sus casas, pacientes que fueron manejados en forma particular y que no quisieron acudir al hospital porque temor.

¿Qué sentimientos has experimentado en esta contingencia? “Impotencia, miedo, tristeza cuando ves a los pacientes solos, en cama.  Los pacientes que mueren sin una persona que les tome de la mano, alguien que les rece, que los acompañe a un buen morir, es altamente desesperante. El sentimiento es de impotencia, miedo e incapacidad, porque a veces no puedes darle todo lo que merece un paciente en estas circunstancias.  Sientes pena, angustia, dolor por él y sus familiares, además la falta de recursos te limita aún más. Yo quisiera poder ayudar más a mis pacientes, pero a veces no es posible. Pero aquí seguimos con todo para poder controlar esta pandemia”. Cuenta resignado.

¿Tienen los materiales para atender a los pacientes?

En estos momentos estamos escasos, cada vez tenemos menos medicamentos, e insumos, el material que nos dan para entrar a las áreas Covid está disminuyendo, las donaciones que teníamos ya se terminaron y las autoridades no hacen nada por remediar esta situación. La austeridad que el gobierno federal ha impuesto en este en este sexenio, es gastar lo menos posible.

¿Qué mensaje le envías? “Por favor, sigan las indicaciones de no salir de casa, usen el cubrebocas, lavarse las manos, aplicar gel con alcohol, que se cuiden, eviten aglomeraciones, no anden en fiestas. Los muchachos, los hijos, los adolescentes y jóvenes se van infectar, pero ellos no se mueren, los que nos morimos somos nosotros la gente mayor, la gente susceptible mayor de 60 años”. Sentencia el doctor.

“Esto no ha terminado, que la población no tome riesgos innecesarios. En los hospitales donde trabajo estamos cansados, estamos saturados, estamos consternados y tenemos miedo porque, esto no se controla tenemos temor porque, esto va a seguir avanzando ya tenemos más de 105 mil muertes y esto sigue en aumento. 

Tengo coraje, porque el gobierno federal no hace nada, porque el gobierno federal sigue mintiendo y sigue diciendo que todo está bien, que tenemos un 58% de disponibilidad de camas en los hospitales y eso no es cierto, esto está mal y va a seguir peor. Probablemente para marzo llegamos a las 200 mil muertes oficiales, y digo oficiales porque en verdad tenemos más, muchos más muertos en este país a causa del coronavirus y por la negligencia de las autoridades federales. Concluye, un médico que está en el frente de batalla.

Nos despedimos del doctor Adrián Nájera O. a quien le agradecemos su testimonio, para dar a conocer de viva voz su pensar y sentir como profesional de la medicina. Un hombre con valor y de valores que habla de frente sin protagonismos, un doctor de carne y hueso que ama su profesión y levanta la voz para servir mejor. A él como muchos doctores más agradecemos su vocación y les decimos GRACIAS.