LUIS ECHEVERRÍA, ENTRE LA MASACRE DEL 68 Y EL HALCONAZO
LUIS ECHEVERRÍA, ENTRE LA MASACRE DEL 68 Y EL HALCONAZO
Luis Echeverría nació en la Ciudad de México el
17 de enero de 1922, estudió en la entonces Escuela Nacional de
Jurisprudencia de la UNAM -hoy Facultad de Derecho- fue secretario particular
del presidente del PRI hasta llegar a la Presidencia de la República por el
PRI.
Luis
Echeverría Álvarez gobernó
México entre 1970 y 1976.
Personaje polémico, contradictorio, tuvo durante su gestión una
política exterior de largo aliento, que se caracterizó, entre otras
cosas, por su impulso a los
países del llamado Tercer Mundo y al Movimiento de los
Países No Alineados en plena Guerra Fría, y el apoyo a los Gobiernos de la
región, como el encabezado por Salvador Allende, en Chile, y el de Fidel
Castro, en Cuba.
A lo largo de su Presidencia, abrió las puertas a exiliados
sudamericanos, perseguidos políticos y expulsados por las
dictaduras en Chile, Argentina, Uruguay y Bolivia.
“Las relaciones con
Estados Unidos
ni nos perjudican ni nos benefician,
sino todo lo contrario».
Echeverría
Se le recuerda por ser considerado una
de las mentes detrás de dos masacres estudiantiles en la
segunda mitad del siglo XX en México, no importa que la justicia lo exoneró en el
último tramo de su vida.
La Ciudad de México, que sería ese año la sede de
los XX Juegos Olímpicos, vivió
su propio movimiento estudiantil. El Gobierno mexicano decía
que todo era parte de una
conjura comunista. Echeverría era entonces el Secretario de
Gobernación, el responsable
de mantener la estabilidad política del País y décadas
después, según documentos desclasificados del gobierno estadounidense, se supo
que en esos años también actuaba como agente de la CIA, bajo el nombre clave de
LITEMPO-8.
Tras meses de protestas, la tragedia llegó el 2 de
octubre de 1968: en la Plaza de Tlatelolco, en la zona centro
de la capital, decenas de estudiantes y civiles murieron en medio de una
balacera en la que participaron militares y agentes gubernamentales vestidos de
civil. Según cifras oficiales, murieron unas 25 personas, aunque algunos estiman que al menos
fueron 350.
Es expresión de falta de apoyo popular
y de miedo a la inteligencia,
por eso se refugia en la
clandestinidad».
También se
le acusa de la matanza del Jueves de Corpus, en 1971, ya
como Mandatario. Echeverría negó a lo largo de su vida haber ordenado las
represiones.
El 10 de junio de 1971, estudiantes
marchaban por el centro de la capital cuando fueron atacados por un grupo de
choque conocido como “Los Halcones” y formado desde el
Gobierno. Al menos 12 jóvenes murieron.
Activistas y
políticos de oposición reclamaron justicia durante años sin éxito, lo que pareció
comenzar a cambiar con la llegada de la transición en México: en 2000 ganó la
Presidencia Vicente Fox, del PAN. Por primera vez en más de siete décadas, el
PRI perdía el Ejecutivo.
Fox creó una
fiscalía especial para investigar algunos de los capítulos de la represión gubernamental
y en enero de 2002 fue designado como Fiscal Especial Ignacio Carrillo.
El nuevo fiscal
presentó cargos de genocidio contra Echeverría en julio de 2004 por la
masacre de 1971. Un año después, lo acusó por la masacre estudiantil de octubre
de 1968.
En
2005, un juez lo exoneró de cargos de genocidio derivados
de la masacre de estudiantes en 1971. El juez falló que el ex Presidente pudo
haber sido responsable de homicidio, pero que no podía ser juzgado porque el plazo de prescripción para
ese delito expiró en 1985.
Como Mandatario, Echeverría
realizó obras públicas sin precedentes en medio de una bonanza petrolera tras
el hallazgo de importantes yacimientos de crudo. Su política de inversiones
públicas, sin embargo, se tradujo en un aumento
de la deuda externa y de la inflación, además de una fuerte
devaluación del peso frente al dólar.
Echeverría pasó
sus últimos años fuera de los reflectores y fue el ex Presidente más longevo. En
varios momentos tuvo que ser hospitalizado. Falleció el 8 de julio de 2022.