Mancha y el “Chapito”, desgracias del PAN

Línea Caliente

Por Edgar Hernández*

¡Al Partido Acción Nacional le cayó la peste bubónica!

Con la “ayuda” y bendición de los Yunes –padre e hijo- el Partido Acción Nacional en Veracruz, transita de la fractura a la destrucción.

En las puertas de renovarse su dirigencia sus más preclaros exponentes Pepe Mancha, perdedor de la gubernatura y con un pendiente por aclarar de 70 millones de pesos y el otro Joaquín Guzmán, de familia caciquil de horca y cuchillo y cuentas por aclarar ante ORFIS por 35 millones de pesos, apuestan por el desacreditado liderazgo azul.

Uno de estos dos finos caballeros tomará el control de Acción Nacional para trabajar los siguientes años en favor de Miguel Angel Yunes Márquez porque estamos advertidos que “la lucha sigue”.

Previsible, por tanto, que la nueva dirigencia sea el principio de la lucha por el poder rumbo al 2024 llevando como “tapado” justamente al “destapado” Miguel chico quien con todo y el casi 1.5 millones de votos que alcanzó el pasado primero de julio no pudo superar a Cuitláhuac García.

Así, a la luz de este plan ranchero, de nueva cuenta queda fuera la vieja estructura, la que dio vida y sentido político al Partido Acción Nacional hasta convertirlo en la segunda fuerza política.

Por lo pronto en la puja queda Mancha, un manchado fino para la transa a quien no bastó haber sido denunciado por haber recibido de manera ilícita contratos superiores a los  70 millones de pesos de la SIOP.

Tampoco haber utilizado a su propia madre Cristina Sergia Alarcón Pérez, para que cinco empresas recibieran contratos vía adjudicación directa o en concursos preferenciados de parte del Congreso del Estado.

Así, al observar el propio Pepe Mancha que la denuncia de sus ilícitos no iría más allá de un escandalillo periodístico, las empresas Multiservicios El Elemento S.A de C.V., Biodiversidad del Golfo S.A., Itazal Inmobiliaria S.A. de C.V., Innovadora de Medios S.A. de C.V., y Multimedios Periodísticos S.A. de C.V., renovaron bríos en la cosecha de dinero.

Mancha ha negado la propiedad de las empresas misma que es ratificada por sus propios trabajadores. Insiste en que son negocios de su mamá que de periodista ha de tener lo que Miguel Angel Yunes tiene de panista.

El punto es que Mancha, adicionalmente al apoyo financiero del Congreso del estado y antes de que pidiera licencia a la dirigencia, ha recibido contratos para su primo hermano de parte del ayuntamiento de Tuxpan, copia de los cuales tiene en su poder el diario el Heraldo de Xalapa, quien hace pública la información.

Referido a los contenidos de esos portales del primo hermano “cómodo”, Juan Antonio Aguilar Mancha, es necesario señalar que la información “periodística” que difunden corresponde a repetidos ataques a Morena, al alcalde de Xalapa y un sinfín de elogios a Sergio, el bailador, Hernández, así como a los boletines del gobierno.

Negocio redondo el que hizo Mancha al ponerse de rodillas ante Yunes Linares ya que sería beneficiario de repetidos  contratos de obra a través de licitaciones amañadas en la SIOP en donde resultó ganadora su empresa inmobiliaria Izal S.A., de C.V., por 32 millones de pesos.

Otras decenas de millones más dejaron de ser investigados al no encontrar nada ORFIS que nunca encontró los 70 millones.

Sin embargo, nada mejor es otro de su calaña.

Joaquín Rosendo Guzmán, el otro aspirante a la dirigencia azul, está atrapado en una leyenda de raterías y cacicazgos familiares.

Recién renunció a la secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca, dependencia que generó observaciones por más de 35 millones de pesos en el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS), mismas que debe solventar.

El apodado “Chapito”, es uno de los mejores amigos de Yunes Linares, ambos priistas que a conveniencia migran del PRI al PAN.

Tal como lo describe la puntual crónica de “El Mistico”, “tanto en el PRI como en el PAN, ha dejado constancia de su poderío político al tener el control de la huasteca jarocha. Tan sólo él ha sido presidente municipal de Tantoyuca en tres ocasiones, en los periodos 2000-2002, 2005-2007 y 2011-2013”.

“Del 2002 al 2005 dejó en la alcaldía a una persona de todas sus confianzas, a Héctor Lara Arguelles, que había servido como Secretario de Gobierno en el ayuntamiento en el periodo anterior”.

Como respuesta, luego del recuento periodístico de Marco Antonio Aguirre, el propio Yunes Linares salió a dar la cara por el amigo con una defensa pública, sin embargo, cómo borrar su negra historia que cuenta que de 2002 a 2005, su hermano Amado Guzmán Avilés fue el síndico de aquella administración y su otro hermano, Jesús, presidente del 2013 al 2017.

“En la actualidad Jesús es diputado federal del PAN por el mismo distrito”.

Joaquín, quien nunca se ha despegado de la ubre también ha trabajado como diputado local en la legislatura del estado, en el 2007 a 2010 y de 2013 al 2016, sin mucha pena ni gloria.

“Su hermana María del Rosario era diputada local en la LXIV Legislatura del Estado, pero dejó la curul para convertirse en Senadora de la República, luego de que el titular, Fernando Yunes Márquez, hijo del gobernador, dejó el cargo para ser alcalde de la ciudad de Veracruz”.

Y bueno, sobre este angelito pesan escándalos mediáticos, como en las pasadas campañas electorales del 2016, cuando difundieron un audio suyo con connotaciones sexuales o como el material en video que personas subieron a redes sociales para señalar que estaba desviando dinero del Congreso Local para pago de amigos y familiares.

Dice el “Mistico”, uno de los más acreditados columnistas de Veracruz que “También hay denuncias interpuestas, de manera legal, como la del 2001 (148E/2001) en la que es señalado por peculado e incumplimiento de un deber legal”.

“El problema fue tal que el gobernador, en ese entonces, Miguel Alemán, intentó impulsar su desafuero sin éxito, arropado por los legisladores panistas. Su hermano, Jesús Guzmán, ahora ex alcalde de Tantoyuca, fue denunciado por lesiones en el 2007, según el expediente penal 581/2007”.

En la actualidad medios locales aseguran que Guzmán Avilés posee una mansión del tamaño de toda una manzana en la ciudad de Tantoyuca, municipio con menos de 150 mil habitantes, la mayoría indígenas con problemas de pobreza.

También, en medios de comunicación ha trascendido que la empresa Transportes Guzmán Avilés es de su propiedad, con unos 15 tráileres además de una compañía constructora.

¿De este par quién es el “mejor” para dirigir al PAN en Veracruz?

Tiempo al tiempo.

*Premio Nacional de Periodismo