María Enriqueta en su visita a Coatepec (Segunda y última parte)
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CRÓNICA COATEPECANA
Dr. Jesús J. Bonilla Palmeros
jesus_bonilla1@hotmail.com
La recepción musical en honor a la poetisa se prolongó hasta muy noche, y en compensación ante las muestras de cariño y reconocimiento a sus obras literarias por parte de sus coterráneos, María Enriqueta tuvo a bien dedicarles a los asistentes la poesía “A mis paisanos”, creación literaria donde evoca el amor a su tierra y el agradecimiento ante tantas muestras de cariño.
Durante un mes que permaneció la poetisa en su tierra natal, fue objeto de diversas atenciones por parte de sus paisanos, entre las que podemos mencionar algunos días de campo y serenatas en el jardín público, hoy conocido como parque “Miguel Hidalgo”. Las visitas a fincas y ríos de la campiña coatepecana, aparte del recorrido por algunas de sus calles y casonas, le permitieron a María Enriqueta reunir importantes datos, que junto con los recuerdos de su niñez sirvieron de fundamento para la creación de algunas poesías firmadas en su añorado Coatepec. Poesías integradas a la segunda edición de su libro Rumores de mi huerto (1922) y en la cual destaca la obra titulada A Coatepec, que es mi tierra, un verdadero himno a su tierra natal y de la que reproducimos un fragmento:
A COATEPEC, QUE ES MI TIERRA
Para mis paisanos.
¡Oh, tierra del liquidámbar,
del jinicuil y el naranjo!
¡Oh, tierra de las magnolias,
donde mis primeros pasos,
con temblores de avecilla
que empieza a volar, cruzaron
sobre alfombras de jazmines
por el viento deshojados…
¡Oh tierra de los cocuyos,