México, Vaso Medio lleno o Medio vacío
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Por Armando Antonio Rangel González
El desarrollo de nuestro país está basado en el trabajo que mujeres y hombres realizan día a día, trabajo que se encuentra organizado bajo factores de producción donde intervienen diversos actores como lo son el sector privado, que es quien invierte su capital, la fuerza de trabajo que es el capital humano, el sector público, que es quien debe generar las condiciones para que los anteriores realicen un trabajo altamente productivo.
No obstante este proceso, existen factores intrínsecos que inciden de forma negativa o positiva en este proceso productivo; tal es el caso del sistema financiero de nuestro país, donde grandes capitales son manejados para generar especialmente riqueza, pero que se considera altamente volátil ante decisiones tanto del sector público como privado; en el mismo sentido, el gobierno provoca, ante decisiones mediáticas, escenarios de incertidumbre que nada abonan al crecimiento del país; de igual forma, decisiones de política económica generadas en el extranjero, tanto de gobiernos como de organismos económicos, inciden de forma directa en el crecimiento económico del país.
Actualmente, después de que el Presidente de la República diera a conocer su Primer Informe de Gobierno (Tercero para él), donde expusiera los resultados de sus primeros 9 meses de administración, el Gobierno Federal ve con optimismo el presente y futuro de México; con el cambio de rumbo a través de la llamada 4T, el Presidente Andrés Manuel López Obrador ve su vaso medio lleno, cargado de positivismo y con la satisfacción de que las cosas se están haciendo bien y que por primera vez, en muchos años, el gobierno ha centrado su atención en las sectores más desprotegidos.
Lo cierto, es que a partir de la llegada de la 4T, se ha cambiado la forma de hacer las cosas, algo que sin duda causo escozor e incomodidad en diversos sectores, los cuales no han aceptado que las cosas han cambiado y que los objetivos que se persiguen no son los mismos de antes; también hay que decir que la curva de aprendizaje del nuevo gobierno se ha prolongado en demasía, producto de falta de personal con trayectoria y experiencia probada para encarar los retos y los encargos que ostentan.
Por otro lado, están los detractores del nuevo gobierno, los partidos de oposición que se encuentran a la expectativa de lo que el gobierno federal propone y realiza, por obvias razones enfocados especialmente en los errores y, a su parecer, en las malas decisiones. Es por ello, que este sector ve el vaso medio vacío y con muchas interrogantes acerca del futuro del país.
Lo cierto es que se han vislumbrado aciertos y resultados positivos en diversos sectores, pero que su impacto se verá a mediano y largo plazo, algo que los opositores no desean, sino que contemplan resultados inmediatos, algunos ilógicos de pensar. Sin duda se va por el camino correcto y así se continuará siempre y cuando continuemos generando mujeres y hombres que decidan hacer simplemente “lo correcto”.