Nahle, toda una fichita
Nahle toda una fichita
Por
Edgar Hernández*
¡Su
esposo quiso suicidarse al ser descubierto en ilícitos!
Del “¡No coman ansias!” al
“¡Ya vete!” se mueve la figura presidencial hoy envuelta en un escándalo
multimillonario de corrupción esta vez gestado, no por Manuel Bartlet, sino por
la titular de Energía, Rocío Nahle.
Este domingo en medio de una
protesta motorizada, el llamado “Claxonazo contra AMLO” de millares de
ciudadanos de 40 ciudades del país inconformes por las políticas pública, falta
de empleos y crisis económica, estalla la bomba Nahle.
El diario Reforma, que ha de
alucinar el Peje, revela en su edición dominical que la Secretaria de Energía
entregó a su compadre Arturo Quintanilla Hayek, un super negocio de cinco mil
millones para la refinería de “Dos Bocas”.
De inmediato los morenos se
dieron a la tarea de desmentir la nota y descalificar al periódico.
La propia señalada envió una
nota aclaratoria, plagada de faltas de ortografía, en la que desmiente que haya
preferenciado al grupo “Huerta Madre”, propiedad de Quintanilla Hayek, primo de
la actriz Salma Hayek.
Ya para este lunes, sin
embargo, el diario de marras da nuevos datos sobre la creación al vapor de la
empresa “Huerta Madre” revelando que se constituyó cinco días antes de que
PEMEX le asignara un contrato por 4 mil 968.9 millones de pesos.
Se constituye con un capital
social de 60 mil pesos y suma al negocio a Juan Carlos Fong Cortés del grupo
“Compadres 100” y cabeza visible de la operación.
En paralelo la senadora Xóchitl
Gálvez presenta ante la Secretaría de la Función Pública una denuncia ante la
FGR para que investigue el procedimiento que siguió la adjudicación del
contrato “Grupo Madre”, empresa que carece de experiencia y desde el arranque
mostró un escaso capital social”.
Con las evidencias, la
denuncia y la “aclaración” de Nahle no aclarada y enlodada ante nuevas
evidencias, se hace obligatoria la licencia de la titular de Energía hasta que
quede satisfecha la querella legal y limpie su imagen.
En días pasados en este mismo
espacio dábamos cuenta del desmesurado apetito por el dinero de la dama en
cuestión, así como el desboque político de utilizar la plataforma que le da ser
la Secretaria de Energía para anotarse como candidata a dos gubernaturas, la de
Zacatecas de donde es oriunda y la de Veracruz, en donde se modificó la
Constitución para favorecerla.
“La que pegue primero”, ha
dicho a sus cercanos.
En realidad la vida de Rocío
Nahle García está llena de claroscuros, siempre salpicados por la transa y las
corruptelas.
Considerada como una de las
cinco más cercanas al Presidente Andrés Manuel López Obrador, guarda además en
sus haberes una recia influencia con el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez
en donde tiene incondicionales en más de
la tercera parte del gabinete.
Dispone además del control del
ayuntamiento de Poza Rica en donde tiene colocados a 10 de la familia.
Rocío Nahle siempre fue muy
inquieta y por las denuncias públicas se infiere que le gusta eso del “Moche”.
No le basta ser la Secretaria
de Energía, responsable de uno de los tres proyectos más importantes del
sexenio, la refinería de “Dos Bocas” en la cual el gobierno federal invierte
160 mil millones de pesos.
Y poco le preocupan los
desfiguros y mentiras públicas como la de afirmar en “La Mañanera” ante el
Presidente López Obrador, que había sido objeto de una ovación de parte de la
jerarquía de Arabia Saudita que gobierna la OPEP, afirmación que a la postre se
desmentiría colocándose el barril del petróleo mexicano en menos de un dólar.
Pero eso a la Nahle le vale ya
que es mujer de escándalos, de controversias.
En días recientes salió a la
luz pública que ella y los sobrinos de su compadre Quintanilla –el mismo de los
5 mil millones por contratos a Pemex- de pronto decidieron inventar una compañía
para vender respiradores al IMSS.
Consigna el diario “El Sol de
México”, la gestación de un contrato de 114 millones de pesos a una empresa que
se registró con 50 mil pesos en agosto de 2019, misma que habría obtenido
millonario contrato por la entrega de 100 ventiladores.
Tras la denuncia pública el
contrato se vino abajo al igual que el relleno sanitario que quisieron imponer
en Chinameca de donde echaron a Cuitláhuac, a Eric Cisneros y a Quintanilla a
patadas.
En realidad la historia de
Rocío Nahle está llena de páginas negras.
Sus inicios se
registran al servicio de una empresa de Resistol, luego un jugoso empleo por
cinco años en Pemex, por recomendación.
De ahí pasó más de
10 años dedicada a su casa al cuidado de sus dos hijas que tuvo con José Luis Peña Peña, un ingeniero mecánico que
llegó a ser subjefe de Mantenimiento en el “Complejo Petroquímico Pajaritos”,
en Coatzacoalcos.
En las páginas de
una investigación “Abusos
marcan a Rocío Nahle”, de la revista Eje Central, hoy
desparecidas de las redes sociales, se revela con lujo de detalle enumeraba
nombres, apellidos y números de los contratos mal habidos de Petróleos Mexicanos,
en donde fue protagonista de unos esos ilícitos que solía denunciar.
Según el
periodista Raymundo Rivapalacio, el esposo de Nahle era muy dado a pedir dinero
de forma clandestina, por lo que la Contraloría le hizo cinco investigaciones,
en la última, sería llevado a investigación lo cual lo puso al borde del
suicidio por la ingesta de pastillas para después encerrarse en su auto.
La vida de Nahle
es pues, todo un culebrón.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de
Periodismo