“¡No a un gobierno de puertas cerradas!”, Berlín Valenzuela
“¡No a un gobierno de puertas cerradas!”, Berlín Valenzuela*
Por
Edgar Hernández
Llama a los
veracruzanos a ¡No permitir que se agreda al Colegio de Veracruz!
“Los cargos públicos no son para enriquecerse”,
sostuvo el llamado padre del Derecho Electoral en México, doctor Francisco
Berlín Valenzuela en el conversatorio de “LINEA CALIENTE”, que se trasmite por
redes sociales.
Al hacer un balance de lo que ha sucedido en
Veracruz en el marco de la IV Transformación, en un largo de este diálogo donde
se hizo acompañar de doctores, un maestro y una alumna del doctorado del
Colegio de Veracruz, llamó al rescate de la institución.
En la charla, se desmenuzaron de manera minuciosa
los problemas que enfrenta el Colver al
pretender convertirlo en una escuela de adoctrinamiento comunista.
Ante una
audiencia que rebasó las 17 mil 400 reproducciones en la emisión del pasado
miércoles 2 de diciembre a la cual se sumaron los prestigiados portales de Claudia
Guerrero, Mussio Cárdenas, Jesús Ulín, Hilario Juárez, los seguidores de “Línea
Caliente” y portales de Coatzacoalcos, Coatepec, Chicontepec y el centro de la
entidad, los panelistas coincidieron en que se “debe redignificar la política y a la clase política”.
El emérito
doctor Berlín Valenzuela concluyó, al entrar a fondo en el tema del Colegio de
Veracruz, en que “No se puede permitir que se agreda la integridad de este
centro educativo, desvirtuando por intereses políticos los elevados fines y
objetivos que motivaron su creación”.
En el
conversatorio participaron además los doctores Heidi Monroy y Juan Pablo
Calderón, así como el maestro Julián Loyo y la periodista Claudia Guerrero, en
su calidad de estudiante del doctorado en Ciencias Políticas.
Por
resultar de interés general, el mensaje-conclusión del doctor Francisco Berlín,
presento la transcripción íntegra del mismo, con el mejor de los deseos de que
en alguna forma llame la atención de las autoridades del gobierno del
Estado:
“No cabe
duda que en los meses y años por venir, nuestro país y particularmente Veracruz,
vivirán momentos convulsos y difíciles.
Se aprecian
en el entorno múltiples problemas, generados -en gran medida- por el desempeño
desleal y deshonesto de numerosos funcionarios que llegaron al ejercicio de sus
cargos, sin estar preparados ética, profesional y políticamente para sus
delicadas responsabilidades.
Sus cartas
credenciales carecían de la experiencia y los conocimientos que la praxis y/o
la teoría política proporcionan.
Hay que
recordar que un hombre de estado, sin vocación de servicio, es tan dañino como
un ignorante y que un académico, sin la práctica que exigen las tareas de
gobierno, es un elucubrador de fantasías que, en el intento de hacerlas
realidad, se convierten en ocurrencias arrogantes que acaban afectando a la
sociedad.
De ahí
nuestro convencimiento de que El Colegio de Veracruz, representa una eficaz
instancia para formar cuadros que garanticen un mejor gobierno, al combinar el
saber con el hacer, la teoría con la práctica, el conocimiento con la acción,
pero sobre todo, que con el ejemplo de sus maestros, esta institución siga
siendo un recinto donde se formen seres humanos dotados de calidad moral y
principios axiológicos, inspiradores de su futura actividad como funcionarios
públicos, bien preparados para servir a sus semejantes, sin la perversa intención
de llegar a los cargos de gobierno con el único fin de enriquecerse y resolver
sus problemas económicos.
La sociedad
veracruzana, espera que el dinero que se invierta en centros educativos, como
El Colegio de Veracruz, se traduzca en un semillero de honestos servidores
públicos, que inspiren confianza por su comportamiento ante su pueblo y por su
sensibilidad para atenderlos diligentemente en sus oficinas, sin mantener sus
puertas cerradas, ni la comunicación cortada, apoyados por un ejército de cortesanos
siempre dispuestos a conservarlos alejados de la ciudadanía.
No es
posible, que un Estado como el de Veracruz, con tantos recursos naturales y con
un gran potencial humano, continúe en el fondo de los indicadores de
desarrollo, ni mantenga a miles de sus pobladores en indignantes niveles de
extrema pobreza.
Al llegar a
los 18 años de accidentada existencia, el Colegio de Veracruz, ha sorteado
múltiples obstáculos, derivados de la incomprensión e indiferencia de varios
gobernantes, que antepusieron la política sobre la razón.
El Colegio
de Veracruz, debe ser conducido por sus autoridades académicas por una ruta que
le permita encontrar soluciones alternas, formular propuestas y reflexiones
para superar sus carencias y dificultades, a fin de recuperar el tiempo perdido
y reencontrar el camino para el cumplimiento de sus metas y objetivos
originales.
Hoy más que
nunca, los habitantes de nuestro Estado, debemos trabajar unidos con pasión
creadora y lealtad al terruño que nos vio nacer, tratando de redignificar la
política y a la clase política, esforzándonos en conjuntar voluntades para
sembrar la semilla del futuro con los mejores hombres de Veracruz.
No
permitamos entonces, que se agreda la integridad de este centro educativo,
desvirtuando por intereses políticos los elevados fines y objetivos que
motivaron su creación”.
“¡Que sea
para bien de Veracruz y de México!”
*Conclusiones del Dr. Francisco Berlín Valenzuela, en el Conversatorio
sobre El Colegio de Veracruz, conducido por el reconocido periodista Edgar
Hernández, celebrado el 2 de diciembre con la participación de egresados y la
alumna del Doctorado en Ciencia Política, Claudia Guerrero
Agradezco a mis talentosos amigos participantes en este importante
panel, sus brillantes aportaciones para analizar los avances y retrocesos de El
Colegio de Veracruz.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de
Periodismo