OPINIÓN SIN SPOILERS – SPIDER-MAN: LEJOS DE CASA

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Por: Pablo Contreras Sánchez

Voy a decir esto de una vez: amo a Spider-Man. Como muchos en mi generación, yo crecí con la trilogía dirigida por Sam Raimi y protagonizada por Tobey Maguire, la cual ocupa un lugar muy especial en mi corazón, ya que la considero una de las principales razones por las que quedé enganchado con el cine desde muy pequeño. Con el estreno del reinicio liderado por Andrew Garfield en 2012, el mismo año que Marvel Studios sacudió a la industria con ‘The Avengers: Los Vengadores’, muchos especulamos sobre la posibilidad de ver a Spidey columpiarse a lado de Tony Stark y compañía, pero con los derechos cinematográficos del trepa-muros bajo la tutela de Sony, dicho escenario no era más que un sueño guajiro.

Sin embargo, cuatro años más tarde, Peter Parker, encarnado esta vez por Tom Holland, hizo su debut en el Universo Cinematográfico de Marvel con ‘Capitán América: Civil War’, como resultado de un acuerdo entre ambos estudios para compartir los derechos del personaje y su inmensa galería de villanos. Dicho acuerdo dio inicio a una especie de edad dorada para el arácnido, ya que durante los últimos tres años, hemos visto al personaje ser retratado de manera fiel y consistente en varios medios, incluyendo los videojuegos, la animación, y por supuesto, el cine.

’Spider-Man: Lejos de casa’ marca la quinta aparición del superhéroe en el UCM, así como su segunda película en solitario dentro de la continuidad de este universo. El mundo aún se encuentra lidiando con las consecuencias del chasquido de Thanos (Conocido ahora como ‘El blip’) así como el sacrificio que Tony Stark hizo para salvar al universo; particularmente, Peter Parker, quien no puede escapar de la sombra de su antiguo mentor, hasta que un viaje escolar a Europa le ofrece la oportunidad de tomarse unas merecidas vacaciones y de confesarle su amor a MJ (Zendaya), buscando llevar una vida más tranquila y normal. No obstante, cuando unas criaturas milenarias conocidas como ‘Elementales’ amenazan con devastar el continente entero, Peter no tendrá más opción que unir fuerzas con Quentin Beck/Misterio (Jake Gyllenhaal), un nuevo y poderoso aliado, para frenar esta amenaza y salvar el mundo una vez más.

Jon Watts repite como director después de hacer al trepa-muros grande otra vez con ‘Spider-Man: De regreso a casa’, y mientras esa fue un homenaje a las comedias juveniles ochenteras de John Hughes, ‘Lejos de casa’ se acerca más una película de viaje por carretera de la misma época como ‘Vacaciones’ y ‘Nada en común’. Watts trae de vuelta el humor y las espectaculares secuencias de acción que caracterizaron a la primera entrega, amplificando ambas cosas para esta secuela, y acompañándolas de un guion inteligente que, al igual que su predecesora, narra una historia de madurez donde Peter Parker aprenderá que ‘Un gran poder conlleva una gran responsabilidad’, mientras que la historia brinda continuidad y cierre a los discursos y conceptos explorados en películas anteriores del Universo Cinematográfico de Marvel, tales como los retos de la paternidad y pasar la antorcha a las nuevas generaciones. De hecho, las conexiones de esta película con el resto del Universo Marvel no se limitan a simples referencias o guiños (De los cuales hay bastantes, para regocijo de los fans), ya que se requieren de ciertos conocimientos de las veintidós películas anteriores para entender el panorama completo, lo que puede alienar a cualquier espectador casual que entre esperando disfrutar de una historia independiente; aunque, seamos sinceros: a estas alturas, ¿por qué estarías aquí si no eres fan?

Tom Holland continúa demostrando por qué su versión de Spidey conquistó el corazón de todos, incluyendo el mismísimo Stan Lee. En ’Lejos de casa’, Peter Parker se encuentra dividido entre elegir una vida normal o seguir con sus deberes como superhéroe, y a pesar de que vimos a Tobey Maguire enfrentar ese mismo dilema en ‘Spider-Man 2’ hace quince años, aquí Holland tiene la oportunidad de explorar nuevas matices gracias al bagaje previo del UCM, particularmente, su vínculo padre-hijo con Tony Stark. Después de un papel menor en ‘De regreso a casa’, Zendaya finalmente tiene la oportunidad de brillar como MJ, apartándose de los intereses amorosos anteriores del arácnido con un montón de ingenio, carisma y sentido del humor, además de que su química en pantalla con Holland es francamente adorable. Los amigos y aliados de Peter, incluyendo a Ned Leeds, Betty Brant, Flash Thompson y Happy Hogan, tienen su momento para brillar, aunque algunas subtramas que protagonizan acaban sintiéndose forzadas y como puro relleno (Por ejemplo, dos instancias de romances inesperados entre personajes secundarios que, aunque divertidas al principio, terminan yendo a ninguna parte).

Desde que jugué la adaptación a videojuego de ‘Spider-Man 2’ en 2004, he soñado con ver al personaje de Misterio en un filme del trepa-muros, y es que haciendo de lado su apariencia ridícula o personalidad exagerada, sus poderes están hechos a la medida para la pantalla grande, por lo que estoy feliz de informar que esta película le hizo justicia al personaje, y con creces. Una secuencia en particular, donde le vemos alterar la realidad a voluntad, es un verdadero agasajo visual (Triple verso sin esfuerzo). El personaje recibió un tratamiento similar al de El Buitre en ‘De regreso a casa’, ya que ha sido actualizado para audiencias modernas, y su historia de fondo expande el lore del Universo Marvel de maneras que no estaba esperando. Además, ver a Jake Gyllenhaal, uno de los mejores actores de esta generación, hacer berrinches con una pecera gigante en la cabeza, es de esas cosas que te recuerdan por qué amas el cine.

Un aspecto de la película que no pienso detallar (Ya que pretendo mantener esta reseña tan libre de spoilers como sea posible) es introducido, mas no explorado ni desarrollado debidamente. Esto podría decepcionar a los fans, ya que se trata de un elemento de que de inmediato llamó la atención de todos cuando se le mencionó en los avances y material promocional. La forma minimalista en que se acabó manejando fue, quizá, para mejor, ya que su inclusión profunda en la trama habría acabado complicándola más de lo necesario (¿Alguien dijo ‘El sorprendente hombre araña 2?’). Sin embargo, aún no sabemos qué nos depare el UCM de ahora en adelante, y con el propio Kevin Feige expresando interés de explorar dicha posibilidad a futuro, sólo nos queda esperar. También, cabe mencionar que la primera mitad de la película carece de la energía e impulso que tiene la segunda, aunque este quizá sea un problema que se solucione viéndola otra vez. Finalmente, el giro de tuerca más grande de la historia es demasiado predecible para cualquiera que tenga un conocimiento mínimo sobre los cómics, pero por fortuna, las sorpresas no acaban ahí, ya que las escenas post-créditos seguramente dejarán tu mandíbula en el piso.

VEREDICTO:

‘Spider-Man: Lejos de casa’ presenta una historia clásica del amigable vecino, introduciendo cambios bienvenidos de ritmo y locación para mantener a Spidey fresco, incluso después de seis apariciones en la pantalla grande en los últimos tres años. Aún si la primera mitad no está necesariamente a la altura del resto, esta película promete cosas nuevas y emocionantes para el futuro de la franquicia. Además, DIOS MÍO, ¡esa escena a mitad de los créditos! No puedo dejar de pensar en ella. Por cierto, ¿ya les dije que amo a Spider-Man?

CALIFICACIÓN: 3.5/5  estrellas.