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PANTEON DE COATEPEC SIN EL AMPARO DEL INAH

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PANTEON DE COATEPEC SIN EL AMPARO DEL INAH

Historiador. Luis Alejandro López Juárez

 

Desde hace por lo menos dieciocho años el panteón municipal de Coatepec no cuenta con lineamientos oficiales expedidos por el INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia), que procuren tanto el mantenimiento como la preservación de sus monumentos históricos. En el año 2003, un año antes de la elevación de Coatepec como Pueblo Mágico, fue cuando por última vez el INAH tuvo un acercamiento con la regiduría que en aquel entonces llevaba la comisión administrativa del cementerio coatepecano.

 

Se tenía contemplado un proyecto de preservación, el cual quedó en el olvido tanto por dicho instituto como por las diferentes administraciones municipales que han transcurrido al día de hoy. Tuvieron además la intención de contabilizar el número de tumbas históricas, que son aquellas anteriores a 1930, las cuáles son parte de los 376 monumentos históricos que supuestamente existen en todo Coatepec, número que varía según las diversas fuentes. Trabajo incansable de localización de las tumbas antiguas, es en el que se ha volcado desde hace algunas décadas don Miguel Martínez, actual director del panteón municipal.

En entrevista con la actual Regidora Segunda, Lic. Tizania Quijada López, encargada de la comisión administrativa del cementerio, afirma que se han encontrado irregularidades en la forma como se trabajaba anteriormente: “Ha existido una copia y pega entre los reglamentos y lineamientos con los que se dirigía el panteón”. En otras palabras, la regidora asegura que se está trabajando en un documento original que propicie el buen manejo del cementerio, instando a trabajar conjuntamente con el INAH, sin embargo, cada administración municipal a futuro podría no contemplar lo que se viene preparando.

 

Un ejemplo de trabajo firme se centra en el municipio de Naolinco, poseedor de uno de los panteones históricos más bellos del país, el cual fue elevado a “Patrimonio histórico y cultural de la nación”, a la altura de los cementerios más importantes de la Ciudad de México como lo son: el “Panteón del Tepeyac”, “El Panteón de Dolores” o el “Panteón Francés”.  El cementerio de Naolinco es un verdadero campo santo, se encuentra limpio y en perfecto estado los 365 días del año, cada una de las tumbas tiene un cuidado especial gracias al trabajo en conjunto entre el “INAH-Ayuntamiento y Sociedad Civil”, que luchan diariamente para preservar su valor histórico y cultural.

En Coatepec dado que no existen lineamientos y normas sólidas conforme a la ley, al día de hoy se puede observar como algunos propietarios de tumbas históricas han destruido su encanto original para “modernizar” lo que será su última morada, y es que el Ayuntamiento puede contribuir a la limpieza y el embellecimiento de cementerio, pero no en la modificación arquitectónica de las tumbas, para ello tendría que intervenir y ser asesorado estrictamente por el INAH.

 

Las tumbas históricas se encuentran localizadas desde la entrada hasta el centro en diferentes direcciones, supuestamente el sepulcro más antiguo data de 1855, aunque no se pudo localizar el día que tuve la oportunidad de concretar un recorrido oficial dentro del cementerio, por lo que entonces la tumba más antigua que le mostraron a un servidor pertenece al finado Narciso Sanabria (DEP) acaecido 6 de agosto de 1860. Existen varias tumbas que al paso del tiempo ya no cuentan con placas que den fe de las personas sepultadas ahí, otras tantas que sus lápidas son prácticamente ilegibles, todas ellas podrían correr el riesgo de ser robadas o subastadas, aunque la administración afirma que es imposible ya que siguen estando bajo perpetuidad. Desde esta redacción y casa editorial, estaremos atentos ante las posibilidades que puedan surgir.

 

Por ello es necesario trabajar urgentemente en un “control formal de lineamientos, reglamentos y normas” que no solo se concrete, sino que se respete y se le dé continuidad en las administraciones municipales venideras, independientemente del color y del partido que gobierne, para el enriquecimiento histórico y cultural del cementerio municipal de Coatepec.