PEPE, CANDIDATO DE LA SOCIEDAD CIVIL
PEPE, CANDIDATO DE LA SOCIEDAD CIVIL
Por Edgar Hernández*
Se observa un sensible ánimo
ciudadano en su favor.
Sin dejar de ser institucional
ni fiel a su partido en el cual ha militado toda su vida, Pepe Yunes va por la
candidatura ciudadana que será la que determine el rumbo de Veracruz a partir
del año próximo.
Cuidadoso, cauto, sin
estridencias o exhibicionismos Pepe, como es conocido por la ciudadanía, cumple
con su tarea.
Recorre la entidad con el
mismo ánimo manifiesto en las últimas dos décadas en que fue electo
representante popular, sea como diputado local, federal o senador de la
república.
Recoge y canaliza las demandas
ciudadanas. Toma contacto con grupos sociales. Atiende las exigencias de
construir un marco legal en favor de las mujeres veracruzanas que son mayoría y
se reúne con los sectores productivos.
Es asimismo la voz disidente
del Congreso de la Unión. No gusta a la 4T. Desagrada les diga sus verdades. Es
la piedra en el zapato de la aplanadora morena y sus aliados, PRI incluido.
Sin embargo, no hay plazo que
no se cumpla ni deuda que no se pague.
De acuerdo a los tiempos
políticos y el calendario electoral, Pepe solicitará licencia a la diputación
federal para buscar la candidatura de unidad que lleve el respaldo de la
sociedad civil y sea consensuada por los partidos políticos opositores.
Parte de la base que sea la
preferencia ciudadana manifiesta en las encuestas internas, la que marque la
ruta.
Y aun cuando Movimiento
Ciudadano de Dante Delgado guarda cautela, no deja de observar en el peroteño
el respaldo que le dispensan amplios sectores ciudadanos y sectores productivos
de los 212 municipios veracruzanos.
Mientras la “Alianza Va por
México”, en consulta con las dirigencias nacionales del PAN, PRI y PRD, se
mantiene firme en su postura de que sean las consultas demoscópicas las que
marquen la pauta para la selección del candidato por Veracruz.
A nivel nacional se busca no
solo rescatar la plaza, sino que Veracruz regrese a ser la cuarta reserva
electoral opositora para que, con las otras ocho plazas estatales con mayor
número de votantes, se gane la presidencial.
Hoy, como decimos en provincia,
hay entusiasmo en México por el trabajo de Pepe.
Más por su postura respetuosa
de que si no es el abanderado se sumará con todo a quien la preferencia
ciudadana postule “porque de lo que se trata es de rescatar a Veracruz”.
Pero sí es el elegido, se ha propuesto
alcanzar la gubernatura para conformar un gobierno de coalición que recoja los
anhelos de la sociedad civil manifiesta en todas las corrientes
político-ideológicas.
Será como decían nuestros
gobernantes de antaño “un gobierno del pueblo y para el pueblo”.
Hoy que se los tiempos acercan
las definiciones, las condiciones político-electorales se muestran
definitivamente favorables para la oposición ciudadana y partidista ante los
pésimos resultados de un gobierno de laboratorio que solo agudizó la corrupción,
crispó la seguridad pública y destruyó la economía.
Morena, como va, regresará en
el 2024 a la nada.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo