PEPE, CIERRE OPTIMISTA; NAHLE YERROS, FRACASO Y DIVISIONES
PEPE, CIERRE OPTIMISTA; NAHLE YERROS, FRACASO Y DIVISIONES
Por Edgar Hernández*
Llegan a su fin las
precampañas en donde se percibe con claridad una ventaja opositora de Pepe de
cara a una pretendida elección de estado ante el fracaso de la zacatecana.
Todo en el marco de una
campañita negra en donde el principal elemento de ataque es que Pepe Yunes no
se levanta temprano ¡Vaya creatividad de los propagandistas!
Asoma, desde luego, la
verdadera guerra sucia ahora que venga la campaña electoral para abril-mayo.
Esa que habrá de incluir no
solo libelos y campañas de desprestigio, sino cruzadas de violencia y
asesinatos a opositores, de lo cual ya muestran visos.
Previsible, tal como se
observó en las elecciones intermedias, la acción del crimen organizado; las
amenazas con auditorías y cárcel a los 212 presidentes municipales si no
obligan el voto en favor de la fuereña y la compra del voto, un voto que -hoy
más que nunca- habrá de cotizarse por encima de los dos mil pesos.
Asoma, asimismo, también ya
desde ahora, la campaña de los insepultos.
De pronto las bardas de los
panteones estatales y municipales empezaron a teñirse de Morena invitando, no
se sabe si a los muertos o a sus seguidores, a votar por Roció Nahle.
Al más viejo estilo priista
-al fin la propia zacatecana fue priista- ya preparan en contubernio con el
OPLE, las listas nominales en donde los fallecidos, con credenciales de
elector, se levantarán y no precisamente para andar, sino para estar presentes
en las casillas.
Eso no lo dice la Biblia, lo
dice el Peje.
Terminan pues las precampañas.
Pepe en Xalapa, la zacatecana en Alvarado.
Cada quien con su cada cual.
Pepe con el arrastre ciudadano
que da su esperanzador mensaje, Nahle en una presunta unidad inexistente y ensombrecida
por sus desatinos.
El último sucedió ayer ante el
reclamo ciudadano del denominado “Frente Chucho el Roto” que le reclamaba una
firma solidaria a la exigencia de baja en las tarifas eléctricas, baja que
nunca se dio cuando fue titular de la Secretaría de Energía y que por respuesta
a los quejosos fue un mohín de enojo de esta poco simpática dama, de sangre
pesada.
El caso es que durante esta
breve precampaña cuando no fueron las vallas de acero que impedían al pueblo
bueno (léase acarreados) acercarse a la oriunda de Zacatecas, fueron sus
confusiones históricas en donde para su infortunio nunca localizó a Virgilio
Uribe ni en barco, ni en monumento, tampoco en persona porque cuando llegó a
saludarlo se encontró con que andaba fuera (desde 1914 cuando murió), pero si
tuvo la enorme suerte de estrechar la mano de José Azueta (también muerto en
1914) cuando visitó el municipio del mismo nombre.
Son chascarrillos y burlas por
su ignorancia enciclopédica de la historia de México y la de Veracruz que ha ofrendado
la vida de sus mejores hombres en defensa de nuestra soberanía.
Terminan pues, las precampañas
y lo que sigue es la guerra, la guerra que viene para animar los panteones con
nuevos inquilinos, pero ni así, ya que esto de la alternancia es imparable.
Ya se siente el cambio en
calles y veredas, en campos y ciudades. Nuevos aires recorren la espina dorsal
del Golfo de México…
Hasta Palacio Nacional ya
llegaron los vientos del cambio.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo