Persiguiendo sueños
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Por Héctor Larios Proa.
Como miles de niños que sueñan emular a personajes famosos del futbol mundial, Alí Bautista Tlaxcalteco, también quiere ser futbolista profesional. Desde pequeño destacó por una pierna zurda educada que lo ha llevado a pisar muchas canchas del país. Su disciplina y entrega a sus tareas lo han llevado al Necaxa a sus escasos doce años de edad. Hoy regresa a su casa después de siete meses en Aguascalientes persiguiendo sus sueños de futbol, ahí conoció la soledad al mismo tiempo y la infaltable responsabilidad para lograr sus metas. Es titular de su categoría sub 13 y nuevamente es considerado para el próximo torneo.
El Regional sigue sus pasos y platica con el joven deportista. ¿Qué aprendiste este año? Nos mira fijamente, respira hondo, el joven introvertido, responde: a adaptarme rápido, poder socializar, convivir con otros compañeros, otras costumbres, otra comida, un nuevo entorno dentro y fuera de la cancha. Este proceso lo venía viendo con mis maestros esto me facilitó acelerar el proceso, me fui con confianza en mí.
¿Cómo es el día de un niño deportista fuera de casa? No tarde en adaptarme al nuevo estilo de vida, que es muy exigente, es disciplina. Me levantó a las 5:30 para prepararme para la escuela, asearme, desayunar y tomar el autobús que va por nosotros a las 6:30, todo esto lo tengo que hacer solo, ya no está mamá y papá que me daban todo, ahora es mi responsabilidad, entró a las 7 a la secundaria y regreso a las 2:00 de la tarde. Regresamos a la casa club dejo mis cosas en la habitación para ir al comedor y más tarde prepararme para el entrenamiento es de 3:30 a 5:30. Sí no voy a la escuela no soy considerado para el partido de la semana, nos advierte.
Alí, fue alumno de la primaria Enríquez donde obtuvo buenas calificaciones y ahora en la secundaria continua entre los mejores promedios con un 9.6. ¿Qué esperas para el 2020? Llegar mejor preparado para ser titular en el campeonato nacional sub 13 donde todos los equipos profesionales de México participan en el torneo y claro ser campeón con mi equipo.
¿Con qué te quedas de la experiencia este año? Sin dudar responde, vencer mi timidez, adaptarme rápido, ser ordenado y disciplinado, repetir una y otra vez la misma rutina y los ejercicios hasta dominarlos. Me ayudo que me subieron a una categoría mayor, fue más exigente, el entrenador para mucho el entrenamiento y corrige, uno debe estar atento y aprender rápido, fue difícil, pero lo logré. Un día me dijo: quiero que me ayudes jugando con el equipo de tu categoría para unas visorias, eso me dio mucha más confianza. Las pruebas duraron tres semanas, al terminar hicieron un corte, para quedarse con los de mejor desempeño, lo pasé. Jugamos en la Liga Premier.
¿Cómo son los entrenamientos? Mucha técnica, el entrenador quiere que manejemos bien las dos piernas, juguemos varias posiciones, disputar las jugadas con intensidad y pasar rápidamente de defensivos a ofensivos. En torneo fue duro al inicio porque jugábamos contra niños 1 o 2 años más grandes, al entrenador le da más importancia al carácter mostrada en la cancha, en la segunda vuelta nos fue mejor.
Se despide Alí, con el compromiso de regresar a su pueblo con buenas noticias, y con las metas cumplidas para el siguiente año. Camina con seguridad portando la playera de concentración del Necaxa que sea ganado a pulso.
Alí Bautista, un niño con buenos cimientos, crece día a día con voluntad e independencia, persiguiendo sus sueños y pisando fuerte en su carrera deportiva que le depara nuevos retos.
